TP-Link Omada: la solución de conectividad perfecta para hostelería
Para comprobar de primera mano cómo de fácil es el proceso de desplegar una red profesional para dar cobertura tanto a los equipos y sistemas de los que depende un negocio como pueda ser un hotel “con encanto”, casas rurales o albergues, bungalows o similares, TP-Link nos ha cedido en pruebas un kit con un controlador, un switch PoE y tres puntos de acceso de diferentes tecnologías.
La conectividad se ha convertido en un componente esencial de cualquier negocio. Si antes de la pandemia ya era importante, la adopción de modalidades telepresenciales en áreas como la educación o el trabajo, así como la proliferación del uso de plataformas cloud como sustitutas de gestiones que antes se hacían de forma presencial, han hecho que la conectividad sea, en algunos casos, la diferencia entre ser capaces, o no serlo, de realizar una tarea dada, como una transferencia bancaria o la reserva de un viaje o una estancia en un hotel.
Los negocios están cerrando o limitando el uso de las sucursales físicas a favor de las gestiones online, y eso hace que, sin una conexión Wi-Fi de calidad, el acceso a productos o servicios pueda verse perjudicado o directamente imposibilitado. Por otro lado, las conexiones 5G y LTE, a pesar de que ganan en calidad, no siempre pueden usarse con total libertad debido a la cantidad limitada de datos que pueden transferirse en modalidades que no sean de tipo Tarifa Plana.
La conectividad como servicio esencial para nuestro negocio
Desde esta perspectiva, ser capaces de ofrecer a nuestros clientes una conectividad inalámbrica de calidad, robusta, veloz, segura y asequible, puede ser la diferencia, no tanto entre conseguir nuevos clientes o fidelizar a los que ya se tengan, sino la de perder un cliente o no perderlo. Esta es una necesidad transversal todo sea dicho, que afecta por igual a sectores como el de las academias de formación, las clínicas y consultas médicas, a la hostelería en general (bares, restaurantes, clubes, hoteles), la educación (colegios y universidades), coworkings o incluso a la gestión de eventos en los que haya que desplegar una red para clientes o el propio evento.
Hablamos de que las redes inalámbricas tienen que satisfacer por igual las necesidades de los clientes como las del propio negocio en aspectos como la gestión de los TPVs, cámaras y sistemas de seguridad, trabajo de los departamentos financieros o el correcto desempeño de los servicios y productos que se ofrecen.
Qué debe ofrecer un servicio de conectividad inalámbrica profesional
En la actualidad, muchos negocios de tamaños pequeños y medianos ofrecen conectividad a sus clientes de un modo muy similar a como se tiene desplegada la conexión de Internet en el hogar: un router, una conexión de fibra óptica, una o dos redes inalámbricas correspondientes con suerte a las bandas de frecuencia de 2,4 GHz y 5 GHz y, con suerte algún repetidor para llevar la cobertura a otras estancias.
Sin embargo, esta solución está lejos de ser ideal. Se adopta en muchos casos porque es “lo que se sabe hacer”. Y se piensa que desplegar una red Wi-Fi profesional es costoso, complicado y que precisa de personal especializado. De hecho, en no pocas ocasiones algunas empresas de telecomunicaciones pueden ofrecer proactivamente a los clientes soluciones de conectividad profesionales en modalidad de outsourcing de equipos y mantenimiento, que, aún solventado esa carencia, lo hacen a un coste elevado generalmente y ofreciendo servicios que en la práctica no se usarán.
Por ejemplo, un proveedor “X” de telecomunicaciones puede proponer a una academia “Y” un servicio con backup LTE para la red de fibra de 600 Mbps simétricos con la que cuenta la academia en cuestión. Este servicio, en última instancia es útil para portales de eCommerce, por ejemplo, donde perder ventas es perder dinero y donde una conexión LTE es óptima para sostener transacciones. Pero no es óptima para mantener 8 clases online al mismo tiempo.
Una red profesional tiene que ofrecer gestionabilidad total o casi total tanto para los equipos de red como para las redes inalámbricas que se usen, con alertas, segmentación de usuarios con asignación de cuotas de transferencia o velocidades de transmisión, posibilidad de monitorizar en tiempo real el estado de las redes (tanto la carga de procesamiento de los equipos de red como las estadísticas de acceso de los clientes que se conectan a las redes inalámbricas.
