Inspectores japoneses conocen, de primera mano, el sistema de producción y control de carnes español
26 de julio de 2012
Durante la visita, en la que la OECE ha colaborado de forma coordinada con las administraciones públicas involucradas, se mantuvieron reuniones con los Ministerios de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad (MSSSI), Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (MAGRAMA) y con autoridades competentes de las Comunidades Autónomas. Además, se visitaron cuatro establecimientos cárnicos y una explotación de porcino.
Los inspectores nipones señalaron las buenas relaciones comerciales con España, uno de los principales proveedores de alimentos a Japón, destacando la ausencia de problemas, en los últimos cinco años, en los envíos de carne, tanto en lo que se refiere a las condiciones higiénicas como a los límites de residuos, etc.
La opinión que expresaron las autoridades japonesas sobre el conjunto de su visita fue muy positiva, ya que pudieron conocer de primera mano las modernas tecnologías que se utilizan en la elaboración de productos curados típicos españoles, que en Japón no son muy conocidos.
El año pasado, las exportaciones cárnicas españolas con destino a Japón fueron de 25.357 tm de carne de cerdo y 2.130 tm de despojos, por valor de 83 millones de euros, junto a 460 tm de jamones y paletas curados y 290 tm de otros embutidos curados y cocidos por valor de 9 millones de euros.
El sector cárnico español exportó en el año 2011, a más de 40 países, un total de 1,40 millones de toneladas de productos frescos, y 116.000 toneladas de elaborados, lo que representó unas ventas exteriores de algo más de 3.644 millones de euros, un 17,1% superiores a los 3.112 millones facturados en 2010, unas cifras que por sí solas hablan de la importancia estratégica que el comercio exterior tiene para toda la cadena de valor de la carne.
Las exportaciones de carnes y despojos supusieron unas ventas de 2.897 millones de euros, de los que 2.086 millones corresponden a carnes de porcino y 401 millones a vacuno, mientras que los elaborados vendidos en el exterior facturaron 747 millones de euros, encabezados por jamones curados (215 millones) y embutidos curados (232 millones de euros).
El comercio exterior de carne supone alrededor del 30% de la producción cárnica de nuestro país, pero sólo representa el 8% de la producción de elaborados, aunque en estos últimos ejercicios este porcentaje ha ido progresando, de forma suave pero continua.