Salas blancas

En Envaselia fabricamos nuestros envases para el sector farmacéutico en sala blanca. Así, garantizamos los estándares de higiene, calidad y pureza que exige esta industria.

Otros ámbitos que requieren las condiciones ambientales de una sala blanca son el sector alimentario (especialmente en la fabricación y el envasado de productos comestibles), la industria química, el sector cosmético, el sector sanitario (hospitales, fabricación de instrumental, laboratorios, quirófanos…) y el sector tecnológico (aeroespacial, nanotecnología…).

Para ser considerada una sala blanca, no basta con que una habitación esté limpia, sino que debe cumplir una serie de requisitos y condiciones:

• Filtrado del aire. El aire normalmente cuenta con micropartículas de polvo imperceptibles a la vista, pero que contaminarían el ambiente de una sala blanca. Para evitar esto, cuentan con un sistema de filtrado que limpia el aire que procede del exterior de este tipo de microorganismos. Además, este se renueva con frecuencia.
• Esquinas redondeadas: En una sala blanca no hay cantos o esquinas, sino que los acabados son redondeados, para evitar que se acumulen el polvo o la suciedad.
• Presión del aire: Otra característica de las salas blancas es que la presión en ellas es ligeramente superior a la del exterior. De esta manera, el aire de la sala blanca se mantiene dentro de ella, y el aire de fuera no puede entrar.
• Climatización: La temperatura es otra de las condiciones que se miden de forma estricta en una sala blanca. Debe existir en ella un sistema de climatización que mantenga siempre la temperatura y humedad deseadas.
• Trajes aislantes: Las personas que entran a trabajar a una sala blanca no pueden hacerlo con ropa de calle, sino que emplean trajes protectores completamente limpios, así como otros equipamientos, como mascarillas, guantes y gafas.
• Limpieza exhaustiva: Las salas blancas cuentan con los sistemas de limpieza más innovadores, tanto para la propia estancia como para cualquier persona que acceda o salga de ella.

La avanzada tecnología presente en las salas blancas incrementa su coste, haciendo que sean un recurso costoso a nivel económico. Sin embargo, se trata de una garantía de seguridad e higiene en las industrias antes citadas, por lo que utilizar una sala blanca es muy recomendable, cuando no indispensable.

En Envaselia trabajamos con el sector farmacéutico, por lo que empleamos salas blancas en la fabricación de envases para medicamentos. Así, cumplimos con creces las demandas de calidad de calidad de un mercado altamente regulado y exigente.