Por supuesto, tienen que ser redes robustas, veloces, seguras, fiables o aisladas entre sí (la red de invitados, la red de clientes y la red de gestión, por ejemplo). Además, es muy conveniente disponer de un portal de acceso a las redes inalámbricas, de modo que puedan implementarse métodos de acceso a través de identidades sociales como Facebook, o a través de “vouchers” que ofrezcan conectividad limitada en tiempo y/o datos y/o velocidad de transferencia.
Además, tiene que ser una red fácil de instalar, desplegar y configurar o gestionar, tanto desde un ordenador como desde un smartphone o tableta: las incidencias de red, en más de una ocasión, requerirán de una respuesta inmediata. No necesariamente tendremos que ser nosotros mismos los que gestionemos la red, pero saber qué se necesita (y qué no) es interesante también de cara a dimensionar los servicios de mantenimiento de una red sin que nos sobren servicios contratados, pero sin que nos falten.
TP-Link Omada, la propuesta de TP-Link para redes definidas por software
Para estos negocios, que necesitan mejorar la conectividad de red, TP-Link cuenta con las soluciones Omada. Son soluciones tanto para mejorar la operativa de sus negocios sin que las conexiones de los clientes colapsen todo el ancho de banda (segmentación de redes), como para ofrecer a los clientes una conexión medida, segmentada, segura, fiable y fácil de usar (por ejemplo, sin necesidad de usar contraseñas de decenas de caracteres), al tiempo que incluso se monetice el servicio o se use como plataforma de marketing insertando anuncios en el portal de acceso a la red Wi-Fi.
Consisten en dispositivos de hardware como switches, controladores hardware, puntos de acceso o gateways (estos últimos para soluciones corporativas), que se autoprovisionan a través de la plataforma cloud de Omada, al tiempo que se gestionan y se mantienen desde esa plataforma cloud. Son, en la práctica, redes definidas por software o SDN.
En una red clásica, on premise, los dispositivos se configuran manualmente conectándonos a cada uno de ellos para definir sus parámetros de funcionamiento. Para uno o dos equipos, puede servir, pero para un despliegue de múltiples dispositivos de red, la solución Omada de TP-Link permite gestionar a todos los dispositivos desde una única plataforma en la nube. Podemos tener múltiples “sitios” en un mismo dashboard. Imagina, por ejemplo, que tienes varias casas rurales y quieres gestionar las redes de todas ellas de forma unificada desde una misma interfaz: con TP-Link Omada es posible. Y, además, es fácil.
La clave de las soluciones de TP-Link está en la variedad de propuestas que ofrece, basados en tecnologías PoE que permiten llevar la alimentación y la conectividad a los dispositivos de la red usando un único cable, con puntos de acceso tanto para interiores como para exteriores, con una potencia de transmisión elevada (y configurable), con switches PoE dimensionados para diferentes tipos de negocios, con controladores hardware que “hablan” tanto con los dispositivos de la red como con el software de la nube para construir ese escenario de redes definidas por software de un modo transparente para le usuario.
Son soluciones, además, que encajan bien en pequeños negocios como pueda ser un bar o un restaurante, así como otros más grandes en cadenas de restaurantes, franquicias, academias, hoteles, casas rurales, organización de eventos pop-up, comercios, clínicas, escuelas, etcétera. TP-Link Omada es una solución altamente escalable, que puede crecer con nuestro negocio.
Un caso práctico, un pequeño hotel
Para comprobar de primera mano cómo de fácil es el proceso de desplegar una red profesional para dar cobertura tanto a los equipos y sistemas de los que depende un negocio como pueda ser un hotel “con encanto”, casas rurales o albergues, bungalows o similares, TP-Link nos ha cedido en pruebas un kit con un controlador, un switch PoE y tres puntos de acceso de diferentes tecnologías.
Controlador Omada Hardware OC200: esta cajita se conecta al switch PoE. El puerto USB Tipo A permite usar dispositivos de almacenamiento para guardar la configuración de la red.
Switch TL-SG2210P V3.20: Este Smart Switch JetStream de TP-Link cuenta con 8 puertos gigabit PoE y dos ranuras SFP para extender opcionalmente la red mediante fibra o Ethernet. Este Switch cuenta con tecnologías para definir la calidad de servicio QoS en el tráfico de red, así como con hasta 61W de potencia para PoE. Los puntos de acceso consumen en torno a los 5W de media, por lo que este modelo servirá para la mayoría de las topologías de pequeños y medianos negocios.
