La planta de gasificación de biomasa de Neoelectra de Toledo contribuye con el medio ambiente
Se trata de un sistema de generación de energía eléctrica altamente eficiente, basado en un modelo sostenible de economía circular, con niveles mínimos de emisiones de CO2 y uso ocasional de gas natural. El 11% de la energía generada en la planta se dedica al autoconsumo.
La situación que está atravesando el mercado energético, especialmente debido al elevado precio del gas, está impulsando el auge de algunas tecnologías energéticas que dependen de suministros más renovables y sostenibles, como la biomasa. En este sentido, la planta de gasificación de biomasa de Grupo Neoelectra ubicada en Villacañas (Toledo), constituye un claro ejemplo de economía circular, al haber valorizado más de 380.000 toneladas de residuos industriales (serrín y trozos de tablero), provenientes de fábricas de puertas de su entorno, y masas forestales desde 2016. Esto equivale a más de 319.000 MW de energía generada, utilizándose en el proceso gas natural solo ocasionalmente.
A nivel de proceso, la planta de Villacañas está equipada con una turbina de Vapor de Tuthill Murray de 7,8 MW, con dos gasógenos, que en base a residuos industriales y forestales transforman la biomasa en un gas pobre sin llegar a su combustión, para posteriormente quemarlo mediante la adición de aire en una cámara especial de oxidación. A continuación, los gases calientes resultantes de esta combustión se emplean para generar vapor en una caldera, para luego ser turbinados y generar electricidad. Ayudando, de esta forma, a la valorización energética de un residuo y un recurso forestal de ámbito local, generando una electricidad de carácter renovable en modo continuo.
A nivel medioambiental, cobran especial relevancia el tratamiento de los humos de la combustión mediante los filtros de mangas, que hacen que la instalación esté prácticamente libre de emisiones de partículas. La combustión de este gas pobre proporciona, además, una mayor estabilidad en la composición de estos humos, lo que permite un mejor control y por lo tanto unas emisiones de NOx y CO inferiores a las que podría tener un sistema de combustión de biomasa convencional.
La actividad de la planta también conlleva toda la logística ligada a la adquisición y traslado de la biomasa, que es gestionada directamente por Neoelectra, para garantizar el suministro permanente y estable de residuos. Constituyendo una inversión industrial permanente, impulsando la economía local de las Comunidades Autónomas en las que adquiere este desecho, que permite generar 1 MW eléctrico con 1 tonelada y media de biomasa.
Cabe destacar, que la instalación de Villacañas cuenta con aproximadamente 40.000 m2, en los que se encuentra tanto la planta como el acopio de biomasa, dando empleo directo y permanente a cerca de 25 personas, contribuyendo con el arraigo territorial en la España rural. Una planta que constituye, por tanto, un ejemplo de sostenibilidad ambiental y eficiencia energética, enmarcada en el desarrollo industrial sostenible que caracteriza a Grupo Neoelectra.
Otras instalaciones de Biomasa de Neoelectra
Además de la planta de gasificación de biomasa de Villacañas, el Grupo posee una planta de biomasa en Fuente de Piedra (8,04 MW) dedicada a la reducción de residuos asociados al sector olivarero (orujillo). A la que se suma la planta de cogeneración de biomasa de Chile (11,1 MW), que suministra energía térmica y eléctrica a Masisa, primer productor de tableros aglomerados de Chile.
Neoelectra en la actualidad se está involucrando en varios proyectos de biomasa, tanto forestal como de residuos, con una potencia térmica global de más de 250 MW térmicos, tanto en el entorno de la EU como en Sudamérica.