Entrevisita a David Martínez, presidente de Rebuild

Rebuild se consolida como el salón de referencia de la construcción 4.0 y la digitalización. Una edición con casi 23.000 visitantes que se reunieron en los pabellones 8 y 10 de Ifema Madrid. Esta fue una de las principales novedades de la feria, su crecimiento expositivo, pero también fue el escenario para analizar los auténticos retos del sector de la construcción, como nos recuerda David Martínez, presidente de Rebuild, en la siguiente entrevista.

Rebuild 2023 ha sido todo un éxito. El evento reunió a toda la industria de la edificación, desde la parte privada hasta las administraciones como los stakeholders, en un encuentro único por el que pasaron casi 23.000 asistentes, 617 expertos internacionales y 544 firmas expositoras. Y lo más importante, se constató que la industrialización y su impulso es clave para que la edificación avance y dé respuesta a los desafíos actuales.

Rebuild 2023 ha demostrado que el sector está unido en cuestiones tan relevantes como la estimulación de la construcción ‘offsite’ con una actualización del Código Técnico de la Edificación (CTE); el valor de la circularidad para cumplir con los objetivos del Pacto Verde Europeo; el potencial de la tecnología enfocada a fomentar el trabajo colaborativo y llegar a ser más mucho más competitivos; o la necesidad de atraer más talento con el objetivo de cubrir, por ejemplo, los 700.000 puestos profesionales vacantes que se necesitan para dar salida a los proyectos que se tienen que ejecutar gracias a los fondos Next Generation.

Incrementar el espacio a dos pabellones es, sin duda, el síntoma definitivo de que el sector está más vivo que nunca y totalmente volcado en la búsqueda de soluciones industrializadas, digitales y mucho más sostenibles. Un crecimiento de Rebuild que se ha dado incluso en el contexto alcista y que poco a poco se está moderando. A pesar de este escenario, la edificación dispone de una fortaleza y robustez, que inducen a que haya muchos nuevos proyectos para ejecutar y Rebuild ha sido un punto de encuentro para los socios industriales.

Uno de los factores que deberá acelerarse para alcanzar la transformación definitiva y cumplir con la agenda de 2050 es el de la industrialización. La automatización de procesos en la edificación comporta, entre otras cuestiones, un mayor incremento de la productividad con menos recursos y una reducción de los tiempos de ejecución, algo que contribuye a la descarbonización y a los objetivos climáticos de cara a 2050. Adicionalmente, acompañando a esa aceleración automatizada, entrará en juego el factor de la digitalización, que permite anticipar errores, actuar con más precisión, optimizar los suministros y mejorar la calidad de vida de los edificios, apoyando a la transición energética.

Además, tampoco nos podemos olvidar del potencial de los fondos Next Generation, para la rehabilitación de viviendas y edificios, que tienen por objetivo facilitar la mitigación de 650.000 toneladas de emisiones de CO2 al año, la rebaja de un 30% del consumo de energía no renovable en los hogares, y la reducción de la demanda de calefacción y refrigeración como mínimo un 7%, de acuerdo con cifras expuestas por el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana.

Pues coincido con lo que dijeron los expertos que participaron en el Congreso y es que hay que cambiar el Código Técnico de la Edificación (CTE) y la Ley Hipotecaria, para transformar al sector y llevarlo a un futuro industrializado. Con la modificación que se plantea se podría permitir a los bancos valorar factores fuera de lo construido en el sitio de la obra y así poder acceder a financiación, sin que los promotores tengamos que adelantar capital.

Ahora sucede que, en muchas ocasiones, se tiene que acudir a fuentes de financiación alternativas para poder impulsar proyectos construidos con el sistema industrializado. Y esto no es lo mejor. Para hacernos una idea, España está muy por debajo de otros países del entorno europeo en construcción industrializada. En el caso de Alemania o Reino Unido los edificios producidos bajo este modelo representan un 9% y un 7%, respectivamente, mientras que en España solamente es entre un 1%-2%. La vía de la financiación es clave para llegar a los niveles de los países más avanzados.

Según lo comentado en Rebuild por expertos en la materia, con la actualización del marco regulatorio, podríamos pasar de este 1%-2% a un 30% en un corto periodo de tiempo, y también favoreceríamos la reindustrialización del país, necesaria para crear puestos de trabajo y atraer nuevo talento. En definitiva, urge cambiar el chip también a nivel financiero para transformar este sector en una verdadera industria de manera definitiva.

Todavía no la hemos perdido, pero debemos activar a todos los agentes, incluido el sector público, para que eso no suceda y terminar los proyectos antes de junio de 2026. Esta es la fecha límite que marca la normativa, para recibir la financiación comunitaria, aunque tal y como se ha puesto de relieve en Rebuild 2023, debemos continuar con este ecosistema rehabilitador después de 2026 y establecer un nuevo segmento que se dedique a la reforma y que se apoye, por ejemplo, en el diseño de modelo BIM o en la gestión a través de la industrialización.

Para ello, se requiere la involucración de todos los actores y de la colaboración público-privada, entre empresas, profesionales y stakeholders, que garantice el camino hacia estas reformas y, en consecuencia, hacia la descarbonización y el aprovechamiento energético.

