V Jornada del Observatorio de Anticipación Industrial

La Asociación de Empresas de Componentes para Ascensores (Aecae) celebró el pasado 24 de enero su V Jornada del Observatorio de Anticipación Industrial (Oai). La jornada, que tuvo lugar en la Escuela de Organización Industrial de Sevilla, se estructuró en torno a cuatro mesas de trabajo que abordaron temas como la transformación digital en el sector industrial, el marco normativo para una nueva realidad tecnológica e industrial o las soluciones realistas para la transición energética de las industrias, además de realizar un ejercicio de retro anticipación sobre la aplicación de los Fondos Europeos Next Gen.

La V Jornada del Observatorio de Anticipación Industrial tuvo una gran acogida entre el sector.

José María Compagni, director del Observatorio de Anticipación Industrial y coordinador de Aecae, fue el encargado de realizar la apertura de la jornada, cuyo objetivo definió como “un ejercicio práctico de anticipación industrial, en el que abordar temas que puedan influir como el marco normativo, los elementos de aceleración y desaceleración o los actores que intervienen en cada tendencia”, en un contexto muy marcado por el incremento de los costes, especialmente los energéticos, un nivel de inflación que marca récords históricos y un contexto geopolítico muy tensionado.

Jesús de la Peña, presidente Aecae -Clúster del Ascensor, intervino a continuación para poner en contexto esta quinta edición del Observatorio, un “foro de debate que pusimos en marcha con mucha ilusión y mucho interés y que desde entonces ha contado con la participación de ponentes de prestigio que han ayudado a poner un poco de luz a los acontecimientos que se están viviendo”.

La apertura de la jornada corrió a cargo de José María Compagni, Jesús de la Peña, Francisco J. Velasco y Carmen María Álvarez.

Tras agradecer la participación de todos los asistentes, entre ellos representantes del tejido asociativo como Feeda, Fepyma y la Asociación de Ascensoristas de Andalucía, por respaldar este tipo de iniciativas, de la Peña perfiló un entorno en el que, según aseguró, “plantea una incertidumbre que no se recuerda en los años que llevo trabajando en esta industria”, con una guerra en Europa que nadie pensaba que pudiera volver a pasar, una inflación disparada que no cumple con los cánones de la economía –al estar motivada por una falta oferta en lugar de por una sobredemanda– y pone en entredicho toda la cadena de suministros y la globalización, los bancos centrales incrementando de forma continuada los tipos de interés y la energía a unos precios insostenibles como consecuencia de la guerra de Ucrania pese a que los consumos han bajado. “La previsión para el 2023 y 2024 plantea una caída en torno al 4-5% del sector inmobiliario y, con la amenaza de la posibilidad de recesión europea, el 2023 se plantea como uno de los años más complicados para las pymes, que son las que sostienen el 90% del empleo”, aseguró De la Peña para poner en contexto la elección de los temas de la jornada: cómo avanzar en el entorno digital –“muy grande y complejo, sobre todo para las pymes”–, cómo crear y mantener el talento dentro de las organizaciones –“que cuesta tanto formarlo como conservarlo, y es ahí donde la digitalización marca un hito para ser innovadores y atraer personas de talento a las organizaciones”–. Tras abogar por el papel de las organizaciones empresariales por su capacidad de trabajar tanto con los centros de organización política como con los trabajadores, el presidente de Aecae no quiso finalizar su intervención sin comentar la importancia de la transición energética y las posibilidades que ofrecen los fondos Next Generation –“importantes para mejorar la competitividad y tener un impulso de innovación en empresas como las pymes ascensoristas, en las que las grandes aportaciones de capital son muy complejas y lo van a ser más por la subida de los tipos de interés, que se van a situar en el 7-8%”.

El Presidente de Aecae, Jesús de la Peña, perfiló los principales desafíos que enfrenta la industria del sector.

Francisco J. Velasco, director de la Escuela de Organización Industrial Andalucía y Carmen María Álvarez Ariza, jefa de servicio de Planificación y Análisis de la Secretaría General de Industria y Minas de la Junta de Andalucía se encargaron de cerrar la introducción de la jornada haciendo hincapié en las acciones que se están llevando a cabo en cuestiones de transformación digital, sostenibilidad y transición energética en Andalucía y, especialmente en los “planes de acción en cadenas de valor sectoriales concretos, con el objetivo de que las cadenas de valor sean más sólidas y se completen en el territorio”.

