La nueva generación de energía en México. Comparativas y efectos en el sistema eléctrico
Pocas veces se conjugan circunstancias como las que acontecen en estos momentos en México: expectativas de crecimiento, combustible económico y razonablemente limpio, necesidad de mayor capacidad de producción y transporte de energía, recurso renovable prácticamente ilimitado y, finalmente, compromiso de la clase política para una reforma energética que facilite y encamine el desarrollo energético y, por ende, industrial, del país.
En estos momentos, el camino emprendido por la reforma energética está abierto y es hora de avanzar decididamente por él. La apuesta por una mayor participación del capital privado en el sector energético es manifiesta y constituye una oportunidad excelente para la realización de inversiones intensivas a largo plazo en una economía estable y en un entorno político seguro.
Aunque es natural que la nueva generación (la nueva potencia a instalar hasta el año 2030 se estima en unos 50. 000 MW), cubra una amplia diversidad de tecnologías, se establece una preferencia evidente por la generación eficiente y por las energías limpias: ciclos combinados, cogeneración de alta eficiencia, energías renovables (con especial énfasis, en términos de potencia instalada, en los parques eólicos: efectivamente, es conocido desde hace años el enorme potencial de ciertas regiones, que ofrecen la posibilidad de instalar parques eólicos del orden de 4 000 horas equivalentes al año).
Artículo publicado en: FuturENERGY Enero-Febrero 2014