El sector eólico español apuesta por retos tecnológicos y competitividad a nivel mundial
«Somos un sector optimista y nos adaptamos al cambio con la certidumbre de que el sector responderá como hasta ahora lo ha hecho: trabajando y desarrollando una tecnología clave como es la eólica para la Transición Energética” afirmó hoy Rocío Sicre, Presidenta de la Asociación Empresarial Eólica (AEE), en el acto de inauguración del IV Congreso Eólico. «En los próximos años, el desarrollo de la energía eólica en España está marcado por varios elementos combinados que se abordarán durante estos dos días en el IV Congreso Eólico«.
A continuación, Sicre resumió los principales retos a futuro que tiene el sector y que se analizarán en el Congreso, tales como la reducción de costes y las soluciones tecnológicas que van a permitir reducir los costes de materiales; las mejoras de gestión de los parques eólicos para incrementar la producción y minimizar los riesgos; aspectos que afectan a la venta de electricidad, financiación y códigos de red; desarrollo de contratos PPA y sus ventajas y oportunidades para la viabilidad económica de los parques eólicos y el acceso a la financiación; hibridación de tecnologías de generación y el uso avanzado de baterías, o las innovaciones tecnológicas en eólica marina; así como los sistemas aislados de la red, fundamentalmente Canarias, el escenario de mayor crecimiento en España en los últimos años.
Además, representantes de los principales partidos políticos ofrecerán durante el Congreso su visión de futuro sobre la aportación de la eólica en el mix de generación. «Las decisiones políticas que se adopten a hoy, afectarán al futuro de los parques eólicos actuales y próximos» indicó Sicre, siendo fundamental el consenso político para diseñar una hoja de ruta que nos guíe en el proceso de Transición Energética y poder apuntar a objetivos ambiciosos.
La presidenta de AEE destacó que «la reciente aprobación de los objetivos de renovables europeos para 2030 suponen una clara oportunidad para la eólica española, siendo un fuerte compromiso para mantener las condiciones de continuidad que impidan posibles limitaciones de generación«.
El Secretario de Estado de Energía, José Dominguez Abascal, que participó en la inauguración del IV Congreso Eólico, destacó que «en el pasado se han cometido errores con el sector renovable en cuanto a falta de confianza, abusos e inestabilidad» pero apuntó que «vamos a hacer todo lo posible para establecer unas reglas de juego para que haya estabilidad y previsibilidad«. Domínguez Abascal animó a las empresas del sector a que sigan invirtiendo en la industria eólica para seguir creciendo económicamente en el país y con exportaciones en el extranjero. »Tenemos una oportunidad por delante» matizó el Secretario de Estado de Energía.
A continuación, Javier Zarraonandia, Viceconsejero de Industria del Gobierno Vasco, agradeció la Distinción Anual 2018 de AEE al Gobierno Vasco y manifestó que »la apuesta de Euskadi por las energías renovables ha desarrollado un gran enclave tecnológico industrial» en esta Comunidad. Con un objetivo de crecimiento de la industria vasca hasta el 25% en 2020, Zarraonandia indicó que »la eólica juega un rol fundamental en ello con más de 110 empresas en el País Vasco que son capaces de competir en los principales mercados y da empleo a 15.000 personas, de las cuales alrededor de 1.000 se dedican a la I+D».
El IV Congreso Eólico, que se celebra hoy y mañana, ha regresado un año más como punto de encuentro clave del sector eólico. En esta ocasión, el País Invitado es India, el cuarto con más potencia eólica instalada a nivel mundial. Se dedicará una sesión en el Congreso para analizar las oportunidades que brinda este país para las empresas españolas y se hará un repaso a la situación de la eólica en India.
El IV Congreso Eólico cuenta con el patrocinio VIP de Siemens Gamesa, Vestas, EDPR, Endesa, Iberdrola, Viesgo y DNV GL; y la colaboración de Acciona, como patrocinador de la Cena del Sector, y de Enercon, Gas Natural Fenosa, Schaeffler, Senvion y UL Renovables.