La flota agrupada en OPAGAC aboga por desarrollar proyectos de pesquería que aborden la sostenibilidad de manera integral
La flota atunera española, agrupada en la Organización de Productores Asociados de Grandes Atuneros Congeladores (OPAGAC), considera que las certificaciones FAD-free otorgadas por MSC (Marine Steward Council) a buques atuneros que operan en el Pacífico, no están basadas en metodologías robustas, desde el punto de vista científico y pueden ser interpretadas arbitrariamente, lo que no asegura su cumplimiento.
Según la asociación española, cuyos barcos operan en estas aguas desde los años 90, una gran parte de las capturas de atún en el Pacífico se realizan haciendo uso de dispositivos de agregación de peces (FAD, por sus siglas en inglés), “incluso por parte de los buques que han obtenido la certificación FAD-free de MSC”, apunta Julio Morón, director gerente de OPAGAC.
Actualmente, la certificación MSC se obtiene basándose en la distancia de los bancos de peces a los FAD y en la composición de las especies capturadas. Según la asociación española, estos dos criterios no son coherentes ni válidos para evaluar y certificar su aplicación de manera rigurosa y científica. Según Julio Morón, “cualquiera puede mover una milla un FAD, simplemente para argumentar que el banco no estaba agregado en torno a él”.
Doble rasero ético
Por otro lado, esta certificación puede ser aplicada sólo a una parte de las capturas de un mismo barco, lo que a juicio de OPAGAC, aún en el caso de que ese porcentaje pudiera demostrarse rigurosamente como captura FAD-free, plantea serias dudas sobre la doble ética que implica reconocer que un mismo buque puede pescar, o no, de manera sostenible durante un mismo período de actividad.
Esta contradicción, según OPAGAC, no afronta los problemas asociados al mal uso de los FAD. Para la asociación, cualquier certificación que quiera garantizar las buenas prácticas y la sostenibilidad de esta pesquería debería contemplarlas en su conjunto, tal como hace la organización española a través de su proyecto FIP (Fishery Improvement Project), desarrollado conjuntamente con WWF.
A juicio de OPAGAC, ante la falta de base científica capaz de definir una captura como FAD-free, debería aplicarse el Código de Conducta para la Pesca Responsable (FAO, 1995), que además es uno de los componentes básicos de la norma MSC.
Por último, OPAGAC destaca que tampoco está probado que la actual certificación FAD-free se haya traducido en una reducción de las capturas con FAD, lo cual también desacredita la teoría de MSC, según la cual reconocer y premiar prácticas de pesca sostenible ayuda a incrementar el rendimiento de las pesquerías.
OPAGAC plantea estas cuestiones en el artículo “To FAD or not to FAD” que recoge la publicación científica internacional Marine Policy.