insulbar de Ensinger

El aumento de la urbanización en todo el mundo exige a los constructores y arquitectos la creación de más espacios habitables y de trabajo. En ellos, las fachadas, ventanas y puertas acristaladas son elementos clave.

insulbar de Ensinger procura la separación térmica en marcos de metal de ventanas, puertas y fachadas. Foto: Ensinger.

Estos elementos (fachadas, ventanas y puertas acristaladas) ofrecen protección contra el viento y las diferentes situaciones meteorológicas y posibilitan la creación de espacios interiores y envolventes de edificios muy luminosos que garantizan sosteniblemente el confort de los habitantes. “En lo que se refiere a la eficiencia energética, el tema del acristalamiento es cada vez más importante para los constructores. Si bien, en la mayoría de los casos, son los marcos los que determinan la diferencia”, dice Ahmet Biler, experto en investigación y desarrollo en Metal Yapi.

Metal Yapi desarrolla sistemas de fachadas innovadores para edificios de renombre en todo el mundo. En ellos, el material más utilizado es el aluminio. Su resistencia mecánica estructural hace viable los diseños de marcos ligeros y delgados. Si bien, la alta conductividad térmica del metal se tiene que compensar. “Nuestros marcos de metal están formados por un semiperfil interior y uno exterior, unidos establemente mediante un perfil aislante como insulbar de Ensinger”, explica Biler. “Su material y diseño hacen posible la creación de marcos de metal que ahorran energía, incluso para casas pasivas”.

El especialista en plásticos alemán Wilfried Ensinger produjo en 1977 por primera vez perfiles altamente aislantes para sistemas de marcos de metal y revolucionó con ellos el sector industrial de ventanas. “Perfeccionados continuamente, estos perfiles están en la actualidad disponibles en una amplia gama de materiales y versiones para aplicaciones desde estándar hasta especiales”, destaca Oguz Han Erol, especialista en aplicaciones de la oficina de Ensinger en Estambul. “Con la optimización de la separación térmica de ventanas de metal, puertas y fachadas, insulbar se ha convertido en una marca de calidad mundial”.

El material base para insulbar es Tecatherm 66, una poliamida (PA) reforzada con fibra de vidrio. Altamente aislante, estable y, a pesar de ello, elástica, ofrece excelentes propiedades mecánicas y resiste permanentemente cualquier clima y situación meteorológica. El coeficiente de dilatación térmica linear es similar al del metal, por lo que el material solamente sufre una carga mínima cuando cambian las temperaturas. Esto también es de aplicación para la versión 'RE' de PA reciclada sin mezcla o para el recientemente presentado 'insulbar LO' de lambda optimizado con una conductividad térmica lambda de sólo 0,18 W/m·K.

Metal Yapi crea fachadas energéticamente eficientes para edificios prestigiosos como el 'Orjin Maslak' (UW=1.26 W/m²K, Leed oro en 2015). Foto: Metal Yapi.

Todos los perfiles pueden dotarse de banderas, recubiertas con película Low-E (LEF), para reducir las pérdidas de calor de forma todavía más efectiva. insulbar es dificilmente inflamable (clasificación E según EN 13501-1, B2 según DIN 4102) y soporta temperaturas de hasta 200 °C durante 20 minutos. Para los procesadores de metal, esto tiene la ventaja de que el perfil aislante se puede ensamblar en los semi-perfiles de los marcos antes del anodizado o lacado. Lo que posibilita una variación interna mínima, el procesado eficiente y una gran diversidad de colores al final de la cadena de creación de valor.

“Apoyamos al sector de la construcción de ventanas con prestaciones de servicio completas en la configuración del perfil óptimo: con una app de fácil manejo en nuestro sitio web así como con nuestra competencia personal en la técnica de aplicaciones”, dice Oguz Han Erol de Ensinger. “En la fase de desarrollo ofrecemos asesoramiento competente desde la elección del material y la geometría específicos para el proyecto, el cálculo energético y el diseño hasta el prototipado rápido. Y continuamos nuestro servicio asegurando la máxima calidad, desde el procesado, la manipulación y la logística hasta la aplicación de los perfiles aislantes”.

“Junto a la calidad, variabilidad e innovación del producto, estas prestaciones de servicio son las que marcan la diferencia para nosotros”, dice Ahmet Biler de Metal Yapi. “Las especificaciones de los edificios varían y, en la mayoría de los casos, son exigentes. Dado que nos hemos propuesto el ambicioso objetivo de convertirnos en la mejor empresa de fachadas del mundo en 2023, apostamos por socios excelentes. En este sentido nos referimos especialmente a nuestros esfuerzos en continuar aumentando la eficiencia energética de nuestras soluciones, pues el envolvente del edificio influencia de forma duradera el confort y la rentabilidad de un inmueble”.

Al contrario de lo que ocurre en los acristalamientos translúcidos, que hacen posible la ganancia de energía, el marco es parte del envolvente opaco del edificio. Para reducir las pérdidas de energía al mínimo, la parte del marco del hueco de la ventana, que puede variar desde más del 20 hasta menos del 10 por ciento, debería ser lo más pequeña posible. La mejor forma de conseguirlo es con metal y una separación térmica altamente eficiente. “En proyectos en Turquía, en la mayoría de los casos, para una ventana o una fachada de cortina se espera un coeficiente de conducción del calor de 1,5 W/m²K o menor”, dice Ahmet Biler.

“Aún cuando el reglamento sobre edificación TS 825 actualmente exige un Uw de solo 2,4 W/m²K, los inversores quieren bajar todavía más el consumo energético en sus edificios”, complementa Biler. “No solo para la imagen ecológica, sino también para seguir siendo independientes de los costes energéticos que aumentan potencialmente, en países importadores de energía, como Turquía, este es un factor importante porque los edificios se utilizan durante décadas”. Un ejemplo es Orjin Maslak, un centro de oficinas de 16 plantas en Estambul. Su fachada doble con marco de aluminio alcanza un UW de 1,26 W/m²K. Éste fue uno de los primeros edificios de Turquía que en abril de 2015 consiguió una certificación LEED en la categoría ‘oro’.

Metal Yapi equipa un número creciente de prestigiosos edificios con sistemas de fachadas térmicamente aislados y, en la actualidad, consigue en Turquía coeficientes UW de hasta 1,2 W/m²K. Mientras que el clima mediterráneo es más bien suave, en las zonas climáticas más frías aumenta la demanda de coeficientes U todavía más bajos. Con insulbar de Ensinger, Metal Yapi consigue incluso estándares de casas pasivas según PHPP, por ejemplo en ‘The One’ (UW de 0,90 W/m²K) y en Belliard 40 (UW de 0,75 W/m²K) en Bruselas (Bélgica).

Fachada de 'The One' (UW=0.90 W/m²K) en Bruselas, Bélgica. Fuente: Metal Yapi.