La primera mesa de debate se centró en intentar anticipar cuál es la velocidad de la transformación digital de la industria en el sector del transporte vertical

Alfredo Gómez, responsable de desarrollo de negocio de Itainnova, aportó su percepción, a partir de los contactos con empresas del ámbito industrial, de que “se ha avanzado mucho en los últimos años en términos de digitalización. Se ha pasado de una situación de cierta confusión y urgencia ¬—en la que las empresas no sabían ni por dónde empezar– a un momento en el que las empresas industriales de cierta entidad han superado esa fase y tienen una serie de proyectos más o menos ambiciosos en cartera, con dificultades para llevarlos a cabo, pero con hojas de ruta de mejora en aspectos de digitalización”.

Si bien las fases en las que se encuentran las distintas empresas depende del tipo de actividad que realizan, el experto apuntó que “hay proyectos en diseño de producto, en planificación de las operaciones –por ejemplo, inteligencia artificial para hacer análisis de previsión de la demanda–, en sensorización para recoger información de las máquinas y digitalizar todos los procesos –para ofrecer una trazabilidad completa, ganar eficiencia, mejorar la calidad, evitar paradas no programadas, etc.–, en automatización y robotización de las plantas y, por último, en sensorización del producto final y conectividad, una de las tendencias más acusadas en el ámbito del ascensor”.

Alfredo Gómez concluyó su intervención asegurando que “ya hay estudios que confirman que se dan mejoras del 15-20% como consecuencia de esas acciones, si bien hay un 80% que depende de la posibilidad de generar nuevos tipos de negocio y nuevas vías de ingreso a partir de los datos de uso –por ejemplo, patrones de tráfico en edificios, por ejemplo–“.

A continuación, fue el turno de Juan Porto, consejero de la empresa Liftel y experto en innovación que abogó por “estar cerca del cliente para hacer la transformación digital de las empresas mantenedoras multimarca, lo que supone una problemática muy complicada para los segmentos medianos y pequeños, porque les falta volumen tanto en términos de recursos humanos como económicos para abordarla”. Y es que, como dijo, es necesario concienciarse de que “vamos a ser capaces de hacer muchas más cosas si tenemos la capacidad de abrazar las posibilidades que ofrece la transformación digital”. Si bien Porto aseguró que se se ha avanzado mucho en la aplicación de estas tecnologías en los procesos internos, tampoco ocultó que, “por el momento, falta mucho en cuanto a los servicios que ofrecen los técnicos” La falta de personal con filosofía digital, para poder actuar con toda la información que se obtiene de la sensorización del parque de ascensores, fue otro de los hándicaps que identificó en el sector de la elevación y quiso concienciar a los asistentes de que “no se obtienen resultados a corto plazo, en ese sentido, sino a largo plazo –algo más complicado para las empresas de tamaño pequeño que para las organizaciones con un parque voluminoso–, aunque hay que ser conscientes de que, en la actual situación en las que se produce la compra de muchas empresas por parte de grandes compañías, el reto tecnológico juega una parte importante”. Y concluyó asegurando que “el desarrollo de productos de Liftel va muy encaminado a poder hacer este camino, teniendo en cuenta que no todo está descubierto, y viendo qué cosas pueden resultar productivas”.

La primera mesa de debate contó con Manuel Royo, de Wittur, Juan Porto, de Liftel, Alfredo Gómez, de Itainnova, Jeronimo van Schendel, de Bildia, Eduardo Fuentesal, de Tier1 y Dorota Gryka, de MP Ascensores.

Jerónimo van Schendel, CEO de Bildia, centró su intervención en las principales oportunidades de la digitalización para las empresas del sector, con especial atención en la creación de redes en la cadena de gestión.

“Estamos en un momento de enorme crecimiento de las ventas en el sector digital, como pone de manifiesto el crecimiento del 1800% desde 2016 en el ámbito de la construcción”, aseguró el experto, quien añadió que “por lo que se refiere a las grandes corporaciones del sector, con capital propio o fondos de inversión, este aspecto tuvo un crecimiento del 400% del 2021 al 2022”.

Y es que, teniendo en cuenta que el mercado de la construcción es “gigantesco y viene desde una de las posiciones de cola en cuanto a digitalización”, en palabras de Van Schendel, este “está despertando y ofrece muchas oportunidades”.

Oportunidades que, para las pymes, debería traducirse en un “esfuerzo por lograr una mayor integración con la red de distribuidores y actuar en el ámbito digital”.

