Energía renovable y agua: la sostenibilidad a debate en la jornada técnica organizada por AEDyR
El pasado mes de diciembre, la Asociación Española de Desalación y Reutilización (AEDyR) celebró una jornada técnica bajo el título ‘Sostenibilidad: Energía Renovable y Agua’ en el Colegio de Caminos, Canales y Puertos de Madrid que contó con la asistencia de más de 120 profesionales del sector. El objetivo principal de esta jornada fue promover masivamente el uso de energías renovables en el sector del tratamiento de agua y más concretamente en la industria de la desalación y reutilización. Durante el encuentro, diferentes expertos del sector del tratamiento del agua y de las energías renovables analizaron de qué manera se puede hibridar ambos sectores con objeto de hacer más sostenible el tratamiento de aguas fomentando el uso de energías renovables.
El acto inaugural corrió a cargo del presidente de AEDyR, Domingo Zarzo, y de la vicepresidenta de la asociación, Mª Carmen García, quienes dieron la bienvenida a los asistentes y agradecieron la participación de los expertos, media partners, patrocinadores y demás entidades colaboradoras.
La vicepresidenta de AEDyR, Mª Carmen García, y el presidente de la asociación, Domingo Zarzo, durante la inauguración del evento.
La jornada se dividió en dos grandes bloques temáticos: el primero trató sobre ‘Energías renovables’ y el segundo sobre ‘Sostenibilidad’. Tras finalizar ambas partes, tuvo lugar una mesa redonda, moderada por Domingo Zarzo, sobre ‘Políticas y Ejes Estratégicos en el Ámbito de la Energía Renovable y el Agua’.
Bloque I: Energías Renovables
Daniel Prats, miembro del Consejo de Dirección de AEDyR, fue el encargado de moderar este primer bloque de la jornada que versó sobre ‘Energías Renovables’. “Uno de los principales problemas tecnológicos es el acceso a la energía para el desarrollo de actividades relacionadas con el agua. El problema es que muchas de las energías vienen de fuentes fósiles, las cuales se acaban y eso está reñido con los costes energéticos. El objetivo es minorizar el uso de la energía y para ello la utilización de renovables es imprescindible y hay que afrontarlas desde ese punto”, señaló Prats.
Tras la presentación del bloque se celebró la primera ponencia del evento de la mano de Víctor Monsalvo (Aqualia), quien habló de las iniciativas de Aqualia para la utilización de energías renovables y presentó el Proyecto MIDES. Según apuntó Monsalvo, las líneas de actuación de Aqualia para reducir la huella de carbono y luchar contra el cambio climático son la generación de energía en la gestión del ciclo del agua; la reducción del consumo de electricidad en las depuradoras; la transformación de su flota de vehículos y el uso de las energías renovables.
“Desde 2020 Aqualia cuenta con un contrato de compraventa de electricidad a largo plazo (PPA; Power Purchase Agreement). El primer acuerdo del sector del agua urbana en España fue la reducción de emisiones de 15.200 t CO2/año aproximadamente. El actual plan de instalación de placas solares en instalaciones gestionadas por Aqualia se traducirá en una reducción de emisiones de Gases de Efecto Invernadero de 1.000 t CO2/año. La fase actual, con una inversión de 2 millones de euros, es el despliegue de planes solares en 27 instalaciones de ciclo hidráulico repartidas en EDAR, ETAP y EBAP. Aqualia puede alcanzar un autoconsumo de hasta el 12% del consumo energético” apuntó el experto de Aqualia. Asimismo, indicó que, además de la fotovoltaica, están desarrollando otras acciones como la utilización de pieles de combustible y la microgeneración hidráulica es otra de las formas de utilización de energía renovable. Monsalvo afirmó que en la compañía se han propuesto la autoeficiencia energética para 2027.
A continuación, Víctor Monsalvo presentó el Proyecto MIDES, el cual “tiene como objetivo desarrollar el mayor demostrador nunca construido de la tecnología Microbial Desalination Cell (MDC), Celdas de Desalación Microbiana en castellano, una tecnología innovadora de bajo consumo energético para la producción de agua potable y agua residual tratada, utilizando tecnología MDC como pretratamiento para los sistemas de ósmosis inversa y con el que se puede obtener agua potable con un consumo energético del 0,5 kw/h por m3, es decir, un 75% menos de consumo energético que a través del proceso tradicional”.
Por su parte, Marcos Blanco, de GS Inima, habló de la incorporación de energías renovables en el ámbito del tratamiento del agua y defendió el gran futuro que tiene la incorporación de la energía solar fotovoltaica. “El ciclo del agua se está volviendo cada vez más inestable. Las fuentes del ciclo combinado son las que entran a cubrir las partes que no cubren las energías renovables”, comentó para hablar a continuación del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) 2021-2030, cuyos objetivos españoles a 2030 del PNIEC (resolución del 30 de diciembre del 2020 del MITECO) son conseguir el 23% de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero respecto a 1990; un 74% de generación eléctrica de origen renovable sobre la demanda total de energía y un 39,5% de mejora de la eficiencia energética.
