Entrevista a Màrius Massallé, concejal de Medio Ambiente y Sostenibilidad del Ayuntamiento de Terrassa
21 de enero de 2011
¿Qué supone para el Ayuntamiento de Terrassa la concesión de este premio?
Este premio representa sobre todo la satisfacción por el reconocimiento a una trayectoria, que ahora ya podríamos definir como larga, apostando decididamente por las energías renovables en nuestro municipio. Y que sea concedido gracias a una de nuestras apuestas estrella, como es la biomasa, es aún si cabe más satisfactorio, ya que en su día fue un camino iniciado casi en solitario por nuestra corporación y para algunos pudo ser visto como algo ‘exótico’. El tiempo ha avalado esta decisión y ha demostrado ser una apuesta ganadora.
Avebiom ha valorado la trayectoria del Ayuntamiento como pionero en la promoción e implantación de calderas de biomasa. ¿Qué le llevó a apostar por esta energía renovable?
El Ayuntamiento de Terrassa no sólo apuesta por las energías renovables sino por la diversificación de éstas. Cuanto mayor sea la diversificación del origen de las energías renovables, mayor será la seguridad de suministro. En principio se apostó por la solar térmica y posteriormente por la fotovoltaica. La biomasa era pues, un paso lógico en la apuesta por la diversificación de las energías renovables.
¿Qué valores destacaría del uso de la biomasa?
La apuesta por la biomasa es una acción ‘fácil de vender’. Es una energía de origen local y por tanto no dependiente de vaivenes políticos y sociales de los países exportadores. Incide positivamente en el cambio climático, ya que el balance de emisión de gases invernadero (GEI) es cero. Representa una importante mejora en la gestión forestal y reduce significativamente el riesgo de incendio de los bosques. Es una gran oportunidad de generar empleo local neto. Además, la tipología de trabajo realizado, y que este se realiza en espacios abiertos, lo hace especialmente adecuado para personas en grave riesgo de exclusión social.
Actualmente cuentan con diez calderas instaladas en centros docentes y en el Centre d’Informació Ambiental de Can Bonvilar. ¿Qué inversión aproximada han supuesto estas instalaciones?
La inversión realizada suele ser más alta si la comparamos con la inversión realizada en energías más convencionales. Esto es debido sobre todo a la necesidad de instalar silos para contener la biomasa, lo cual incrementa los costes en obra civil. La inversión total en las diez instalaciones que disponemos actualmente es de aproximadamente 1.300.000 euros.
¿Tienen previsto instalar más calderas de biomasa en edificios municipales?
La estrategia del Ayuntamiento de Terrassa referente a la mitigación del cambio climático, en que incrementar el número de calderas de biomasa es una de las acciones proyectadas, se encuentra reflejada en el Pla d’Acció d’Energies Sostenibles de Terrassa (PAES), en el cual se indica que el numero total de calderas de biomasa instaladas el año 2020 serán 16.
Además de la biomasa, ¿por qué otras energías renovables ha apostado el Ayuntamiento de Terrassa para sus instalaciones?
Como se ha comentado anteriormente, las energías renovables por las que el Ayuntamiento de Terrassa inicialmente apostó son la solar térmica y la solar fotovoltaica. Terrassa elaboró su primera ordenanza solar térmica en 2002, siendo así una de las ciudades españolas pionera en impulsar y regular normativamente esta fuente de energía. Tras la aprobación de la ordenanza, y en un periodo de cinco años, se pasó de 1.800 metros cuadrados de paneles solares instalados a más de 16.000. En lo que se refiere a solar fotovoltaica, Terrassa cuenta con 10 instalaciones de este tipo en edificios y equipamientos municipales, con una potencia de 66 kW/h. Actualmente estamos en proceso de estudio de las posibilidades energéticas que puede proporcionar las unidades minieólicas (pequeños molinos de viento para instalar en suelo urbano), y a pesar de la actual situación económica intentamos iniciar este camino con el patrocinio de empresas del sector y de la Universidad Politécnica de Catalunya (UPC), con campus en Terrassa.
¿Cree que la Administración debe dar ejemplo a sus conciudadanos con estas iniciativas?
La Administración Pública y sobre todo la Local, debe actuar como guía y como referente en la aplicación, no sólo de energías renovables, sino de todo tipo de políticas que supongan un incremento del ahorro y de la eficiencia energética.
Sin embargo, su éxito no puede depender exclusivamente del consumo por parte de las administraciones públicas. Es la iniciativa privada la que ha de dar los pasos adecuados para universalizar su uso y hacerlas realmente competitivas frente a las energías de origen fósil.
Háblenos más del ‘Pla pilot de la dinamització de l’ecotecnologia local’ (Plan piloto de la dinamización de la econtecnología local)
Ya hace algún tiempo que la ciudad de Terrassa impulsa un plan para la promoción de la innovación local. Para ello se establecieron una serie de clústeres de ecotecnología en los que participan algunas de las principales instituciones y empresas de Terrassa, con el apoyo de otras entidades supramunicipales como la Generalitat a través del departamento de ACC1Ó o el Consell Comarcal del Vallès. Uno de estos clústeres, liderado por el Servicio de Medi Ambient del Ayntamiento de Terrassa, a través de su Agencia Local de Energía y Cambio Climático, y en el que participan entre otros la Cambra de Terrassa, la UPC, Leitat y un grupo de empresas privadas punteras en temas ambientales, está precisamente dedicado al impulso del aprovechamiento de la masa forestal disponible en la comarca.
Por acciones como éstas, el Ministerio de Ciencia e Innovación acaba de conceder a Terrassa la distinción de ‘Ciudad de la Ciencia y la Innovación’.
Para finalizar, el Ayuntamiento está llevando a cabo un estudio que analiza la posibilidad de incorporar capital privado en nuevas instalaciones de biomasa. ¿Puede avanzarnos alguna conclusión de dicho estudio? ¿Hay alguna entidad privada interesada en dicha inversión?
Actualmente esta en fase de contratación de la entidad externa que realizará el estudio, financiado íntegramente por la Diputació de Barcelona, y está previsto que se inicie durante este mismo mes de enero, por lo que obviamente aún no podemos hacer ninguna valoración. Lo que si es cierto es que hay varias empresas interesadas en estudiar el proyecto, que posiblemente se desarrollaría en modalidad de contrato tipo ESCO (Energy Service Companies).
Se trata de empresas que financian proyectos de eficiencia energética, cogeneración o aprovechamiento de energías renovables (solar, eólica, biomasa, etc.) con el objeto de reducir costos operativos y de mantenimiento. Normalmente asumen los riesgos técnicos y económicos asociados con el proyecto y cobran una cuota mensual por sus servicios.