La segunda edición de Euromaritime confirma su pertinencia y favorece la implantación de Eurowaterways
El salón Euromaritime cerró sus puertas en Paris Expo – Porte de Versailles (hall 6) después de tres días de encuentros, intercambios, descubrimiento y debates.
Con 5.000 visitantes procedentes de 48 países y 306 expositores que representaban toda la diversidad y la riqueza del sector marítimo en Europa, Euromaritime en su segunda edición afianzó su lugar en la agenda de los industriales, inversores y mandatarios políticos franceses y europeos.
Este éxito debe compartirse con Eurowaterways, el salón europeo de la economía fluvial, lanzado este año.
Euromaritime quiso reflejar la vitalidad económica del sector marítimo presentando todos sus componentes: construcción y reparación naval, transporte marítimo, puertos, pesca, seguridad, medioambiente, energías renovables, offshore o también tecnologías digitales al servicio de las actividades marítimas.
La vocación del salón también fue acercar las problemáticas de la economía marítima a los tomadores de decisiones políticos, tanto franceses como europeos. Los industriales, expertos y cargos electos tuvieron la oportunidad de intercambiar acerca de los retos del crecimiento azul durante las tres conferencias y los trece talleres que reunieron a no menos de 110 participantes europeos.
80 protagonistas implicados en el sector fluvial y fluvio-marítimo aprovecharon para explotar las pasarelas existentes entre el agua dulce y el agua salada durante la primera edición de Eurowaterways.
Una cita de negocios
“Euromaritime ha permitido a los expositores finlandeses entablar nuevos contactos tanto con visitantes como con expositores franceses y extranjeros” afirmó Marie-Zoé Belon-Laitinen, jefe de proyecto en Finpro. “Hemos podido calibrar el estado del mercado. Después de una temporada gris en el sector de la construcción naval, nos ha sorprendido gratamente la actitud de los compradores” añadió.
“Este salón ha sido excepcional. Nuestros expositores del pabellón de Luxemburgo están encantados. Han mantenido contactos de alto nivel y muy interesantes para los negocios. Volveremos en 2017 y algunos con una superficie mayor” subrayó Paul Marceul, secretario general del Clúster Marítimo luxemburgues. También hizo hincapié en la calidad de las conferencias que, según su opinión, proporcionaron una buena visión de los avances futuros.
“Las empresas del sector de reparación y construcción del Puerto Atlántico La Rochelle están muy satisfechas“, confirmó su representante Patricia Hagerty.
“El salón ha brindado nuevas oportunidades, seguiremos fieles” anunció Philippe Gérard, director operativo de Seimi.
Una cita que recoge la ambición marítima
Dos personalidades europeas inauguraron el salón el pasado 3 de febrero: el maltés Karmenu Vella, comisario europeo de Medioambiente, los Negocios Marítimos y la Pesca, y Gesine Meissner, diputada europea alemana, presidente del Intergrupo Mar, Ríos y zonas costeras. Estuvieron acompañados por Vidalies, secretario de estado encargado de Transportes, Mar y Pesca.
El jueves 5 de febrero, la participación de Emmanuel Macron, ministro de
Economía, Industria y Digital en el comité estratégico del sector naval organizado por la Agrupación de las Empresas de Construcción y Actividades Navales (GICAN), también concentró la atención de los presentes.
El antiguo ministro de transportes y diputado socialista Frédéric Cuvillier, la diputada socialista Patricia Adam, el vicepresidente de la Asamblea Nacional Marc Le Fur, el presidente del partido de izquierdas, Jean-Luc Mélenchon, la presidenta del Frente Nacional, Marine Le Pen y la eurodiputada del FN Sylvie Goddyn también recorrieron los pasillos del salón.
La cordialidad, los negocios y el lobbying fueron las claves de esta segunda edición del salón de la economía del mar y de los ríos, cuya próxima cita tendrá lugar en 2017.