Blanco, habló de la evolución histórica de la potencia fotovoltaica inestable en España y señaló que el uso de la energía solar fotovoltaica se va a triplicar en los próximos años. “Una de las razones de su gran uso es el número de horas solares en España y otra es la madurez del sector fotovoltaico. En 10 años se ha dividido por tres el coste de una instalación fotovoltaica, con lo que la oportunidad es el autoconsumo fotovoltaico para industrias electro-intensivas, ya que permitirá unos ahorros de consumo energético de entre el 20-30% en las plantas depuradoras y del orden del 4-5% en las plantas desaladoras”.
A continuación, Andrea Novás, de Rotary Wave, presentó el proyecto de esta startup con sede en Valencia que desarrolla una tecnología de desalación por ósmosis inversa con energía eólica hidráulica sin uso de electricidad que permite desalar agua con un coste de 0,60 €/m3. Mediante un esquema, realizó una explicación de la desalación con energía eólica hidráulica sin electricidad, habló de la captura de la energía del viento, del funcionamiento de la motobomba intercambiadora de presiones, de las mejoras medioambientales, los consumos energéticos de la desalación, del cálculo de del coste del m3 de agua desalada, de la adaptación del proyecto a otros usos y de su posible uso en la economía circular.
‘Nuestro granito de luz, en el agua’ fue el título de la siguiente ponencia desarrollada por David Sancho y Nicolás Urgoiti, de Emasa, quienes destacaron que su primer compromiso con la sostenibilidad es consumir energía renovable procedente de fuentes registradas. Durante su intervención, los expertos presentaron los últimos avances que está desarrollando Emasa para reducir el consumo energético y los costes asociados al mismo en sus plantas de tratamiento de agua.
Para ello, hablaron de la energía solar térmica y fotovoltaica (agua de servicio en vestuarios y dosificación de reactivos), de la iluminación, de la eliminación de aljibes y elevación nocturna, de las turbinas de recuperación para autoconsumo, del consumo de CO2, de los biofilms, pérdidas de carga y energía perdida y de la evolución de las membranas. Como ejemplo resaltaron la producción de biogás en la EDAR de Guadalhorce que supone más del 70% del consumo energético total de la planta y, en este sentido, han reivindicado el concepto de biofactoría de las plantas depuradoras.
Para finalizar el primer bloque de ponencias, Michelle Ceccaroni, de Fluence Italia, impartió la ponencia ‘El reúso de aguas residuales en la industria: producción de biogás como energía verde y sustentable’. Para ello habló de la conexión entre ‘reúso’ y ‘digestión anaeróbica’, asegurando que ésta última aprovecha energéticamente las pérdidas del proceso que llevan carga orgánica y se vuelve a utilizar la producción de energía renovable en forma de energía eléctrica o térmica, consiguiendo reducir los costes de operación de las plantas depuradoras industriales en un 70-80%.
Asimismo, explicó que, en el marco de la industria agroalimentaria, el reúso aplicado al tratamiento de los subproductos consigue que el 80-90% de las pérdidas se aprovechen para generar energía verde. En definitiva, la producción de biogás añade un valor agregado a la industria, en particular a la agroalimentaria. A continuación, habló de las características y de los tipos de reactores anaeróbicos, así como de los beneficios de la digestión anaeróbica en la industria.
En palabras de Michelle Ceccaroni, “la digestión anaeróbica es una fuente de energía renovable con un enorme potencial ya que garantiza una producción de energía continua y descentralizada y produce un biofertilizante utilizable en agricultura. Las pérdidas de carga orgánica se aprovechan para producir energía y tratar un efluente y/o residuo. Un reactor de biogás tiene una larga vida útil. Tiene que haber un cambio de paradigma: la planta de tratamiento no es un coste sino una ganancia”.
Bloque II: Sostenibilidad
Tras la pausa café, tuvo lugar el segundo bloque de ponencias que trató el tema de la ‘Sostenibilidad’ y fue moderado por Antonio Ordoñez, miembro del Consejo de Dirección de AEDyR.
La primera de las ponencias de este segundo bloque fue impartida por Javier de la Morena, de WEG Iberia, que presentó la visión estratégica de WEG para soluciones globales eficientes y sostenibles con una línea completa de máquinas eléctricas. “Las megatendencias están creando cambios en los patrones de demanda. Un mundo más electrificado y un consumo de energía más eficiente debería requerir mayores inversiones en energías renovables y digitalización”, señaló de la Morena para hablar seguidamente de la completa gama de productos eléctricos y sistemas con una solución agrupada e integrada.
