“El objetivo del XII Congreso Docomomo Ibérico es difundir los valores del patrimonio moderno, para que se reconozca entre todos los sectores de la ciudadanía, y establecer unas bases en la intervención en edificios patrimoniales"
Entrevista a Sara Pérez Barreiro y Daniel Villalobos de la Fundación Docomomo Ibérico
La preservación patrimonial de la arquitectura moderna es una de las máximas de la Fundación Docomomo Ibérico, que el próximo mes de septiembre celebra en Valladolid su XII Congreso (del 27 al 29 de septiembre). Un espacio de conocimiento y debate, pero sobre todo de reconocimiento del valor cultural de este importante legado arquitectónico. Sara Pérez Barreiro y Daniel Villalobos nos analizan en la siguiente en entrevista qué novedades y temas se analizarán en el congreso.
El próximo mes de septiembre, en la ciudad de Valladolid, se celebra una nueva edición del Congreso Docomomo Ibérico. ¿Qué puede adelantarnos al respecto? ¿Qué objetivos se han marcado desde la organización en esta XII edición?
El tema principal de este congreso es ‘Actuaciones en el patrimonio arquitectónico del movimiento moderno’. La Fundación Docomomo Ibérico ha llevado a cabo una magnífica labor con trabajos, entre otros, como la catalogación de estos edificios modernos, con la que se ha evidenciado el valor de un tipo de patrimonio normalmente poco reconocido por la ciudadanía. Ahora es el momento, no sólo de reconocer su valor cultural, sino también de dar pautas para intervenir en él de manera adecuada. Así, este congreso tiene dos objetivos fundamentales: en primer lugar, difundir los valores del patrimonio moderno, para que se reconozca entre todos los sectores de la ciudadanía y, en segundo, establecer unas bases en la intervención en edificios patrimoniales de ese tipo.
¿Qué tipología patrimonial define el movimiento moderno?
En el periodo que, desde la Fundación Docomomo Ibérico, se ha tomado como referencia para el estudio del movimiento moderno en la península ibérica, es decir el comprendido primero entre 1925 y 1965, y que se amplió después hasta 1975, los arquitectos aplicaron unos nuevos principios a las arquitecturas de todo tipo que proyectaron. Son arquitecturas que abarcaron desde grandes intervenciones urbanísticas, proyectos de ciudades o barriadas enteras, edificios o parques y jardines, hasta los mínimos detalles de un edificio, e incluso todo tipo de mobiliario. Todo ello fue objetivo de su atención proyectual. En consecuencia, cualquier tipología tiene magníficos ejemplos de estas arquitecturas desornamentadas, racionales y funcionalistas. Con principios modernos, se hicieron espacios simbólicos como templos o conventos, otros con necesidades mucho más funcionales, como fábricas, o prácticas, como estaciones, cines y teatros, mercados, colegios u hoteles. Si bien en edificios de todo tipo se dio ejemplo de modernidad, el campo de la vivienda y, en particular, la vivienda social, fue el que se erigió como una de las principales prioridades de la arquitectura del movimiento moderno. En el periodo que siguió a las guerras mundiales, así como a la Guerra Civil española, en las ciudades europeas se atendió a la construcción de barriadas, para albergar socialmente y con decoro a miles de familias. Se experimentaron nuevas tipologías de vivienda, como los grandes bloques, muchos de ellos en altura, organizados en zonas verdes en contraposición a la manzana cerrada de la ciudad tradicional. También se investigaron soluciones para la vivienda mínima, siendo este tema objeto prioritario de los primeros congresos internacionales de arquitectura moderna. El congreso del CIAM II de 1929, celebrado en Frankfurt, se dedicó a la vivienda mínima y, en los años siguientes, se atendió a temas como los métodos constructivos para viviendas o la vivienda y el ocio; y, tras la Segunda Guerra Mundial, en 1947 se centró en la situación urbana y los valores estéticos de la vivienda colectiva.
¿Qué actuaciones son importantes en el patrimonio del movimiento moderno?
Al igual que ocurre en la intervención en todo tipo de patrimonio, lo fundamental es establecer cuáles son los valores de cada elemento para que, una vez definidos, se puedan respetar y mantener. De la misma manera que hay unos criterios establecidos para intervenir en edificios históricos como catedrales, palacios, conventos, etc., se deben establecer unos criterios específicos para este otro tipo de patrimonio arquitectónico. Si nos parece fundamental que cuando se interviene en un palacio del s. XVI, por poner un ejemplo, se realicen estudios específicos y se lleven a cabo los proyectos necesarios con una empresa constructora que posea las credenciales adecuadas (clasificación k7), también debe de ser así en los edificios de este nuevo patrimonio. Si el edificio, jardín, barriada o cualquier otra arquitectura moderna tiene un valor patrimonial ¿por qué no protegerlo de la misma manera? En consecuencia, es prioritario establecer unos criterios para la intervención en este patrimonio.
