Iberdrola apuesta por el desarrollo de las energías renovables en Canarias para seguir contribuyendo a la transición energética
Iberdrola y su socio local, Inversiones Financieras Isla de Tenerife (IFIT), apuestan por el desarrollo de las energías renovables en Canarias para seguir contribuyendo a la transición energética. Así lo confirmaron en la inauguración del parque eólico Chimiche II, su primer proyecto eólico en Canarias, en un acto que contó con la presencia del Presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo; el Presidente del Cabildo de Tenerife, Carlos Alonso Rodríguez y el Alcalde de Granadilla de Abona, José Domingo Regalado.
Chimiche II, promovido por Energías Ecológicas de Tenerife, es el resultado de la suma de conocimiento y entendimiento del entorno local -aportado por IFIT- y la capacidad técnica y operativa y experiencia en el desarrollo eólico de Iberdrola. Con una potencia de 18,3 MW, la iniciativa ha requerido una inversión de más de 25 M€, ha generado en su construcción más de 200 empleos y abastece de energía limpia a una población equivalente de 15.000 hogares, evitando la emisión de 33.000 toneladas de CO2. El proyecto ha incluido la construcción de la línea eléctrica de evacuación y una subestación eléctrica transformadora, que ha requerido el desarrollo de una compleja labor de ingeniería para desplegar la infraestructura eléctrica a través de una orografía compleja con multitud de barrancos.
Chimiche II muestra el modelo que Iberdrola y su socio local quieren seguir para continuar contribuyendo a la transición energética en Canarias: desarrollo de energía competitiva, limpia y sostenible, que reduce la dependencia energética del territorio, genera empleo de calidad y contribuye a las comunidades del entorno.
Canarias cuenta con un alto potencial para el desarrollo de renovables: dispone de un alto recurso eólico y solar y de potencial de demanda flexible. Estas condiciones, combinadas con la importante reducción de costes de las tecnologías renovables que las hace competitivas, la creación de empleo de calidad, la dinamización industrial y económica y el impacto positivo que tienen las energías limpias en los ciudadanos y el turismo, representa una oportunidad para plantear una aceleración de los planes de inversión en renovables en las islas. En este sentido, es necesario reflexionar sobre el papel que van a desempeñar las energías renovables en Canarias, disponer de un marco normativo que aporte certidumbre a la inversión y fórmulas de desarrollo ágiles y transparentes para que su desarrollo aquí sea una realidad.