Entrevista a Adolfo Benedito, investigador en Descarbonización en Aimplas y responsable de la organización de Plastics are Future

Aimplas ha organizado para los días 6 y 7 de octubre la tercera edición de su Seminario Internacional Plastics are Future. Con esta edición en formato híbrido se consolida un evento de cuya organización está al frente Adolfo Benedito quien nos va a adelantar algunas de las claves del mismo.

Desde el inicio, uno de los objetivos más claros que hemos tenido ha sido tratar de dar a conocer los contenidos diferenciales de Plastics Are Future al máximo número posible de profesionales de los sectores más diversos. Y en este sentido, estamos convencidos que Plastics Are Future debe ampliar el espectro de público al que va dirigido. El evento debe despertar la chispa, la llama de la innovación y de la creatividad allá donde incluso pareciera imposible. Esperamos pues, la asistencia de investigadores, profesionales, empresarios del sector, estudiantes, docentes, incluso de profesionales procedentes de otras disciplinas que puedan enriquecer el futuro entendido como beneficio social y económico. Plastics Are Future tiene un puntito de provocador, en cuanto a que pretendemos provocar conciencias, pensamientos, ideas disruptoras. Y esto se alinea completamente con la siguiente pregunta. ¿Por qué un formato híbrido? Primero, por supuesto, por la actualidad a la que nos obliga la pandemia. La incertidumbre a corto y medio plazo indica que no se puede optar por un evento eminentemente presencial, la cual sería siempre la primera opción. Por otra parte, la filosofía de un formato híbrido abre puertas a esa universalidad de acceso que se pretende con Plastics Are Future 2021: cualquier idea, cualquier tecnología, cualquier invención, por compleja y lejana que parezca, queremos que despierte, que provoque esa chispa maravillosa que dé lugar a la generación de grandes y sorprendentes soluciones.

Inicialmente, como ya se ha comentado, una de las principales intenciones de esta edición de Plastics Are Future es la universalidad. Poder llegar lo más lejos posible y ampliar el público objetivo que pueda acceder a las ideas planteadas en el evento. Estamos convencidos que, pese a la visión sesgada de una parte de la sociedad hacia los materiales plásticos, éstos se caracterizan por ser totalmente versátiles y universales. Y esta universalidad la entiendo en el sentido que los materiales plásticos nos los podemos encontrar en cualquier aplicación, en cualquier rincón, en cualquier sector imaginable. Es por ello por lo que queremos borrar esa imagen tan limitada que actualmente se tiene de los plásticos y mostrar hasta dónde pueden llegar, cuál es su horizonte; desde salvarnos la vida, hasta permitir alcanzar planetas remotos como Marte y sus lunas. Para ello, la herramienta más poderosa que tenemos es la información y la capacidad de transmitirla correctamente. En Plastics Are Future 2021 se contarán aplicaciones asombrosas e increíbles, y queremos que llegue al público más diverso posible.

Para responder correctamente a esta pregunta creo que es necesario ir a los orígenes. Es decir, ¿cuáles son los responsables del cambio climático? Se puede decir que gran parte de dicha responsabilidad, simplificando mucho, recae sobre toda una serie de gases que provocan un efecto invernadero ampliamente conocido. Muchos de esos gases tienen en común el ser compuestos basados en el carbono del tipo metano, CO₂, entre otros. Y esto constituye lo que yo llamo el equilibrio del carbono, el cual hay que reestablecerlo. Los plásticos, al ser productos basados en carbono y procedentes de hidrocarburos varios, pueden ser protagonistas en este proceso de recuperar el equilibrio y reducir la concentración de estos gases perniciosos en la atmósfera. Y esto pasa por capturarlos y, por ejemplo, transformarlos en plásticos, o precursores de estos. Lo que llamamos química fina. De hecho, desde Aimplas, estamos trabajando en la producción de espumas, adhesivos, pinturas de poliuretano a partir de CO₂, o policarbonatos, o poliolefinas como el polietileno y el polipropileno. No solo el usar el CO₂ o el metano como fuente de fabricación de plásticos es una de las respuestas más rompedoras que tenemos para minimizar el cambio climático, además pueden tener un claro protagonismo en la captura eficiente de estos gases, tanto en ambientes industriales como en emisiones propiamente urbanas. En este sentido, por ejemplo, las membranas poliméricas -volvemos a la universalidad y versatilidad de los plásticos- son el futuro en cuanto a una captura limpia y eficaz de CO₂ tanto ambiental como industrial.