Punto de acceso EAP225-Outdoor: Este punto de acceso para exteriores tiene un alcance notable con antenas de gran potencia de transmisión. Está certificado como IP65 por lo que aguanta la lluvia. Es Wi-Fi 802.11ac con hasta 1167 Mbps de velocidad de transmisión combinada en las dos bandas de 2,4 y 5 GHz.
Punto de acceso EAP620 HD para techo: este punto de acceso es compatible con el estándar Wi-Fi 6 con hasta 1.800 Mbps de ancho de banda combinado para 2,4 y 5 GHz, con hasta 1.200 Mbps solo para 5 GHz. Es un AP óptimo para escenarios de uso donde se manejen emisiones en vivo, por ejemplo, como en clases online.
Punto de acceso EAP225-Wall V1: este punto de acceso de pared Wi-Fi ac es perfecto para ofrecer conectividad en habitaciones de hotel o en puestos de trabajo separados en coworkings. Ofrece conectividad inalámbrica y cableada Ethernet, por lo que ofrece una gran versatilidad para conectar los equipos tanto mediante cable como inalámbricamente.
El plan
Lo que queremos es ofrecer a nuestros clientes una solución de conectividad personalizada y automatizada en la parte de creación de vouchers y limitación de tráfico tanto en velocidad como en datos. No queremos que los clientes saturen nuestro ancho de banda, que en zonas rurales no siempre será proveniente de fibra óptica.
También tenemos el hándicap potencial de tener que ofrecer conectividad en zonas donde no lleguen los cables. En este caso tendremos que integrar puntos de acceso de exteriores que enlazarán con los otros equipos mediante tecnología Mesh inalámbrica que funciona como un repetidor, pero con una gestión inteligente de los cambios de punto de acceso en roaming, así como de la elección de los canales o la priorización de tráfico según sea más rápido o lento y según sea la calidad de la conexión.
En algunos casos los clientes querrán conectarse mediante cable en vez de Wi-Fi, por los que los puntos de acceso de pared serán una propuesta óptima.
Queremos que la gestión de la red sea fácil y no requiera de una atención constante. Incluso pensaremos en contratar eventualmente a una persona de manteniendo que nos cobrará por horas de trabajo. Así que es importante conocer las posibilidades de la plataforma de gestión para dimensionar adecuadamente el coste de este servicio.
Queremos que la gestión de la red pueda llevarse a cabo desde el móvil, y que sea escalable si abrimos más casas o alojamientos o ampliamos la oferta de habitaciones. Aunque tengamos una persona al cargo, queremos saber qué pasa, así como ver qué clientes consumen más datos, o filtrar webs por dominios en un momento dado. Queremos alertas por correo, así como la programación de eventos como el reinicio automático de los equipos, o poder desactivarlos en caso de que no se usen.
Podemos pensar que todo esto que pedimos solo está al alcance de equipos mega profesionales, mega caros y que necesitan de la intervención de un departamento IT entero para ponerlo a andar. La verdad es que es todo lo contrario: TP-Link Omada se configura prácticamente con clics de ratón tras haber indicado a la plataforma la clave de identificación de nuestro controlador hardware.
El proceso
Para empezar, lo que tendremos que hacer es definir una ubicación inicial para los puntos de acceso e instalarlos en la pared o el techo dependiendo del tipo de punto de acceso de que se trate. Tenemos un switch PoE, por lo que solo tendremos que preocuparnos de llevar los cables de red Ethernet a donde hayamos decidido instalar los puntos de acceso.
En el caso de que queramos conectar un punto de acceso en un lugar donde no sea fácil llevar un cable Ethernet, o esté especialmente alejado del router, podremos usar el adaptador de alimentación a PoE que viene con puntos de acceso como el EAP225-Outdoor y usar el punto de acceso en modo repetidor Mesh. En el caso del repetidor de techo, viene con un adaptador de corriente. Este punto de acceso también puede configurarse como Mesh. Esta configuración es ideal para dar cobertura en las zonas de recreo de los hoteles o casas rurales o para alojamientos con cabañas individuales o incluso en campings.
En casas rurales con varias plantas, podemos combinar puntos de acceso de techo con los de pared, así como instalar varias configuraciones para diferentes plantas en las que duplicaremos la estructura de Switch más controlador. Depende de cuántas habitaciones tengamos y cómo de grande sea el espacio que queremos conectar.