Como comentaba, la industrialización es una parte muy significativa en los planes de reforma del parque residencial español. Precisamente, en Rebuild 2023 se ha presentado un estudio realizado por el Gobierno Vasco y la Universidad del País Vasco, de la mano de las empresas Knauf Insulation, Baxi y Eibho, que confirma que la industrialización podría ser un elemento clave en la transformación energética de los edificios, ya que, por ejemplo, con mejoras constructivas como las fachadas ventiladas con materiales sostenibles se podría reducir buena parte de las emisiones de CO2.

Por lo tanto, sí, creemos que la industrialización es el camino no sólo para la construcción, sino también para que a corto plazo se puedan rehabilitar energéticamente un gran número de viviendas con la mirada puesta en 2050.

La Administración Pública es un actor clave que debe implicarse en esta transformación de la construcción. Como hemos incidido en esta última edición de Rebuild, la colaboración entre agentes, y especialmente entre lo público y privado, es imperativa para el desarrollo de proyectos edificatorios y el devenir de nuestra industria. Buen ejemplo de ello es lo transmitido en la cumbre de la mano de representantes políticos de regiones como la Comunidad de Madrid, el País Vasco, Aragón, la Comunidad Valenciana o Castilla y León, que han dado a conocer sus planes de vivienda fomentados, en gran parte, por la colaboración con promotoras privadas utilizando el modelo industrializado.

A su vez, la digitalización de los procesos de concesión de licencias y la Comisión interministerial BIM para implementar, efectivamente, la transformación organizativa de todo el sector son dos cuestiones que se han puesto encima de la mesa en Rebuild y que tendremos que seguir trabajando.

El sector afronta esta escasez de mano de obra como un gran reto para el que tenemos soluciones. La construcción industrializada es una de ellas, ya que se erige como una reinterpretación de la industria y se convierte en una opción para transformar la edificación en una actividad atractiva para el talento. El hecho de que gran parte del proceso sea en un entorno industrial, sin estar expuesto a factores climáticos; o que haya un reajuste de la jornada laboral teniendo en cuenta la conciliación son algunos de los motivos por los cuales la industrialización es una potente oportunidad para captar nuevos profesionales, que pueden ser más jóvenes y también mujeres.

Igualmente, es necesario apostar 1) por la comunicación para cambiar la imagen negativa coyuntural que se tiene de la construcción, 2) por la promoción de la formación profesional y 3) por la digitalización, que atrae a más perfiles interesados por nuestro sector.

Sin duda. Actualmente, estamos viendo un auge de la madera y demás materiales sostenibles como el hormigón de cáñamo, que también ha tenido su presencia en Rebuild. La edificación es consciente que no puede seguir construyendo con el final casi anunciado de la demolición, sin volver a incorporar los materiales utilizados otra vez en el mismo ciclo. Por este motivo, como se ha constatado en la cumbre de la mano de arquitectos reconocidos internacionalmente como Stepan Martinovsky, Taba Rasti o José Manuel Toral, muchas promociones y nuevos proyectos, incluso en altura, se están ejecutando con materiales que si se tratan adecuadamente pueden ser totalmente sostenibles y circulares, como lo es la madera.

Igualmente, es cierto que queda mucho camino por recorrer y que los edificios ahora mismo representan el 40% del consumo final de energía, el 35% de las emisiones de gases de efecto invernadero y el 50% de todos los materiales extraídos en el continente europeo, pero creo que el camino iniciado es el correcto. El sector entero está comprometido con la sociedad para construir un futuro sostenible con edificios por y para las personas.

Rebuild es considerado por el conjunto de la industria como el punto de encuentro de referencia en el que todos los actores del sector se dan cita, para acometer la transformación industrializada, digital y sostenible que requiere la edificación. En este sentido, y como es sabido, la cumbre tiene un modelo único en el que se incluyen soluciones innovadoras en la zona expositiva, transferencia de conocimiento e inspiración para todos los profesionales de la industria, en la parte congresual, y creación de sinergias en las actividades de networking.

Así, la clave del éxito de Rebuild es que congrega a los distintos perfiles que participan en un proyecto inmobiliario partiendo de la base del alto valor de estos, pues son profesionales ‘decision makers’ con un proyecto real detrás, hecho que no sucede en otros foros; y, además, Rebuild dispone de un modelo integral en el que se aprovecha cada momento, para que tanto la oferta como la demanda se encuentren y creen estas sinergias tan necesarias a fin de impulsar la industria a nivel comercial pero también a nivel de conocimiento y relacional.

Igualmente, cabe decir que en Rebuild 2023 se ha logrado capitalizar las propuestas y peticiones del ámbito privado, para trasladarlas a la administración. Hemos congregado a la mayor comunidad de stakeholders de la industria y hemos tenido una presencia muy significativa de comitivas internacionales de países como Austria, Bélgica, Finlandia, Chile o Turquía, que han confirmado que la cumbre es el epicentro del futuro de la industria donde se erige la nueva edificación.

Puedo adelantar que ya estamos trabajando en la siguiente edición, que tendrá lugar del 19 al 21 de marzo de 2024 en Ifema Madrid. Lo hacemos con muchísimas ganas y con el objetivo principal de continuar siendo el evento boutique, donde tanto la oferta como la demanda se reúnen con el propósito de conocer las últimas innovaciones, tendencias, soluciones y tecnologías, para trazar conjuntamente el futuro eficiente, digital, y sostenible de la edificación, motor económico trascendental de nuestro país.