Mantener el éxito alcanzado es clave

El comportamiento del mercado de la fabricación y la distribución de la ferretería y el bricolaje del último año confirma la continuidad de la tendencia al alza registrada a partir de 2015. Si bien es cierto que, hasta ese momento, el sector sufrió los efectos de la crisis global que afectó a nuestro país, hace ya tres años que las empresas han conseguido iniciar una recuperación que deja atrás ejercicios de caída acumulada. El sector llegó a perder un 39% de su actividad, pero, con trabajo, esfuerzo y muchas ganas, hemos llegado a principios de 2018 con una base mucho más sólida y positiva, que nos permite avanzar en la construcción de nuevos proyectos.

Sin embargo, continuamos teniendo retos por delante: el sector presenta una dificultad singular en todo lo referente a la obtención de indicadores de seguimiento que nos permitan conocer la situación de las distintas categorías de producto, hacer un seguimiento de las facturaciones de manera sencilla o visualizar fácilmente la evolución del mercado. Ello es debido a la capilaridad de la distribución del sector, en la que participan tanto grandes grupos como pequeños puntos de venta. Estamos ante una situación atípica respecto a otros sectores, en los que la pedagogía en materia de conocimiento de datos ha sido muy superior.

Por ello, en el Comité Aecoc de Ferretería y Bricolaje existe una voluntad férrea de dar visibilidad a los datos y hemos impulsado, junto a la Afeb, un barómetro trimestral para medir la evolución del sector. Obtenemos la información gracias a la colaboración entre distribuidores y fabricantes que, comprometidos con el sector, deciden ponerla al alcance del público interesado.

Así, la fabricación está recogiendo los frutos de todos los esfuerzos de reestructuración derivados de la crisis. La exportación está dando buenos resultados y seguirá creciendo dada la buena relación calidad precio que ofrecen. Por su parte, la distribución cuenta con grandes líderes del mercado que se mantendrán, mientras la distribución tradicional debe poner en valor la cercanía que ofrece al comprador y acelerar su transformación digital si quiere seguir siendo competitiva.

La mayoría de actores relevantes del sector consolidarán proyectos vinculados a su presencia en Internet: la omnicanalidad lleva tiempo en boca de todos. La adaptación al consumidor es el único camino y formar parte de su día a día nos acerca al éxito comercial.

Esperamos para este 2018 mantener la misma tendencia al alza que venimos registrando en los últimos años poscrisis, esto es, un 5%. Es un muy buen dato para un sector consolidado como el nuestro. No hay que perder de vista las variables que influyen en el mismo: datos macroeconómicos, economía familiar, construcción de vivienda pública, recuperación del mercado inmobiliario, etc. El futuro pasa por la diferenciación y la innovación.