También subrayó que en WEG seguirán desarrollando su misión de crecimiento continuo con el foco puesto en los siguientes objetivos:
- Contribuir a la construcción de un mundo más eficiente y sostenible invirtiendo en eficiencia energética, energías renovables, almacenamiento de energía y movilidad eléctrica.
- Ser referencia mundial en motores, reductores, generadores, transformadores y accionamientos eléctricos.
- Fortalecer el negocio de automatización industrial, incluyendo soluciones para la digitalización de la industria y sistemas de energía, así como productos para la electrificación en construcción civil e infraestructuras.
- Desarrollar sus propios negocios globalmente a través de prácticas consistentes de ESG.
“En definitiva, WEG se encuentra entre las mejores empresas de energía limpia del mundo con lo que son una opción perfecta para su cadena de suministro”, concluyó Javier de la Morena.
‘Soluciones innovadoras para mejorar la sostenibilidad de los procesos de desalación’ fue el título de la siguiente ponencia presentada de la mano de Rafael Buendía y Elena Campos, de Sacyr Agua, quienes pusieron en contexto la situación actual de disponibilidad de agua dulce en el mundo (la cual es muy escasa), hablaron de la influencia y de los daños colaterales del cambio climático y aludieron a la desalación sostenible como parte de la solución.
A continuación, enumeraron varios proyectos de innovación para mejorar la sostenibilidad de los procesos de desalación como el LIFE-Transfomem -para el reciclaje de membranas de OI desechadas-, el proyecto LIFE Deseacrop -tratamiento para reutilización de drenaje agrícola de cultivo hidropónico-, el proyecto Interconecta TAAM -desalación con energías renovables-, o el proyecto LIFE HyReward con el que, mediante la combinación del proceso de ósmosis inversa y la electrodiálisis inversa, producirán energía eléctrica renovable con la salmuera, consiguiendo recuperar hasta un 20% de la energía utilizada en el proceso de desalación a la vez que se consigue reducir la salinidad de la salmuera antes de su vertido al mar.
Antonio Castañas, de Dupont, defendió en su ponencia la evolución de los procesos de desalación de agua hacia la tecnología de ósmosis inversa en circuito cerrado, la cual ofrece un factor de conversión del 98% con un ahorro energético de un 30% respecto a la ósmosis inversa tradicional. Además de la reducción en el volumen de salmuera que se consigue, este sistema reduce también el ensuciamiento y la incrustación en las membranas, lo que repercute en una mayor eficiencia del proceso y menores costes en reactivos y limpieza.
Sobre desalación y energía renovable habló Rafael Ramos, director de desarrollo de negocio de Danfoss, una compañía de origen danés dedicada a la fabricación de diferentes productos de alto valor añadido y al conocimiento de sus aplicaciones. El experto hizo hincapié en la filosofía de su empresa, la cual, mediante sus diferentes equipos, consigue adaptar y utilizar los tipos de energía -tanto renovable como convencional-, con los que cuenta una planta desaladora para mejorar la eficiencia energética en base a sus características particulares. Ramos enumeró y analizó los siguientes tipos para definir una planta desaladora eficiente:
- Reducción de consumo energético
- Adaptable a las condiciones cambiantes de demanda
- Consumo de energía y selección de fuente de energía renovable
- Ininterrupción de la alimentación eléctrica
- Resistente a condiciones extremas ambientales
- Flexible, fácil de reparar y mantener
- Mínimo coste de adquisición (CAPEX)
- Mínimo coste de operación y mantenimiento (OPEX)
La última de las ponencias fue impartida por Álvaro Lagartos, de LG Chem, quien analizó los aportes a la sostenibilidad de la desalación desde la perspectiva de un fabricante de membranas. Lagartos defendió el importante potencial de ahorro energético que tiene la correcta elección de las membranas de ósmosis inversa, teniendo en cuenta los elementos de permeabilidad, rechazo y pérdida de carga, y cómo la combinación óptima de estos tres elementos en los equipos logra unos resultados óptimos.
A continuación, se celebró una mesa redonda, moderada por el presidente de AEDyR, Domingo Zarzo, en la que participaron Tomás Ángel Sancho, subdirector de la Subdirección General de Dominio Público Hidráulico de Infraestructuras del MITECO; José Mª Blanco, director de Infraestructuras, Sanidad y TIC del ICEX, España Exportación e Inversiones; Lydia González, Horizonte Europa, Representante ES Clúster 5, Clima y NCP Clúster 6. Bioeconomía y Medio Ambiente. Dirección de Programas de la UE y Cooperación Territorial del CDTI E.P.E.; y Gregorio Arias, subdirector de Gestión Ambiental del Canal de Isabel II, en la que abordaron las políticas y ejes estratégicos en el ámbito de la energía renovable y el agua.