Somos conscientes del gran impacto mediático que el tema de los residuos procedentes de envases alimentarios genera en nuestra sociedad. Sin necesidad de ahondar mucho más en este tema –hay otros foros más adecuados–, Plastics Are Future 2021 pretende incidir en todo lo positivo que los plásticos pueden aportar a la producción y logística alimentaria. Lugares comunes en los que nos vamos a adentrar de manera decidida estarán relacionados con la reducción de peso y el aumento de la protección sobre el alimento. En este sentido, al hablar de protección no sólo nos referimos a la durabilidad y caducidad, sino también de protección con todas sus letras. Minimizar los riesgos de contaminación y proliferación de agentes microbianos y/o víricos es de importancia crítica, sabido es que nuevas cepas cada vez con mayor resistencia y persistencia -listeria, o las clásicas E. coli o salmonella, por ejemplo- son una amenaza para el presente y el futuro. Por tanto, la seguridad alimentaria es uno de los focos principales en los que Plastics Are Future 2021 se va a centrar. No me gustaría olvidar otro gran pilar: la sensorización avanzada de toda la cadena de envase alimentario, que va a suponer un gran impacto tanto en la calidad como en las prestaciones de estos. Narices artificiales, envases autorreparables, inteligentes, memoria de forma, serán conceptos recurrentes a lo largo del encuentro.

Si estudiamos con detalle las características comunes, tradicionales, de los materiales plásticos podemos llegar a la conclusión de que son los materiales perfectos, la herramienta esencial para cualquier mejora y avance médico que implique un impacto en la salud de las personas. Nuestro evento, como vector de futuro que es, quiere presentar algunas de las líneas más innovadoras y de rabiosa actualidad de los materiales plásticos en el desarrollo de tecnologías médicas paradigmáticas. Se ha hablado y se va a hablar largo y tendido sobre las superbacterias y esa tendencia terrible que tienen a mutar para hacerse cada vez más resistentes a los tratamientos actuales. De hecho, es un mantra comentado en muchas ocasiones que no pierde ni un ápice de realidad: en 2050, lamentablemente, habrá más muertes relacionadas con infecciones bacterianas que por cáncer. Nuevos tratamientos basados en efectos biomiméticos de biopolímeros modificados pueden aportar grandes herramientas en esta lucha contra este enemigo, y así los presentaremos. En temas de salud el evento se va a centrar, además, en otros aspectos. Se hablará sobre la generación de tejidos y órganos artificiales utilizando plásticos como soportes de células madre, la lucha contra el cáncer mediante el desarrollo de polímeros para mejorar la eficacia de los sistemas de detección y tratamiento (vectores antitumorales, mejoras en sistemas de contraste de imagen), o incluso toda una nueva generación de dispositivos bioabsorbibles de apoyo a sistemas quirúrgicos robóticos.

Todas estas innovaciones y desarrollos de futuro tienen que venir asociadas inevitablemente de herramientas modernas y de última generación que ayuden a hacerlas realidad. En ediciones anteriores de Plastics Are Future se discutió largo y tendido sobre temas relacionados con la integración de procesos, la impresión 3D, y, sobre todo, dimos especial relevancia a la llegada y el advenimiento de la llamada Industria 4.0. Es curioso, los tiempos cambian y ahora mismo ya se está hablando de la siguiente revolución, la llamada Industria 5.0 que, en mi opinión, no deja de ser una evolución orgánica de la 4.0. Más allá de la organización y la comunicación, la Industria 5.0 se centra en paradigmas fundamentalmente humanísticos. Todo se basa en el desarrollo de la robótica y la inteligencia artificial como herramientas, no para sustituir la labor del ser humano, sino para potenciar su valor intrínseco en los complejos procesos industriales. Sin duda, la aplicación de los sistemas de inteligencia artificial en dichos procesos industriales ya se está vislumbrando como uno de los arquetipos que serán fundamentales en la segunda mitad del siglo XXI. Su aplicación implica una revolución en todos los ámbitos, desde procesos más sostenibles medioambientalmente, pasando por un control más estricto y férreo sobre la productividad y los recursos destinados a la misma, minimización de errores sistemáticos o casuales, y llegando incluso al apoyo de la creatividad: optimización de diseños industriales, selección y desarrollo de nuevos materiales, etc.

Les espero en Plastics Are Future 2021. Muchas gracias por todo.