El mejor robot alemán
La tarea de Scrat consiste en detectar y coleccionar elementos cilíndricos en un campo de 3 x 2 metros y colocarlos en los campos correctos del tablero. Dos robots de equipos distintos compiten al mismo tiempo e intentan, dentro de la ventana de tiempo de 90 segundos, conseguir tantas fichas como ser posible y evitar que el oponente se les quite.
Este escenario conlleva muchos requisitos. Es de vital importancia la capacidad del robot para conseguir información exacta sobre la posición del oponente y de las fichas; y esto lo más rápido y fiable posible.
Medir las distancias
Para conseguir esta información se han utilizado sensores de distancia de la serie ODSL 8 de Leuze electronic. Gracias a las excelentes experiencias con esta serie resultó fácil la decisión de apostar otra vez por ella: la medición de distancias muy exacta, su gran alcance y su gran fiabilidad en combinación con la disponibilidad inmediata de los datos medidos permiten una visión global de la situación actual del escenario.
A través de un software los datos de medición de dos sensores de distancia han sido fusionados para poder calcular la posición exacta de los elementos cilíndricos detectados. Los valores determinados han sido más exactos que el mecanismo de accionamiento del robot, por lo que ha sido posible conseguir coleccionar el máximo número de elementos cilíndricos con éxito.
Para proteger los actuadores de posibles daños y para conseguir más información sobre el entorno, se ha incorporado una serie de sensores autorreflexivos con supresión de fondo de la serie 2. El equipo también ya había trabajado con éxito con estos sensores, valorados por su diseño muy compacto en combinación con la alta capacidad de detección. La supresión de fondo permitió la detección de superficies muy oscuras o brillantes (esto permite el uso de estos sensores en todas las aplicaciones donde los elementos móviles interactúan con su entorno y el robot tiene que actuar hacia situaciones no previstas). Cualquier daño de los componentes mecánicos ha podido ser evitado de manera fiable gracias a los sensores autorreflexivos.