España vuelve a la energía eólica con precios récord
La energía eólica se adjudicó casi todos los 3 GW disponibles en la subasta de energía renovable española cuyos resultados fueron anunciados el 17 de mayo. La subasta generó contratos por 43 €/MWh, la máxima tasa de descuento permitida por el sistema de licitación español. Este es el nivel más bajo jamás otorgado en una licitación de eólica terrestre en Europa.
La competitividad de la energía eólica es un factor clave. Así es el hecho de que el mercado español ha estado paralizado durante tres años y tiene un gran número de proyectos maduros que necesitan la promesa de ingresos estables para completar su financiación.
Giles Dickson, consejero delegado de WindEurope dijo: «Los resultados de la licitación muestran cómo la eólica terrestre es hoy la opción más barata para la nueva generación de energía. Algunos pueden pensar que la energía eólica ya no necesita subsidios. Pero fue el hecho de que la subasta ofrecía un ingreso mínimo garantizado lo que atrajo a los inversionistas y aseguró que hubiera suficientes ofertas para entregar el bajo precio. Y este es el punto: no son los subsidios, sino los mecanismos de estabilización de los ingresos, que abordan el riesgo de la volatilidad de los precios al por mayor, los que serán críticos para el despliegue de la eólica terrestre a través de Europa a costes competitivos. Al ofrecer estabilidad de ingresos, las subastas desempeñan un papel crucial para permitir a los inversores financiar un proyecto: son clave para que los proyectos se desarrollen«.
La industria da la bienvenida a los resultados de la subasta española como un desarrollo positivo. Se produce después de un estancamiento del mercado de tres años provocado por recortes retroactivos a la tarifa de alimentación española en 2013. La parálisis ha puesto en riesgo la perspectiva de que España cumpla con su meta 2020 de energía renovable de la UE. Ahora España necesita desplegar megavatios adicionales para cumplir con los compromisos de la UE.
Dickson añadió: «La subasta de hoy es un paso importante para restaurar la confianza en el mercado eólico español. Pero todavía hay un camino por recorrer. España debe abandonar la práctica de cambiar el «rendimiento razonable» de los proyectos cada seis años, lo que crea inestabilidad tanto para los proyectos existentes como para los nuevos. Y la industria espera un calendario claro para futuras licitaciones. La visibilidad de los volúmenes de licitación y de despliegue es clave para las decisiones de inversión. En última instancia, las ofertas bien diseñadas y una clara cartera de proyectos ayudan a cosechar los beneficios económicos que la industria eólica trae a la economía española: 22.000 empleos y miles de millones de ingresos procedentes de la exportación«.