La industria de alimentación ante el reto del trabajo híbrido, seguro e higiénico con Snom
Efectivamente, en la industria de la alimentación, únicamente un 40% de las empresas ha tenido que recurrir al teletrabajo[1] durante la crisis sanitaria, frente al 56% de la media nacional, por ser algo inviable a largo plazo. En este sentido, la fórmula del trabajo híbrido, que contempla la presencialidad y el trabajo remoto de la plantilla, ha empezado a despegar como el modelo más viable para este sector, que ha tenido que definir y delimitar aquellas tareas que pueden realizarse a distancia y las presenciales.
Comunicaciones simples, seguras y de calidad
Y así está ocurriendo, el sector de la alimentación es uno de los que más ha tenido que amoldarse a las nuevas condiciones laborales, económicas, sociales y de higiene por su propia naturaleza, para garantizar el suministro de alimentos. Su digitalización ha sido apresurada y en buena medida se ha dejado notar en el área de telecomunicaciones, dada la necesidad de mantener una conectividad sin fisuras y una comunicación 24/7.
Y es que la poca o nula interacción personal y aislamiento, el teléfono ha sido clave, multiplicándose las llamadas de voz. Así, junto con terminales clásicos analógicos, las compañías han apostado por integrar soluciones, como los teléfonos y bases multicelda DECT sobre IP de Snom, que han demostrado su idoneidad por su calidad de sonido y sin interferencias, su seguridad en cuanto a privacidad, así como flexible y productivo, especialmente en edificios con estructuras arquitectónicas complejas. Así, con IP DECT, numerosas empresas han podido interconectarse fácilmente de forma móvil, registrar automáticamente el estado de producción y de entrega o envío de mercancías
Otra ventaja que presentan los terminales IP DECT, sobre todo de cara a solventar fallos y funcionamientos incorrectos que alteren la producción, es que permiten, con tan solo pulsar un botón, organizar una llamada grupal automáticamente con técnicos y trabajadores, sean internos o externos. Esto es especialmente útil en aquellas empresas en las que un número significativo de empleados se encuentra fuera de las instalaciones o no tiene un lugar de trabajo fijo, lo que garantiza poder contactar en cualquier momento y con gran seguridad. Así mismo, con una capacidad de hasta 12 horas de conversación y casi 200 horas en espera, se conforma como la solución ideal para el trabajo diario en centros de alimentación, al soportar fácilmente cada turno sin interrupción.
La higiene, clave en los procesos de producción
Efectivamente, la higiene extrema, incluso en entornos poco habituales (refrigeración, procesamiento, etc.), se convierten en algo fundamental. El modelo M90 de Snom, en combinación con la solución multicelda Snom M900, posee características especiales para estos entornos. Su superficie antibacteriana, facilidad de desinfección, resistencia al polvo y humedad, les convierte en el perfecto aliado para cumplir con las normativas sanitarias requeridas.
En definitiva, la telefonía de VoIP de Snom cumple con las más altas exigencias, de seguridad, flexibilidad y accesibilidad con una gran fiabilidad para un sector como la de la alimentación, dado su sistema tan complejo de producción, acompañándoles en su proceso de transformación digital de sus comunicaciones.
[1] Análisis sectorial: Impacto del COVID-19 y horizonte de recuperación. Randstad Research.