“Para los distribuidores es esencial pasar a la venta omnicanal, recogiendo datos para anticipar las necesidades de los clientes sin grandes inversiones –ya hay muchas herramientas que permiten hacer eso–, teniendo en cuenta que los ‘marketplaces’ especializados –que tienen capacidad de entrar en las redes logísticas y pueden ‘comerse’ los márgenes– ya están pasando de ser exclusivamente B2C a abordar el B2B”, aseguró el CEO de Bildia, quien no quiso dejar pasar la ocasión de listar las oportunidades de esta situación para las empresas de Aecae y las pymes que asocia: “el mundo de la nube es sencillo y ofrece infinidad de ventajas en cuanto a reducción de costes, externacionalización de desarrollos, etc. Permite que las pymes empiecen a trabajar de una forma muy rápida con un modelo que se adapte a ellas, teniendo en cuenta que las empresas compradoras ya han empezado a digitalizar sus procesos de compra”.

Dorota Gryka, especialista en BIM de MP Ascensores fue la encargada de analizar el momento en el que se encuentra el uso del BIM en la industria. “La decisión de adoptar BIM por parte de una empresa es una decisión estratégica sobre en qué mercados se quiere mover una empresa y da un mayor nivel de profesionalización. Para trabajar con empresas grandes de construcción, por ejemplo, el BIM es una realidad”, aseguró la experta, quien aconsejó “no dejarlo para más tarde, para estar preparados”.

Los datos de uso BIM en licitaciones públicas en los últimos años avalan esta percepción, al tiempo que se han publicado varios códigos internacionales y las industrias han adoptado estos requerimientos del mercado adaptando su oferta para cumplir con estas necesidades. “Alemania ha lanzado un nuevo estándar que ha desarrollado durante tres años y ELA ha puesto en marcha un grupo de trabajo ISO, en el que han sido aceptados y Feeda y Aecae, cuyo objetivo es acordar, mediante consenso, qué información se ofrece sobre ascensores, antes de que la normativa lo imponga”, aseguró Grytka.

“En cuanto a los fabricantes de componentes, puede que no todos los componentes requieran tener un reflejo en objeto BIM pero los fabricantes de componentes clave que quieran diferenciarse pueden utilizarlo para beneficiarse de un carácter prescriptor”, concluyó.

Dorota Gryka, de MP Ascensores, analizó el papel del BIM en la industria del ascensor.

Eduardo Fuentesal, director corporativo de Tier1 cerró esta primera mesa de debate asegurando que “el cliente hoy en día se ha vuelto mucho más exigente e impaciente y, aunque los sectores B2B van más lentos que los B2C, los sectores que están más cerca del consumidor final, como los mantenedores de ascensores, pueden experimentar una situación de arrastre y verse más exigidos por la transformación digital”.

En cuanto a los factores de resistencia al cambio, más allá de los más conocidos, Fuentesal quiso hacer hincapié en la falta general de personas para llevar a cabo la transformación digital de la empresa, ya que “hace falta saber de tecnología pero también de procesos de negocio”, abogando por la necesidad de “tecnólogos creativos”.

Y concluyó ofreciendo los que, desde su punto de vista, son los seis pilares de la transformación digital:

• Regalar tiempo.
• Ciclos cortos para minimizar riesgos y agilizar.
• Premiar el error, que puede acercarnos a la solución.
• La mejor idea siempre debe triunfar.
• Disfrutar trabajando.
• Buscar fuera, en el cliente. Ser curioso y, en el caso de las pymes, “copiar lo que se pueda”.

La segunda mesa de debate se centró en la situación normativa que vive la industria en general y la de ascensores en particular.

Ignacio Cáceres, jefe de servicio de seguridad industrial de la Junta de Andalucía y representante de España en la elaboración del Reglamento de máquinas, centró su intervención en los cambios que plantean el próximo Reglamento de máquinas –que se aprobará en los próximos meses pero cuya aplicación efectiva se difiere 3,5 años–, la nueva ITC –que, previsiblemente, saldrá en los próximos meses– y la nueva Ley de industria.

“Es necesario adaptar el marco legal a la realidad actual (digitalización, etc.) para que el sector industrial tenga un mayor peso y protagonismo en el conjunto de la economía”, aseguró Cáceres, que hizo hincapié en aspectos como la seguridad industrial, la simplificación administrativa de las actividades previas a la instalación y el refuerzo de las capacidades de las organizaciones para el control a posteriori y el establecimiento de medidas del incremento de la seguridad sobre ascensores existentes.

