Los AGV en la evolución a almacenes más inteligentes
Los almacenes automáticos están evolucionando hacia almacenes más inteligentes sin necesidad de instalar estructuras fijas que complican y reducen la flexibilidad de reacción ante posibles cambios. La tendencia actual es flexibilizarlos al máximo, para esto unos de los grandes aliados tecnológicos que encontramos son los AGVs o vehículos de guiado automático.
Las siglas AGV se corresponden al acrónimo “Automatic Guided Vehicle” y es básicamente eso, un vehículo automático que no precisa de conductor para llevar a cabo las tareas para las que ha sido programado.
Mayor libertad de movimientos y trazabilidad
Esta tecnología que lleva varias décadas en uso no ha dejado de evolucionar mejorando significativamente en sus sistemas de guiado y de comunicación con el resto de elementos en planta lo que le permite moverse con mayor libertad entre estanterías y pasillos al mismo tiempo que mantiene total trazabilidad de sus movimientos y las cargas que transportan. Esta información sirve de fuente de alimentación de los sistemas de gestión de almacenes, pudiendo actualizar a tiempo real el contenido de los mismos y la distribución de los distintos materiales.
Los vehículos retiran los palés de forma totalmente automática
Gracias a los sistemas de comunicación entre máquinas, los vehículos son capaces de retirar los palés resultantes de las líneas de paletizado, de producción y de enfardado para su depósito en el almacén de manera totalmente automática. El sistema de gestión de almacenes será el que informe al vehículo sobre la ubicación óptima donde depositar el palé, guardando registro para su posterior utilización.
Automatización sin grandes inversiones
En función del estado del almacén y de la tarea a realizar se utilizará el vehículo concreto más óptimo, tanto por capacidad de carga como por altura como por tipo de guiado u otros complementos que le confieren múltiples funcionalidades. Finalmente, subrayar que en un entorno tan cambiante como el actual, parece imprescindible hacer una automatización que pueda adaptarse fácilmente, sin necesidad de realizar grandes inversiones. Y los AGVs son la respuesta en muchos de los casos.
Rubén Martínez, coordinador de relaciones con stakeholders de ASTI.