Una vez instalados los puntos de acceso, el switch TL-SG2210P V3.20 y el controlador OC200, procedemos a conectar al puerto 8 del switch el cable de red que viene del router donde llegue la fibra o el satélite o la conexión punto a punto RF o la que tengamos contratada en nuestro hotel. Por supuesto, lo ideal es la fibra, pero si tenemos otras tecnologías incluso tendremos que pensar en contratar varias líneas diferentes si el ancho de banda no es elevado y tenemos que dar conectividad a muchos usuarios. Para una casa rural no será el caso, pero en un hotel rural, sí que puede ser necesario tener varias conexiones. En este caso tendremos que usar diferentes switches, uno para cada línea.
En nuestro caso tenemos una conexión de fibra simétrica de 600 Mbps de Vodafone. El controlador OC200 se conecta a otro puerto del Switch y hemos conectado el punto de acceso (AP) de techo EAP620 HD(EU) 2.0 a otro puerto, el EAP225-Wall (EU) 2.0 en otro, un EAP225-Outdoor (EU) 1.0 en un tercer puerto y otro EAP225-Outdoor (EU) 1.0 lo hemos dejado en modalidad de repetidor al no llegar el cable de red a donde lo tenemos instalado.
Posteriormente, con un navegador vamos al portal web de configuración https://omada.tplinkcloud.com/login, creamos una cuenta de usuario y logearnos con la que ya tengamos, y elegir la opción de añadir controlador.
Una vez añadido el ID del controlador OC200, al cabo de pocos instantes se provisionará desde la plataforma cloud y podremos empezar a avanzar con el asistente de configuración.
Este asistente nos permite elegir un escenario de uso predefinido o configurar un perfil personalizado. Elegimos el perfil de Hotel. El siguiente paso es integrar en nuestro “sitio” bajo los auspicios de nuestro controlador, los dispositivos que serán controlados por el OC200. El propio asistente detecta los puntos de acceso disponibles. El punto de acceso inalámbrico lo añadiremos más tarde. Por lo pronto tenemos solo los cableados.
También elegiremos las redes inalámbricas que queramos configurar. Los SSIDs. En este caso añadiremos una red Hotel Silicon (de Silicon Valley) y Hotel Silicon Guests de invitados. De este modo podremos dar a los clientes acceso a la red de invitados y usar la otra para conectar nuestros equipos de gestión y seguridad, por ejemplo. De todos modos, podremos modificar este punto y añadir más redes desde el panel de control.
Una vez recorrido este asistente, tenemos ya el panel de control o dashboard con todo a la vista donde se muestran de un modo visual lo elementos de nuestra red. Esta “magia” es responsabilidad del controlador OC200, que hace de “intermediario” entre el hardware de nuestra red y la plataforma cloud Omada.
Desde esta plataforma o dashboard, podremos configurar tantos sitios como controladores tengamos instalados. Nosotros tenemos uno, pero podríamos tener más dependiendo de nuestras necesidades. Así, podríamos elegir un switch con hasta 52 puertos o de 28 como el TL-SG3452P para conectar más puntos de acceso en caso de tener que cubrir espacios más amplios o de querer aumentar la densidad de la red. A más densidad, más capacidad de transferencia de datos para los clientes, siempre y cuando nuestra conexión de red tenga una capacidad suficiente.
Lo que podemos hacer desde esta plataforma es básicamente todo. Por ejemplo, una necesidad habitual en hoteles es la de crear cupones de acceso para los clientes de modo que no haya que configurar la conexión de forma manual. Esta plataforma de creación de vouchers permite crear cupones en batch con parámetros que limitan la duración de los cupones, el número de dispositivos que se pueden conectar con un cupón, el ancho de banda o la cantidad de datos que se pueden usar. De este modo, podremos asegurarnos de que la red no se va a saturar.
Por ejemplo, si un fin de semana vamos a tener lleno el hotel, los cupones para la Wi-Fi podrán ser de menos datos y menos velocidad. Si tenemos pocos huéspedes, podemos crear vouchers más generosos. Estos cupones se pueden usar una vez que definamos un portal de acceso para las redes de invitados que podemos personalizar con nuestro logo, mensajes de bienvenida, instrucciones, publicidad, etcétera.
Como decíamos, añadimos un punto de acceso en modo inalámbrico. Cuando lo enchufamos, es reconocido por la plataforma Omada y nos da la opción de añadirlo a nuestro “site” y aprovisionarlo.