Adaptar el marco normativo a las nuevas funcionalidades (conectividad, Inteligencia Artificial, etc.– y que estas no puedan provocar fallos de seguridad –teniendo en cuenta que el comportamiento evolutivo de la IA requiere una evaluación de riesgos que contemple la posible deriva de esa máquina que evoluciona– son las cuestiones básicas, aunque también hay otras igualmente importantes en cuanto a la adaptación de la documentación por medios digitales, para evitar gastos innecesarios.

No faltaron las cuestiones controvertidas, como el hecho de que la nueva ITC obliga a contratar a un ingeniero técnico a jornada completo, lo que puede suponer una barrera para las empresas pequeñas, a lo que el experto apuntó que parece que se ha realizado “una matización de este requisito, según la cual no se obliga a esa contratación a tiempo completo a las micropymes, tras las conversaciones de los representantes del sector con el ministerio”.

La segunda mesa abordó el marco normativo con Emilio Robles, de Eleser, Ignacio Cáceres, Eduardo Gamero-Casado, José María López y Marcello Zacarelli.

Eduardo Gamero-Casado, catedrático de Derecho Administrativo, Of Counsel Montero Aramburu abogados, se centró en el marco jurídico en el que se inscriben todas estas nuevas normativas, asegurando que “cualquier carga regulatoria tiene que estar justificada y, en caso contrario, se puede impugnar la revocación de ese requisito”.

Tras apuntar que “no hay un marco jurídico específico para la IA, lo que provoca una inseguridad jurídica para las empresas en la vista de las inversiones que se están haciendo”, aseguró que se ha propuesto un reglamento de IA que se espera que se apruebe a lo largo de 2023 y que dialoga con el Reglamento de máquinas y la nueva ITC.

En cualquier caso, no dejó de explicar que “los sistemas de elevación que incorporen IA serán considerados sistemas de alto riesgo y requerirán una evaluación de riesgos muy detallada desde el diseño a toda la vida del producto, conformidad de ese sistema de AI con la normativa de productos de máquinas y ascensores, así como supervisión continua, ya que estos sistemas evolucionan”, todo lo cual supone una inversión global orientativa de entre 15.000 y 22.000 euros.

Por último, se trató el enfoque europeo normativo sobre los datos, teniendo en cuenta que “son un intangible, pero puede haber datos personales, que son sensibles en el marco de la protección de datos”.

A continuación fue el turno de Marcello Zacarelli, International Account Manager de Liftinstituut, cuya participación en los comités de normalización “aporta experiencia y conocimiento como organismo independiente frente a los fabricantes de ascensores que también tienen intereses comerciales”, como explicó el experto, quien hizo hincapié en el hecho de que “la actual directiva de máquinas, que lleva más de 15 años sin revisarse, pasará a ser un Reglamento de máquinas, de modo que se eliminarán las diferencias de interpretación en las transposiciones nacionales y el tiempo requerido para su entrada en vigor”.

Por último, José María López Yañez, secretario general de Asocan (Asociación de Organismos de Control de Andalucía), organización miembro de Fedaoc, reclamó la necesidad de coordinar los aspectos de seguridad industrial y seguridad laboral.

Los expertos de la tercera mesa de debate, centrada en la transición energética de las industrias, abordaron las cuestiones que pueden responder al objetivo de que los precios sean acordes a las necesidades de la industria. Mejorar la capacidad de generación, fomentar el autoconsumo y el autoabastecimiento para no tener que ir al mercado a comprar energía e implantar sistemas de almacenamiento que, aunque aún son un poco costosos, pueden optimizar la generación de energía, fueron algunas de las propuestas que lanzó Manuel Larrasa, secretario general de energía de la Junta de Andalucía, quien no dejó de apuntar que la energía eléctrica y el hidrógeno se perfilan como el futuro en este ámbito. A continuación, Antonio Gómez Expósito, catedrático de ingeniería eléctrica de la Junta de Sevilla, ofreció alternativas para las empresas para poder abaratar sus costes energéticos, haciendo especial hincapié en cómo pueden producir las industrias su propia energía: no solo mediante sistemas fotovoltaicos sino también de energía eólica. Advirtiendo de que, el primer paso, es analizar cuáles son las necesidades. Las tendencias en almacenamiento de energía, incluidos los costes y la escasez de materiales, centraron buena parte de su intervención, que concluyó con la idea de que el “almacenamiento electroquímico jugará un papel en el futuro, pese a que en España vamos atrasados en ese sentido”, así como lo que el catedrático definió como el “megavatio, con ‘n’, que es el que no se consume o, lo que es lo mismo, la eficiencia energética”.

La tercera mesa de debate abordó las soluciones para la transición energética de las industrias.

