“Los redes de distrito son una de las buenas soluciones para una energía sostenible”
Entrevista con Michel Maria, presidente de Adhac
Las redes de distrito poco a poco van aumentando en nuestro pais, aunque todavía estamos lejos de las cifras europeas. Asi lo refleja el censo de redes que cada año elabora la Asociación de Empresas de Redes de Calor y Frío (Adhac). Hablamos con su presidente, Michel Maria, para conocer de primera mano la situación actual de este mercado en nuestro país.
Michel Maria, presidente de Adhac.
Cada año la asociación presenta el censo de redes de distrito en nuestro país, donde se aprecia que en cada edición, se va incrementando su número. ¿Cómo valora este crecimiento?
Continuando con la tendencia observada el año pasado, es en los municipios pequeños en los que más proyectos se está poniendo en marcha. Cataluña, Madrid, Navarra y Castilla-León son las regiones que más potencia total instalada registran.
¿Considera que es suficiente su ritmo de crecimiento?
Por supuesto siempre podría mejorarse, pero lo importante es que sigue creciendo. Los españoles cada vez son más conscientes de la importancia del cuidado del medio ambiente y, en este sentido, toman diferentes medidas en su día a día para hacerlo. Estoy convencido de que el uso de energías renovables como la biomasa tienen un gran recorrido en nuestro país. Pero no debemos olvidarnos del potencial de otras renovables tales como solar, geotermia, … y prestar especial interés a mejorar el aprovechamiento de las energías residuales disponibles.
Con respecto a otros países de nuestro entorno, ¿en qué situación nos encontramos?
Somos uno de los países con una introducción más baja de este tipo de soluciones en Europa. Aquí, el índice de penetración de las redes es todavía de menos del 1%, situándose la media europea en un 10%. En el norte y centro de Europa hay ejemplos como Dinamarca donde más del 65% de la población cubre sus necesidades térmicas a través de una red. No obstante, considero que el número de redes seguirá creciendo a buen ritmo en nuestro país y debe alcanzar niveles similares a los países de nuestro entorno.
En España el índice de penetración de las redes es todavía de menos del 1%, frente a la media europea que se sitúa en un 10%.
¿Cuáles considera que son las principales barreras que están ralentizando su desarrollo? ¿Cómo podrían superarse?
La falta de regulación específica y adecuada para este tipo de servicio es una de las principales barreras puesto que supone que aquellos municipios que quieren impulsar una red urbana de climatización deben aprobar, en la mayoría de los casos, nuevas ordenanzas municipales. Es necesario que la Administración del Estado y de las comunidades autónomas establezca una regulación común para todos los municipios, de manera que las Entidades Locales puedan centrar sus esfuerzos administrativos en la promoción y desarrollo del proyecto. Otras barreras, a las que el sector tiene que dar solución, son la cantidad de capital necesario para iniciar la actividad, los largos períodos de retorno de la inversión y el riesgo de demanda de energía térmica allí donde se construye la instalación. En este sentido, es fundamental el apoyo de los Ayuntamientos para este impulso definitivo.
“Es necesario que la Administración del Estado y de las comunidades autónomas establezca una regulación común para todos los municipios; su apoyo es fundamental para el impulso definitivo de la redes de calor y frío”
¿De qué manera pueden contribuir las redes de distrito a la consecución de objetivos medioambientales y de eficiencia energética marcados por la UE?
El tejido urbano se caracteriza por una alta concentración de consumidores de energía y una gran variedad de perfiles de cliente (residencial, terciario, industrial, etc.), condicionantes que hacen que la generación y gestión centralizada de climatización y agua caliente sanitaria sea la solución más económica y eficiente. Desde el punto de vista tecnológico, las redes urbanas de climatización posibilitan la hibridación de distintas fuentes de energía atendiendo a variables como su coste, disponibilidad y sostenibilidad, lo que proporciona la flexibilidad necesaria para introducir distintas fuentes de energía renovables en el proceso de generación de la energía térmica sin necesidad de realizar cambios significativos en la instalación. La gestión diaria de la red, supervisada por expertos técnicos, hace que su operación sea siempre la más eficiente posible, manteniendo en todo momento los niveles de confort acordados con los usuarios.
"La gestión diaria de la red, supervisada por expertos técnicos, hace que su operación sea siempre la más eficiente posible, manteniendo en todo momento los niveles de confort acordados con los usuarios"
¿Qué tipo de energías son las más utilizadas en las redes de distrito españolas?
Según el Censo de Redes de Calor y Frío 2018, tres de cada cuatro redes emplean biomasa como principal fuente de energía y un 20% utiliza gas natural como fuente principal o como fuente de respaldo. Por tanto, la biomasa y el gas natural son las energías más empleadas. No obstante, no debemos obviar que se pueden combinar con otras energías como la geotermia, el biogás, el calor residual o la solar térmica.
Según se refleja en el censo, en España nos encontramos con dos tipologías diferentes; por una parte, un gran número de pequeñas redes y, por otro lado, unas cuantas grandes redes. ¿Hacia que modelo habría que ir?
En este punto creo que es complicado decantarse por un solo modelo. Es decir, hay que estudiar e identificar las necesidades específicas de cada proyecto y elegir el modelo que mejor responda a estas necesidades.
¿Desea añadir algo más?
Pediría el compromiso de las autoridades para su impulso definitivo. Tenemos que enfocarnos en la optimización no solo de los costes sino del uso de la energía. Es fundamental que entre todos cuidemos los recursos del planeta y los aprovechemos de forma responsable. Los DHC son una de las buenas soluciones para una energía sostenible. No tenemos Planeta B.
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