La nueva regulación de diagnóstico in vitro implicará incrementar recursos a empresas y sector público

El Instituto para el Desarrollo e Integración de la Sanidad (IDIS) ha organizado hoy la Jornada "Innovación en centros privados: caminando hacia 2018", en cuya inauguración ha participado el presidente de ASEBIO, Jordi Martí, junto a representantes de IDIS, Farmaindustria y FENIN.
Además, la coordinadora del grupo de trabajo de Medicina Personalizada y Diagnóstico Avanzado de ASEBIO y directora científica de Amadix, Ana Martin, ha moderado la mesa redonda "Los nuevos reglamentos en diagnóstico in vitro y su relación con la innovación y puesta en valor de la tecnología", en la que ha participado Hugo Leis, miembro de este grupo y responsable de calidad de Sistemas Genómicos.
El Parlamento Europeo publicó el pasado 17 de junio de 2016 el texto de los dos nuevos Reglamentos que sustituirán las Directivas de productos sanitarios, de productos implantables activos y productos sanitarios de diagnóstico in vitro. Tratándose de un Reglamento y no de una Directiva, no es necesario que cada Estado Miembro realice una transposición del texto normativo.
El propósito de los nuevos Reglamentos es otorgar mayor seguridad y transparencia para los pacientes y modernizar las normas que regulaban este ámbito.
El sector biotecnológico por tanto se enfrenta a este cambio de legislación europea que redefine el desarrollo de métodos de diagnóstico in vitro con un esfuerzo que implicará la necesidad de dedicar más recursos en el área de financiación, formación, personal, etc, caso extrapolable también al sector público.
En la nueva legislación se incluye cualquier dispositivo médico previsto por el fabricante para ser utilizado in vitro para el estudio de muestras biológicas humanas, con estándares muy parecidos a los usados en el mundo farma.
El grupo de Medicina Personalizada y Diagnóstico Avanzado de ASEBIO, consciente de estos cambios y preocupado por sus consecuencias, ha preparado un documento de consenso, en el que se analiza el impacto de esta regulación en nuestras empresas y presenta una guía de seguimiento. "Pensamos que en muchos casos, esta nueva regulación es tremendamente imprecisa. Ofrecemos a las Autoridades nuestro apoyo para evitar el arbitrio en el desarrollo de estos productos.", explicó en la Jornada de hoy el presidente de ASEBIO, Jordi Martí.
Este grupo lanzó el año pasado el Libro blanco sobre la situación actual de acceso al mercado de test de diagnóstico in vitro en España, en el que se advertía que existía disparidad de procedimientos entre las diferentes comunidades autónomas y falta de transparencia en los criterios de procesos de acceso al mercado, de precio y financiación de estos test, incluso se analizó la gran diferencia con otros mercados europeos más ágiles, como Francia e Inglaterra.
España ha sufrido una disminución del 7% progresiva en las ventas de test de diagnóstico in vitro (pasando de 1.045 millones de euros en el año 2010 a 972 millones de euros en el año 2014), que podría deberse a las restricciones presupuestarias vigentes en España y a los criterios empleados en la adquisición de test de diagnóstico, basados principalmente en el precio de adquisición en el momento de la compra, tal y como se señala desde la European Diagnostics Manufacturers Association (EDMA).
"Esto nos ha llevado a presentar a las autoridades una serie de recomendaciones con el afán de agilizar el proceso de acceso al mercado de los mismos.", subraya Jordi Martí. "Todos los avances que se puedan conseguir en los productos de diagnóstico in vitro serán por y en beneficio de los pacientes, y mejorarán los procesos de innovación de las empresas, cuyo interés se centra también en tender lazos de colaboración tanto con cent
tros públicos como privados para incorporar sus avances tecnológicos en el mercado."
Hugo Leis, responsable de calidad de Sistemas Genómicos y miembro del grupo de trabajo de ASEBIO, explicó en la jornada que con la legislación actual, la mayoría productos sanitarios de diagnóstico in vitro (PSDIV) están en la categoría de autocertificables, pero con la nueva regulación europea todos los PSDIV genéticos pasarán a ser clase C, la segunda con más riesgo. "Esta reclasificación implica la autorización previa del producto por un organismo notificado, y no atiende a los principios expuestos en el reglamento de clasificación según el riesgo (se ha clasificado según la tecnología). El incluir a todos los PSDIV genéticos en la Clase C supone un esfuerzo mayor por parte de los fabricantes en la documentación y extensión de las fases de diseño y desarrollo, así como en la presentación de la documentación y las evidencias de ejecución. Pero sobre todo, implica un más que probable retraso en el lanzamiento de los PSDIV con marcado CE en nuestro campo, debido a la fase previa de revisión por parte del ON, tanto del sistema de gestión de calidad del fabricante como del expediente técnico de cada producto."