Precisamente la experiencia con el tema del autoconsumo y la eficiencia energético fue el tema que compartió con los asistentes Florencio Chacartegui, CEO de Hidral. “A principios de 2020 se hizo una instalación de autogeneración en nuestras instalaciones de 25.000 m2, con la que se ahorra un 30% del consumo energético, con una amortización de la inversión en 5 años, frente a los 7 previstos”. Chacartegui explicó otras medidas de eficiencia energética adoptadas por la compañía y el objetivo de convertirse en generadores de energía, todo ello encaminado a abaratar los costes energéticos. Por su parte, Pilar Molina, CEO de Epic Power, aseguró que “la forma de abaratar energía es producirla lo más cerca posible de donde se va a consumir y usar tecnologías que nos permitan salvar las limitaciones de la fotovoltaica”, apuntando que se esperan “grandes evoluciones tecnológicas en almacenamiento de energía para pymes”. Preguntada por si el ahorro energético es una demanda en el ámbito de los ascensores, la experta contestó que “pese a que históricamente no se ha atendido mucho a cuál es la eficiencia energética de los ascensores, ahora, el cliente final empieza a demandar medidas de ahorro”. Y añadió que “el ascensor consume poco en promedio, pero tiene unos picos de potencia que pueden ser un 20-30% más del promedio, lo que obliga a instalaciones trifásicas muy importantes, por lo que las soluciones en la línea de integrar energía solar con almacenamiento de energía pueden ofrecer un consumo real cero, con una inversión y un retorno de la inversión muy razonables”.

La jornada finalizó con un ejercicio de retro anticipación sobre la aplicación de los fondos Next Gen.

La Jornada se cerró con un análisis de cómo ha transcurrido la colaboración público-privada, concretamente centrándose en la aplicación de los fondos europeos Next Generation.

Los distintos expertos que participaron en esta mesa coincidieron en que, pese a que se ha avanzado mucho en la identificación de las cuestiones a desarrollar, el tejido empresarial ha puesto de manifiesto que las ayudas de estado necesitan revisarse y hacerse más fáciles y más atractivas.

La representante del Joint Research Center de la Comisión Europea con sede en Sevilla, Carmen Sillero Illanes, comentó la importancia del volumen de ayudas procedente de la Unión Europea, que no solo se limita a los Fondos NextGen anunciados en 2020, sino que se han ampliado con el plan REPowerEU destinado a acelerar la transición energética hacia energías limpias y reforzar la independencia energética de Europa.

En relación a la implementación de las ayudas relacionadas con los Fondos Europeos, Carmen Sillero mencionó las recientes declaraciones de la presidenta Ursula Von Der Leyen sobre la necesidad de simplificar y acelerar los procesos administrativos.

“El reto de transformar la industria y la economía es muy complejo y requiere una movilización muy grande de cualificación, tanto en las empresas como en la administración pública. Una mejor vertebración tanto de la administración como de las demandas de las empresas y la colaboración entre agencias, universidades y empresas es fundamental”, apuntaba Eugenio Barroso, CEO de MP Ascensores en este sentido, para añadir que, a efectos prácticos de las pymes, “está costando mucho que lleguen esos fondos”.

“El plan de recuperación, transformación y resiliencia se vendió como la mayor inversión de fondos europeos en el menor periodo de tiempo posible. Pero no se aportó información sobre las actividades a las que se destinarían. Se realizaron las manifestaciones de interés pero no se deslocalizaron los fondos a las CCAA, sino que lo hizo el gobierno central; se empezaron a plantear inversiones que no se han podido encajar en las convocatorias de fondos que se ofrecían que no encajaban muy bien con las ideas que tenían las empresas…”, añadía FabiánVaras, director técnico de la Corporación Tecnológica de Andalucía, para concluir que “ha habido una incorrecta gestión de las expectativas, tanto desde las empresas como desde las administraciones”.

Cerró esta tanda de intervenciones Rafael del Olmo, administrador de fincas colegiado y CEO de Rog Administraciones, quien afirmó que “está siendo un proceso muy difícil para los administradores de fincas, que están enfrentando gravísimas dificultades a la hora de gestionar estas ayudas destinadas a la eficiencia energética, dado que se subvenciona el 50-60% de las obras de mejora, pero el resto tiene que financiarse por parte de la comunidad de propietarios, con cifras que son sustanciosas”.

“La tramitación burocrática también es ardua y, de hecho, ya hay comunidades de mantenedores que están asociándose para gestionar este tipo de fondos y quitar la carga de los administradores de fincas”, concluyó el experto.