Schottel moderniza y alarga la vida del granelero de 26 años, «Pirholm»
Gracias a una modernización personalizada por parte del equipo de Schottel, la operatividad del granelero noruego «Pirholm» está asegurada para las próximas décadas. Con un esfuerzo de instalación relativamente bajo, se pueden lograr numerosas ventajas, como una mejora significativa de la velocidad, gracias a la nueva tobera de alto rendimiento Schottel SDV45. Esto ha reducido los costes operativos, así como el consumo de combustible, al tiempo que mejora la maniobrabilidad, lo cual es especialmente importante durante el servicio en las piscifactorías en las que opera el buque.
«Schottel nos ha convencido al responder a nuestras necesidades y encontrar una solución individual y personalizada para el buque», afirma Nils Tore Øpstad Melingen, gerente general del armador Bio Feeder AS. «Estamos absolutamente satisfechos con el rendimiento de los propulsores Schottel. Además, Schottel garantiza la disponibilidad de piezas de repuesto para las próximas décadas».
Modernizado por dos SRPs 190
Originalmente equipados con dos propulsores de timón Schottel tipo SRP 330, se instalaron dos nuevos propulsores acimutales Schottel tipo SRP 190, con el fin de modernizar este granelero de 26 años. Dado que la solución suministrada por Schottel podría integrarse en la estructura de acero existente en el antiguo sistema de propulsión, no fue necesario realizar cambios en el casco o grandes trabajos de acero. Además, el trabajo podía ser realizado por un astillero local, reduciendo los costes de instalación y el tiempo de inactividad.
Nuevas toberas que optimizan la eficiencia del buque
Los propulsores recién instalados están equipados con las toberas de alto rendimiento SDV45, desarrolladas por Schottel. Estos generan más empuje y, por lo tanto, mejoran la capacidad de mantener el rumbo y la estabilidad de la posición. Además, las toberas Schottel VarioDuct aseguran la optimización de la maniobrabilidad y el funcionamiento libre. En general, las nuevas unidades de propulsión no solo llevan a una mejora significativa de la velocidad y a una reducción del consumo de combustible, sino también a costes de operación más bajos.