La importancia del veterinario privado en la gestión de las enfermedades de declaración obligatoria
La Asociación de Veterinarios de Ovino y Caprino de Castilla y León (Avoccyl) mantuvo una reunión el pasado 11 de octubre sobre enfermedades transfronterizas con Germán Cáceres Garrido, jefe del Área de Epidemiología de la Subdirección General de Sanidad e Higiene Animal y Trazabilidad del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA).
En la reunión entre Avoccyl y el MAPA se llevó a cabo una revisión de las enfermedades de declaración obligatoria epizoóticas en la Unión Europea, dándole especial énfasis a las de la categoría A del ovino/caprino, donde se encuentra la viruela ovina y caprina, además de la fiebre del valle del Rift, fiebre aftosa y peste de los pequeños rumiantes.
También se trató la importancia del papel del veterinario privado en la gestión de esas enfermedades (bioseguridad, vigilancia y contingencia) quien tiene la obligación de conocer en todo momento los protocolos de actuación para hacer frente a los brotes epizoóticos puesto que, en estos casos es necesaria la colaboración de todos: ganaderos, veterinarios privados y Servicios Veterinarios Oficiales.
Se remarcó que, en actual contexto de brote de viruela ovina y caprina en España, los veterinarios deben estar vigilantes y ante cualquier indicio de lesión cutánea compatible con la enfermedad, deben avisar inmediatamente a los servicios veterinarios oficiales y aplicar medidas de bioseguridad tendentes a reducir el riesgo de posible expansión de la enfermedad. Si la comunicación de un posible nuevo foco se retrasa, el impacto es mucho mayor para el resto de la ganadería y para el país en su conjunto.
Las medidas de control tomadas en los focos detectados en las provincias de Granada y Cuenca han sido:
- Establecimiento de una zona de restricción y una zona de vigilancia con censado de todas las explotaciones y animales presentes en las explotaciones contenidas en ella.
- Inmovilización y visita oficial para inspección clínica de todas las explotaciones en la zona de restricción.
- Investigación epidemiológica para tratar de identificar la fuente del virus y los contactos de riesgo.
- Sacrificio del censo total in situ y eliminación de cadáveres en planta autorizada de tratamiento.
- Retirada y eliminación de productos susceptibles de estar contaminados (estiércol, material de cama y pienso).
- Limpieza y desinfección oficial.
La epidemiología del brote de la viruela ovina y caprina en España se está caracterizando por tener una morbilidad del 15-30%, una mortalidad del 9-15% en goteo (sin mortalidad en animales jóvenes), fiebre, lesiones en la piel en forma de mácula que evolucionan a pápula en zona de entrepierna, axila, perineo, abdomen, hocico o incluso en el cuerpo entero, rinitis, conjuntivitis, inflamación de ganglios linfáticos y síntomas pulmonares. Las principales vías de transmisión son el contacto directo, aerosoles y fómites contaminados (estiércol contaminado, por ejemplo).