El plan industrial de Tvitec se impone en la puja por la compra de Cricursa
El Juzgado de lo Mercantil nº 6 de Barcelona ha adjudicado finalmente la fabricante de vidrio curvo Cricursa a la principal transformadora de vidrio arquitectónico de España, Tvitec, que mantendrá en torno a los 130 empleos en sus unidades productivas. La transformadora leonesa, que posee sus principales plantas en el Bierzo, se impuso en la puja a la firma Brand Corner por la compañía catalana. Aunque esta última ofrecía una cantidad ligeramente más elevada, la autoridad judicial ha ponderado otros factores de solvencia muy relevantes, acreditados por Tvitec.
Cricursa, líder mundial en la fabricación de vidrio curvado, presentó concurso de acreedores a finales del año pasado después de entrar en una situación financiera muy delicada, que afectaba a sus más de 300 operarios. Más allá de que para Tvitec la incorporación de Cricursa suponga la creación de un verdadero gigante mundial en el procesamiento de vidrio tanto plano como curvo para la edificación sostenible, “la decisión judicial supone una notable responsabilidad social que los principales ejecutivos de la empresa berciana enfocan con ilusión y optimismo”, se afirma desde Tvitec.
Tvitec apuesta firmemente por relanzar el negocio de Cricursa de una manera sostenible, con una plantilla dimensionada y asumiendo los compromisos económicos y sociales que a medio plazo dibujen un horizonte de crecimiento paulatino de la fabricante catalana en todos los ámbitos. Esto, y su profundo conocimiento del sector, es algo que ha jugado un papel capital en la determinación razonada del magistrado que ha tutelado el concurso.
Así lo ratifica el magistrado en el propio auto: “El proyecto de Soluciones Integrales de Curvado S.L. (Tvitec) ofrece más garantías en términos de continuidad empresarial y laboral, de una mayor y más rápida satisfacción de los intereses de los trabajadores y, en consecuencia, en la medida en que las expectativas de mantenimiento de la actividad son razonables, en términos de una futura satisfacción de los créditos que en este momento procesal resulten impagados”.
Además, durante el proceso de adjudicación, y después de una consulta realizada a los trabajadores, el 86% de la plantilla de Cricursa mostró su adhesión al plan industrial y social avalado por Tvitec. Incluso a través de un escrito de apoyo presentado ante la propia sala de lo Mercantil en el que se recogía textualmente la confianza de la parte social en ‘las garantías’ de que la oferta contase con “el apoyo técnico, comercial y financiero de Tvitec System Glass”.
La oferta de Tvitec suma una inversión cercana a los 15 millones de euros. La compañía exporta sus soluciones acristaladas de alto rendimiento a más de 50 países, con un gran peso en Estados Unidos y Canadá. El año pasado su facturación superó los 150 millones de euros. En marcha tiene un plan de expansión para incrementar su producción y lanzar innovadores productos por más de 60 millones en el polígono industrial del Bayo (Cubillos del Sil-León), algo que aún pone más el acento en el porvenir de sus actividades. La operación de compra de Cricursa por parte de Tvitec ha sido asesorada por el Despacho Irago, de Ponferrada, y Álvarez-Canal, de León.