Consejo informal de ministros de Agricultura de la UE celebrado en Praga
Luis Planas pide una respuesta "urgente y coordinada" para evitar una crisis alimentaria
La seguridad alimentaria y las consecuencias de la guerra en Ucrania centran el Consejo informal de los ministros de Agricultura de la UE en Praga. España reclama a la Comisión Europea medidas para mantener la actividad de las plantas de producción de fertilizantes
El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, ha abogado por la necesidad de arbitrar una "respuesta urgente y concertada de la comunidad internacional para evitar una crisis alimentaria en los países más desfavorecidos", que son los más vulnerables a las consecuencias de la guerra en Ucrania como el encarecimiento de los precios o la menor disponibilidad de cereales y materias primas.
En el Consejo informal de Ministros de Agricultura de la Unión Europea (UE) celebrado en Praga, Planas ha apelado a la responsabilidad que tiene ésta como primer exportador mundial de alimentos para el restablecimiento de la normalidad en los mercados.
El ministro ha señalado que si bien la UE protege eficazmente su seguridad alimentaria interna, sin temor a la escasez de alimentos, tiene que estar “presta a responder” porque hay muchos países fuera de la Unión Europea que tienen serias dificultades para abastecerse. El precio de los alimentos más básicos en estos países se sitúa fuera del alcance de amplias capas de la población, lo que implica el riesgo de tensiones políticas y sociales.
Medidas para paliar el alza de los precios
Para estabilizar los mercados y para asegurar la suficiencia alimentaria, el ministro ha considerado clave que los países "no adopten medidas de restricción de las exportaciones, así como dar prioridad a la información y la transparencia". En este sentido, ha destacado la importancia del acuerdo europeo para poner en común datos sobre la disponibilidad de las reservas de cereales, oleaginosas, semillas y arroz.
Aunque Europa no tiene en la actualidad un problema de abastecimiento, Luis Planas ha señalado que la creciente inflación, que espera se modere y vaya bajando en los próximos meses, reduce la capacidad adquisitiva de las familias, "una preocupación latente en el Gobierno", pero que se trata de atajar con medidas que "mitiguen el impacto del creciente coste de energía y materias primas".
En este sentido, ha explicado que la crisis por el encarecimiento de los precios y la escasez de materias primas viene acompañada además de un fuerte incremento de los precios de la energía y de los fertilizantes, "que puede afectar al desarrollo normal de las cosechas y producciones y que no favorece la estabilización de los mercados".
En esta coyuntura, Planas ha apelado a la "unidad de esfuerzos para ofrecer una respuesta urgente y coordinada que permita estabilizar el comercio de las materias primas y de los alimentos". Una vez más, el ministro a abogado por el "multilateralismo y el trabajo coordinado" con las instituciones internacionales encargadas de preservar la seguridad alimentaria como la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO).
El ministro español se ha referido también a la conveniencia de analizar las estrategias europeas, como la del Pacto Verde, y adaptarlas al contexto actual, como consecuencia de los efectos de la guerra de Rusia en Ucrania en los sistemas alimentarios. “Estamos en un momento complicado, tenemos que cumplir los objetivos del Pacto Verde, pero tenemos también que mirar el día a día y conseguir que todas las familias tengan un abastecimiento suficiente de alimentos”.
Y para que no se ponga en peligro la capacidad de producción de alimentos, el ministro ha pedido a la Comisión Europea que tome medidas lo antes posible para asegurar el mantenimiento de la actividad de las plantas de producción de fertilizantes.