Rescatan antiguas variedades de vid de la Comunidad Valenciana al borde de la desaparición
Un equipo de investigadores de la Universitat Politècnica de València (UPV) ha localizado e identificado con marcadores moleculares más de 80 variedades, la mayoría presentes antes de la llegada de la filoxera, la plaga que estuvo a punto de extinguir las variedades europeas entre finales del siglo XIX y principios del XX. Diez de ellas han sido añadidas recientemente al catálogo internacional VIVC tras la publicación de sus trabajos.
El equipo de la Universitat Politècnica de València (UPV) está realizando, en el marco de diferentes proyectos dirigidos por la catedrática de la UPV Carmina Gisbert, una destacada labor de recuperación del patrimonio vitivinícola de la Comunidad Valenciana.
No en vano, fruto de su labor se han localizado e identificado con marcadores moleculares más de 80 variedades, gran parte de las cuales estaban presentes en nuestro territorio antes de la llegada de la filoxera, la plaga procedente de América que estuvo a punto de extinguir por completo las variedades europeas entre finales del siglo XIX y principios del XX.
10 variedades añadidas al catálogo internacional VIVC
“La caracterización a diferentes niveles de estas variedades contribuirá a su recuperación”, afirma Gisbert, que indica que, de las variedades analizadas, “10 no están en el registro nacional y no se encontraban en el catálogo internacional –The Vitis International Variety Catalogue (VIVC)– hasta la publicación de los trabajos de investigación de nuestro grupo en Vitis (Jiménez et al. 2019, y García et al.2020)”.
Además, la catedrática de la UPV añade: “Hemos aportado a esta base de datos internacional información de 32 clorotipos y se han encontrado nuevas sinonimias y relaciones de parentesco desconocidas hasta la fecha”.
Arcos, Cor d’Angel, Montalbana, Morsí, Raïm del Clotet…
Gracias a esta labor realizada “en viñas viejas de campos de cultivo o abandonados”, se han localizado e identificado a nivel molecular variedades como “Arcos, Cor d’Angel, Esclafagerres, Montalbana, Morsí, Raïm del Clotet o Trepadell, entre otras”. Actualmente se está llevando a cabo la caracterización ampelográfica y agronómica de estas variedades.
“Asimismo”, señala Gisbert, “se han localizado otras variedades antiguas poco comunes como la Ferrandella o el Mondragón, además de un número considerable de variedades de otros orígenes que evidencian el intercambio entre regiones y países, contribuyendo a dar a conocer la historia de las zonas prospectadas”.
Investigadores de la UPV, la Generalitat Valenciana y Botánica Mediterráneo
Bajo la dirección de Carmina Gisbert, han trabajado Rosa Mª Peiró y Daniel Torrent, del Instituto Universitario de Conservación y Mejora de la Agrodiversidad Valenciana (COMAV-UPV) -; Alberto Yuste, técnico del Departamento de Tecnología de los Alimentos UPV; Carles Jiménez, Julio García y Camilo Chirivella (Generalitat Valenciana); Jaume Soler (Botánica Mediterráneo); junto a numerosos colaboradores puntuales.
Además del interno realizado por el propio grupo de la UPV, los proyectos que, de manera conjunta, han sido claves en esta investigación, son los siguientes: CGL2015-708432-R (MINECO, FEDER), AGCOOP_D/2018/007 (FAEDER, GVA, MAPA) y 2020/VALORIZA/VSC/015 (GVA, FEADER).