Aimplas y Fermax desarrollan un bioplástico fabricado íntegramente a partir de paja de trigo para productos electrónicos y electrodomésticos
24 de enero de 2013
El residuo que se ha elegido para llevar a cabo las investigaciones es la paja de trigo por su bajo coste y su elevada disponibilidad, sobre todo en el centro de Europa. De esta manera se ha conseguido dar un elevado valor añadido a un residuo que en Bugworkers constituye el 100% del aporte de materia prima para la producción de un plástico biodegradable.
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Nanofibras de celulosa como refuerzo
Hasta el momento, los socios de Bugworkers han logrado buenos resultados en la eficiencia del proceso que ahora se va a llevar a escala industrial. Estos resultados ya permiten hablar de unos costes y propiedades competitivos. “Es necesario un alto rendimiento en el proceso de síntesis de bioplástico mediante el uso de bacterias para poder hablar de un producto competitivo a nivel de costes, y en Bugworkers se están consiguiendo resultados muy positivos en este respecto”, señala Ana Espert, coordinadora técnica del proyecto en Aimplas.
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