Adiós, Patxi

El éxito de visitantes registrados en la pasada edición de la Bienal de la Máquina-Herramienta, junto a los generalizados comentarios de los expositores, dan a entender, inequívocamente, un relanzamiento de la actividad inversora en el sector de máquinas y de equipamiento en general.

Ello no significa que pudieran encontrarse novedades tecnológicas singulares, por lo menos para quienes visitaron la última EMO. A nivel de máquinas herramienta o metrología pudieron apreciarse únicamente mejoras de detalle, si bien en el campo del software algunas empresas españolas –Lantek, Idpsoft, entre otras– mostraron realizaciones considerables, en particular para corte de chapa. La novedad más interesante de fabricación española en el terreno de las máquinas-herramienta no fue expuesta físicamente, sino sólo a través de video: la máquina de motores lineales de D+S Sistemas. En lo comercial, porque en lo científico-técnico los principales centros tecnológicos –Tekniker, Ideko, Fatronik– mostraron realizaciones preindustriales (y algunas de aplicación real) de enorme interés, de las que MetalUnivers se ocupará en ediciones sucesivas.

Esta edición de la Bienal tuvo la particularidad de ser la última que se celebra en el recinto tradicional –allí donde, en 1962, se celebró la primera edición (ver MetalUnivers nº 4). Los motivos del cambio de recinto pueden encontrarse en la posibilidad de poder alojar, por lo menos, a los cerca de 100 expositores que no tuvieron cabida, por saturación de espacio, en esta edición. Y tal vez entonces los grandes fabricantes de herramientas, ahora ausentes, deseen participar.

Más en particular, quedó también patente la completa gama de productos editoriales de Anuntis Interempresas, que fueron ampliamente distribuidos durante el salón: la publicación comercial Interempresas Metalmecánica, el Catálogo General de la Industria Metalmecánica, y el portal Interempresas.net. También, la revista técnica MetalUnivers, asociada al portal MetalUnivers.com, cuyo número de visitas, cercano ahora a las 50.000 mensuales, no cesa de aumentar mes a mes (según control OJD www). MetalUnivers revista, por su parte, sigue los pasos reglamentarios para disponer de este control –lo que permite, ya en el presente número, acogerse al mismo.

MetalUnivers, que se había nutrido de la erudición y entusiasmo de Patxi Aldabaldetrecu para la confección de la sección histórica del pasado número, quedó profundamente impresionado, tan pronto se inició la Bienal, al tener noticia de su fallecimiento repentino el sábado anterior. No llegó a ver su trabajo en formato impreso, en el que había puesto gran esfuerzo e ilusión (su largo artículo histórico no era una reproducción de su magnífico libro, sino que fue realizado ad hoc para la ocasión). Aunque sí lo había intuido en el área de trabajo por Internet que se iba confeccionando y perfeccionando, hasta llegar a la versión definitiva (ver en www.metalunivers.com/arees/historia).

Nos permitimos pues dedicar a Patxi esa edición de MetalUnivers (nº 4), como homenaje póstumo –con el que no hubiéramos deseado encontrarnos– a una de las personas que más han contribuido al desarrollo de la máquina-herramienta en el País Vasco. Y, de forma muy sentida, al sector en general y a su familia en particular.

5) METALUNIVERS Marzo 2002