Claves para conseguir una transformación digital real

Contar con una estrategia de transformación digital fue un elemento clave y diferenciador en los resultados de las compañías durante su gestión en la pandemia. Esta crisis supuso un acelerador para estos planes: la digitalización de las operaciones, el servicio al cliente y el desarrollo de productos para satisfacer las cambiantes demandas del mercado se convirtió y se mantiene hoy como prioridad. Tras los grandes desafíos empresariales vividos el miedo al fracaso también aflora y la gran pregunta para todos es: Transformación, sí, pero ¿cómo conseguir que sea verdaderamente real y exitosa sin quedarse atrás?

Hoy en día, más del 80% de las empresas planean acelerar la transformación digital de sus negocios. Tener en cuenta factores clave como una estrategia unificadora o una gestión del dato optimizada puede ayudar a garantizar que dicha transformación sea efectiva y responda a lo que realmente necesita el negocio para crecer y ser competitivo en su mercado. Estos son 5 factores a tener en cuenta:

1. Construir una estrategia unificadora: La transformación digital es algo más que añadir nuevas tecnologías. Estas implementaciones deben estar alineadas con la estrategia de la organización y con sus objetivos de negocio. ¿Cuál es el propósito de añadir determinadas tecnologías? ¿Qué se quiere conseguir con ello?, ¿Qué es lo más prioritario para la empresa? Las compañías que priorizan estas cuestiones en su estrategia, según McKinsey, son tres veces más propensas a lograr el éxito en sus planes de transformación digital.
2. Alineación dentro de la organización: Aunque la empresa tenga un plan claro y todas las herramientas adecuadas, esto no significará nada si la organización no está bien alineada para avanzar de forma coordinada hacia la consecución de los mismos objetivos. Esta debe comenzar desde la cúspide y extenderse hacia abajo, lo que permitirá que todos los niveles perciban el valor de esta transformación y garantizará que la evolución del modelo se produzca con unas bases sólidas.
3. Tecnología conectada: Es lógico que las compañías tengan tecnologías legacy y que vayan añadiendo nuevos sistemas y aplicaciones a su ecosistema IT, pero la clave aquí es invertir en una base robusta, una plataforma de experiencia digital (DXP) que apoye la integración y unificación de este ecosistema. Esto permitirá disponer de una experiencia unificada, continua y optimizada.
4. Una buena gestión de los datos: La gestión de grandes volúmenes de datos conllevan una gran responsabilidad. Es esencial aprovecharlos eficazmente para que sean impulsores de las iniciativas de transformación digital y no un obstáculo. Evitar tecnologías dispares que creen silos y, si se da el caso, detectar y solucionar este punto, será algo primordial que permitirá tener visibilidad real de la información, poder analizarlos en profundidad y extraer conocimiento valioso y coherente de todos y cada uno de los procesos.
5. Tecnologías escalables: Además, es clave prever que pueden surgir necesidades cambiantes que exijan escalar y crecer junto con la organización. Esto es: generar una estrategia tecnológica sostenible a largo plazo. Porque para el éxito de estos procesos se requiere una mentalidad abierta, que vaya más allá de inversiones en productos o funciones específicas y se centre en soluciones holísticas.

En conclusión, con una estrategia sólida que apueste por una evolución digital integral, que permita contar con herramientas conectadas y un equipo unificado, es posible que una organización logre una transformación exitosa que la permita operar y prestar servicio a los clientes con mayor eficacia, manteniéndose competitivos en la nueva era que se nos presenta.