La evolución de la energía como servicio
Según se acelera el ritmo del cambio, las organizaciones se enfrentan a complejidades crecientes en la gestión de energía y sus recursos. Todas ellas deben equilibrar sus aspiraciones para mostrar un liderazgo de manera competitiva y responsable y, en paralelo, ser conscientes de la realidad de sus limitaciones operativas y financieras.
La energía como servicio (Energy as a Service – EaaS por sus siglas en inglés) está emergiendo como un enfoque innovador para cumplir con ambas prioridades. EaaS proporciona los beneficios de la transición energética al tiempo que reduce el coste potencial de entrada, permitiendo que más organizaciones avancen hacia sus objetivos de energía y sostenibilidad.
Un modelo flexible y receptivo para la gestión de la energía
La energía como servicio cambia la forma en que las organizaciones conciben la gestión y la adquisición de energía. Estas soluciones suelen basarse en la gestión de una variedad de elementos energéticos, que van desde sistemas de almacenamiento de energía, generación de energía distribuida (fotovoltaica, eólica, biomasa, biogás, etc.) y recuperación de calor residual, entre otros. Cada uno de ellos refleja la evolución que está haciendo la energía desde la rigidez y la centralización hacia la flexibilidad y la sostenibilidad. Estas soluciones son adaptables, variables y modulares.
Bajo un modelo de energía como servicio, las organizaciones se asocian con proveedores de soluciones, como Schneider Electric, para supervisar activamente la cartera de energía de la compañía y proporcionar capital inicial y propiedad de activos a largo plazo. Por lo general, el proveedor de soluciones ofrece servicios de gestión de energía con el compromiso de obtener las expectativas de rendimiento correspondientes, lo que reduce el riesgo para los usuarios finales. Estos servicios están personalizados para que cada cliente logre los resultados acordados, como la continuidad de producción frente a problemas de suministro eléctrico externos, el cumplimiento de los objetivos de sostenibilidad, y comúnmente resultan en un menor riesgo de rendimiento y una menor carga de capital. Este nuevo modelo de suministro de energía cada vez cobra mayor importancia, así lo demuestra un estudio reciente de Schneider Electric y GreenBiz que muestra el crecimiento de los DER con un promedio del 11% interanual.
Una nueva forma de superar la “brecha de ambición”
El beneficio directo de la energía como servicio es el uso de estructuras de capital innovadoras, tales como acuerdos avanzados de compra de energía (PPA), arrendamientos y contratos de desempeño para evitar la inversión CAPEX. Como resultado, el acuerdo de servicios de energía protege el flujo de caja e incluso puede generar nuevas fuentes de ingresos.
Este ingreso potencial, o ahorro, puede ayudar a amortizar otros proyectos de energía y sostenibilidad con menor retorno del esperado previamente. Las organizaciones también pueden optar por reinvertir en otras prioridades comerciales, como nuevos equipos o aumento del rendimiento de los márgenes.
Este habilitador financiero permite a las organizaciones cumplir y superar un obstáculo crítico: la brecha de ambición creada por el deseo y necesidad de ir un paso más allá con la gestión de la energía y la sostenibilidad mientras se enfrentan a un número creciente de limitaciones. Para muchas empresas, esta brecha de ambición se convierte en una barrera importante para alcanzar un rendimiento financiero y operativo óptimo. Con la energía como servicio, las organizaciones pueden reducir la brecha de manera proactiva y lograr sus objetivos con mayor facilidad, a menudo con poca o ninguna inversión inicial.
Ejemplos prácticos del uso de la energía como servicio
Para lograr una mayor eficiencia energética y sostenibilidad, es imprescindible una gestión activa de la energía (Active Energy Management – AEM por sus siglas en inglés). Esto integra una amplia cartera de soluciones en el suministro de energía, la sostenibilidad, los DER y la eficiencia de los recursos, habilitados por un conjunto de servicios de asesoramiento, sensorización y software. Todo ello nos permite ejercer la innovación para satisfacer las necesidades de nuestros clientes, brindando flexibilidad en tecnología, fuente de financiación y riesgo operativo. En Schneider Electric ofrecemos estos servicios y, de hecho, hemos sido nombrados proveedores líderes de EaaS para el mercado comercial e industrial por la firma de investigación global Navigant.
Pero en la práctica, ¿cómo funciona y cuáles son sus beneficios reales? Presento dos casos distintos que nos servirán como ejemplo de cómo puede ayudar a tu negocio la energía como servicio. El primer caso ocurre en Europa, con un productor mundial de acero líder que tenía la oportunidad de obtener ahorros energéticos invirtiendo en equipos más eficientes, pero la compañía se había visto limitada financieramente y no podía avanzar basándose solo en el CAPEX. Al utilizar un modelo EaaS, pudimos diseñar un programa de recuperación de calor residual para la empresa que ha resultado en ahorros de energía y reducción de emisiones de carbono sin aumentar sus pasivos a largo plazo, lo que a su vez ha permitido que la compañía establezca metas más agresivas de energía y sostenibilidad.
Otro ejemplo, el condado de Montgomery (EEUU), con más de un millón de personas, 9.000 empleados y 400 edificios, que ha logrado la neutralidad de carbono buscando una eficiencia energética a través de energías renovables y gestión de microrredes. Trabajamos con ellos para instalar dos microrredes avanzadas que han permitido al condado elevar su resiliencia frente a un fallo eléctrico externo, mejorar su infraestructura eléctrica obsoleta y aumentar la sostenibilidad, todo ello sin ninguna inversión de capital inicial. Las previsiones son que ambas microrredes reduzcan las emisiones de CO2 en 6.800 toneladas métricas/año, lo equivalente a eliminar más de 1.400 automóviles de las carreteras o plantar 178.000 árboles anualmente.
El uso de la energía como servicio todavía está emergiendo, pero sin duda veremos un incremento en los próximos años para intentar cerrar la brecha entre la ambición empresarial y las medidas de sostenibilidad y eficiencia necesarias para ayudar en la lucha contra la emergencia climática y a su vez conseguir una imagen de marca más atractiva y acorde a las nuevas expectativas del mercado.