¿Qué líneas de investigación y metodologías se van a presentar durante el congreso para la conservación patrimonial?
El congreso presenta tres líneas fundamentales, a partir de las problemáticas que surgen en la intervención sobre cualquier patrimonio. En primer lugar, se abordará la definición de los valores patrimoniales que es necesario defender en la arquitectura del movimiento moderno. Un segundo bloque se centrará en el estudio de la normativa que afecta a este patrimonio y su adecuación a las particularidades de la modernidad. Finalmente, se dedicará un capítulo importante a la intervención en el patrimonio arquitectónico moderno, desde el adecuado conocimiento de estas arquitecturas.
Son tres los bloques en que se ha articulado el congreso:
- Metodologías para la conservación del patrimonio del siglo XX: conocimiento previo del edificio, metodologías de restauración, proyecto y ejecución. Esta línea de investigación acogerá estudios con aportes a la investigación o crítica sobre edificios del movimiento moderno, tanto en la península ibérica como en otras geografías. Asimismo, se presentarán trabajos sobre metodologías de intervención tanto en planteamientos de proyecto como en ejecución.
- Aplicación de la normativa vigente: el CTE y la arquitectura del movimiento moderno. Gestión. En este capítulo se presentarán investigaciones sobre la problemática de la adecuación de edificios concretos, materiales y sistemas estructurales y constructivos del movimiento moderno a las actuales condiciones del Código Técnico de la Edificación. También se abordará esta temática en un marco más amplio, con relación a las distintas normativas extranjeras, regionales o municipales. Se incluirían trabajos sobre gestión en administraciones responsables y protección jurídica urbanística.
- Buenas prácticas para la intervención en el patrimonio del movimiento moderno. Aquí se abordarán ejemplos de edificios, barriadas o jardines en todo el ámbito internacional del movimiento moderno, cuyos resultados posean valores ejemplares de divulgación, gestión, metodología y práctica. Trabajos relativos a intervenciones modélicas, tanto ibéricas como internacionales, y a los criterios metodológicos de intervención que se han aplicado con análisis y resultados. Entrarían aquí trabajos críticos útiles sobre intervenciones con resultados contradictorios.
¿Qué dificultades se encuentran durante el desarrollo de su actividad y en la intervención patrimonial?
En general, la ciudadanía no entiende que edificios del siglo pasado construidos en hormigón armado visto, por ejemplo, o con fachadas sin ornamento, puedan entenderse como bienes patrimoniales. Lo mismo ocurre con los modernos bloques de barriadas sociales construidos con muros de ladrillo sin recubrimiento. Se asumen más fácilmente como bienes patrimoniales los edificios de piedra o con estructuras de madera de periodos anteriores. Cuesta transmitir el valor de este otro patrimonio mucho más moderno y, para superar esta dificultad fundamental en el reconocimiento de su importancia, sería necesario, como paso previo, crear una cultura arquitectónica de lo moderno.
La intervención atañe a temas específicos que no siempre son fáciles de valorar, ¿cómo exponer la necesidad de reparar una estructura de hormigón manteniendo sus características cromáticas y de textura? Algunos pensarán que no deja de ser una estructura y, por tanto, únicamente tiene que ser estable, pero es ahí donde radica su belleza. Son planteamientos que en ningún momento nos hacemos al restaurar un arco, una bóveda o cualquier otra estructura de piedra.
¿Qué fondo documental incorpora la Fundación Docomomo Ibérico en el patrimonio movimiento moderno?
La Fundación Docomomo Ibérico, desde su inicio en 1993, ha llevado a cabo numerosas iniciativas de documentación y estudio del patrimonio moderno en los territorios ibéricos. Actualmente, tal y como se recoge en su página web, hay más de 2.400 obras registradas, ordenadas por temas y territorios. A través de la página web de la Fundación, se puede acceder a miles de fotografías históricas y actuales, planimetrías y, en sus fichas, a bibliografía, referencias y explicaciones del porqué estas obras han merecido incorporarse al registro. También pueden visitarse en la web exposiciones temáticas dedicadas a estas arquitecturas y cientos de tesis académicas sobre la arquitectura moderna. Es todo un fondo de cultura de la arquitectura moderna asequible desde cualquier ordenador o teléfono móvil.