El Clúster de la Energía de Aragón propone medidas para que el sector avance

Pedro Machín, presidente de Clenar, y Jesús María Sahún, presidente de la Comisión de Comunicación del clúster, analizaron el 16 de diciembre las novedades sobre la tramitación del Proyecto de Ley de Medidas Urgentes en Materia de Energía.

El viernes 13 de diciembre finalizó el plazo para presentar alegaciones al texto legislativo y los días 19 y 20 de diciembre se celebrarán sesiones plenarias en las Cortes de Aragón, fechas en las que el proyecto de Ley podría recibir la aprobación por parte de la cámara parlamentaria autonómica. “El sector de la energía es uno de los más regulados, pero, para poder seguir siendo motor económico y de atracción de importantísimas inversiones para la comunidad autónoma, necesita estabilidad, consenso, inversiones y respaldo”, apuntó Pedro Machín, presidente del Clúster de la Energía de Aragón, entidad que agrupa a más de 100 empresas, instituciones y centros de investigación del sector. “El actual proyecto de Ley es una buena noticia porque parte del consenso político, ya que coincide en un 80% con el anterior decreto paralizado por el Tribunal Constitucional”, destacó.

“Algunos medios de comunicación, analizando la realidad económica de Aragón, empiezan a hablar del denominado ‘milagro económico aragonés’. Lo que está pasando en Aragón en los últimos cinco años no es, sin embargo, un milagro; es perfectamente explicable y tanto los asociados de Clenar como el propio clúster están contribuyendo a ello. Los recursos de Aragón, el territorio, las comunicaciones, el agua y, sobre todo, la energía son las fuerzas que está atrayendo a numerosas empresas a Aragón y que van a permitir mejorar la competitividad de las que ya están”.

En este contexto se está tramitando en las Cortes de Aragón el Proyecto de Ley de Medidas Urgentes en Materia de Energía, una propuesta del actual Gobierno autonómico que quiere mantener y proyectar al futuro el entorno normativo y de gestión propiciado por el anterior. El consenso en la defensa y puesta en valor de los activos de la comunidad autónoma y su proyección a futuro es lo que Clenar pide a las fuerzas políticas aragonesas. Y hacerlo con los ajustes necesarios para lograr el máximo apoyo político, apostando por una regulación que está dando magníficos frutos desde que, en 2016, se sentasen las bases para un normal funcionamiento del sector energético —eólico primero y fotovoltaico y del resto de tecnologías después—.

Son numerosas las propuestas planteadas por los grupos parlamentarios presentes en las Cortes de Aragón. A ellos corresponde decidir cuáles se incorporan o no al Proyecto de Ley. Lo esencial para continuar desarrollando el sector energético -con las demostradas sinergias que genera con otros sectores económicos- está ya presente en la norma que remitió el actual Gobierno y que coincide, en lo esencial, con la aprobada en 2023 por el anterior. Esas bases esenciales son las que, en opinión del clúster, deben mantenerse. “Clenar, en este sentido, apoyará y ayudará para lograrlo, así como colaborará con quienes, coincidiendo en estos planteamientos, soliciten su colaboración”.

Para que el sector de la energía de Aragón pueda seguir avanzando con garantías de seguridad jurídica, económica y técnica y cumplir su demostrada función como motor de desarrollo de la comunidad, Clenar propone cinco medidas, determinantes de otros tantos objetivos. En primer lugar, consolidar un marco normativo estable, sencillo y objetivo que propicie agilidad administrativa: “Aragón necesita mantener un marco normativo conformado por normas estables, sencillas y objetivas para que el sector de la energía continúe progresando. Los proyectos de inversión -tanto en el propio sector como en otras industrias estratégicas para la Comunidad- también se beneficiarán de este entorno regulatorio porque todas las actividades económicas requieren seguridad jurídica y agilidad administrativa, removiendo trámites innecesarios y agilizando los indispensables que se mantengan”.

Asimismo, propiciar una visión estratégica del sector con el máximo consenso político: “El sector de la energía se ha revelado como un polo de desarrollo clave para Aragón, que refuerza el dinamismo de otros sectores económicos y la capacidad de atracción de inversiones en nuestro territorio. Para mantener y reforzar esta ventaja competitiva que ha logrado la Comunidad Autónoma y proyectarla hacia el futuro, siendo conscientes de las dificultades que en el momento actual existen para lograr unanimidades, necesitamos y reclamamos el mayor consenso y respaldo político y social posible”.

La tercera medida será reforzar la implicación de los agentes del sector en su futuro: Las decisiones que afectan al sector deben contar también, además de con respaldo político, con el máximo consenso posible con los actores del propio sector. Por lo tanto, resulta fundamental la escucha activa por parte de las administraciones y grupos políticos propiciando sobre esa base, impulsando el nuevo Foro de la Energía, la participación de los agentes del sector implicados y de sus representantes.

Aragón se enfrenta a grandes desafíos energéticos a corto y medio plazo que requieren inversiones en redes e infraestructuras, las cuales se deben planificar, tramitar y/o ejecutar con la máxima celeridad posible. Es necesaria la máxima coordinación y colaboración por parte del Gobierno central y proactividad del actual Gobierno de Aragón para impulsar grandes infraestructuras que requieren autorizaciones a nivel estatal. Es absolutamente necesario que se acelere la aprobación de la nueva planificación de la red de transporte para el periodo 2026-2030 y que se convoquen cuanto antes los concursos para la asignación de capacidad de demanda y de evacuación en la red de transporte.

Por último, el fomento de las comunidades energéticas y del autoconsumo, residencial e industrial. La mayor fortaleza del sector energético en Aragón —además de la madurez de las empresas presentes en Clenar— es la disponibilidad de recursos eólicos, solares o hidráulicos, entre otros. “La mejor forma de aprovecharlos directamente es impulsando el autoconsumo en todas sus formas, sin exclusiones y superando barreras regulatorias, como propone el Proyecto de Ley”. Si el autoconsumo a pequeña escala, a nivel residencial o para otros usos, contribuye a abaratar la factura energética de ciudadanos o pequeñas y medianas empresas, el autoconsumo a gran escala puede conseguir el mismo objetivo —con efecto tractor de nuevas inversiones— para grandes consumidores de electricidad, a los que se vinculen mediante los proyectos energéticos prioritarios que propone el Proyecto de Ley, vinculando plantas de energía renovable.