Si tuviéramos varios controladores, podríamos decidir con qué controlador usarlo. En cualquier caso, ahora solo tenemos uno. La cuestión es que estamos ante un proceso totalmente intuitivo y en el que apenas sí tenemos que preocuparnos por el hardware en sí mismo. Toda nuestra red está gestionada desde un panel de control en el que podremos enfocarnos más en qué queremos hacer que en cómo tenemos que configurar el hardware de red para lograrlo.
Es el “milagro” de las redes definidas por software o SDNs, que TP-Link ha conseguido llevar a todo tipo de empresas y negocios como puede ser un hotel, por ejemplo.
Además del acceso web a través de un navegador, podremos acceder a la plataforma cloud desde la app móvil de Omada. Nos autenticaremos con nuestras credenciales y tendremos esencialmente (con algunas diferencias) la misma interfaz que en la web, pero en el smartphone.
Desde el dashboard de la plataforma Omada, podemos conocer tanto el estado de los dispositivos de red como los clientes conectados. Las posibilidades de configuración son excepcionales y pocos parámetros habrá que no podamos configurar. Es cierto que el tema de las alertas y gestión de registros de incidencias carece de herramientas de análisis especialmente avanzadas, pero en la parte de la configuración tenemos prácticamente todo lo que necesitamos para configurar una red Wi-Fi profesional para los clientes.
Wi-Fi o cableada si nos fijamos en el AP de pared, que cuenta con conexiones Ethernet, que podremos instalar en las habitaciones para los clientes o en las oficinas para conectar equipos de trabajo.
Podemos mapear los puntos de acceso físicamente en el espacio sobre un plano del hotel, así como ver gráficamente la topología de las conexiones.
En cuanto a los dispositivos de la red, podremos gestionar todos los parámetros relativos a mantenimiento, monitorización de tráfico, las redes inalámbricas que ofrece para las conexiones o incluso podremos definir qué punto de acceso es el de enlace en una configuración Mesh. Automáticamente se aprovisiona con el punto de acceso óptimo, pero nosotros podremos definir uno manualmente.
Tanto para los clientes como para los dispositivos tenemos datos de uso o sobre los recursos consumidos por cada uno de los elementos de la red. También tenemos opciones de seguridad, así como opciones para filtrar webs a las que queramos dar acceso o no. O podremos gestionar las alertas que también podremos enviar al correo a través de un servidor que podremos configurar con nuestra cuenta de correo profesional.
Como decimos, las posibilidades de configuración, limitación de tráfico, datos, horas de conexión activa, gestión de múltiples SSIDs, bloqueo de clientes, potencia de la transmisión de cada punto de acceso, reinicios programados, apagado selectivo de los puntos de acceso o incluso el consumo en Vatios de cada punto de acceso y dispositivo de red conectado son excelentes.
Ya seamos nosotros mismos, o un profesional que contratemos para el mantenimiento IT, la plataforma Omada pone en nuestras manos posibilidades extraordinarias de puesta a punto, mantenimiento y gestión de la red.
Las pruebas
Para las pruebas, además de hacer un recorrido exhaustivo por muchas de las opciones de configuración disponibles, hemos comprobado que el rendimiento está a la altura de lo que se espera. En este caso, hemos centrado las pruebas alrededor de la herramienta iPerf3, comúnmente usada en pruebas de rendimiento de las redes de comunicaciones.
También hemos usado Speedtest de OOKLA, aunque solo para corroborar que los resultados de iPerf3 estaban bien medidos en caso de duda. iPerf, a diferencia de Speedtest, permite definir el número de conexiones que se usan para las mediciones, lo cual es especialmente útil para pruebas de la vida real. Speedtest es más “teórico”.
Además, speedtest está limitado a los 600 Mbps de la conexión de Vodafone. iPerf3 no sale de la red local. De hecho, en esta ocasión ha venido bien: el punto de acceso de techo EAP620 HD, gracias a la tecnología Wi-Fi 6, permite que las velocidades efectivas máximas sean mayores de 600 Mbps. La topología de las pruebas de iPerf pasa por usar un PC como servidor conectado mediante cable Gigabit Ethernet al Switch, mientras medimos la velocidad con un terminal Xiaomi Mi 11 Ultra 5G que también tiene tecnología Wi-Fi 6 (E en este caso).
Hemos probado las velocidades máximas para cada punto de acceso y tecnología (Wi-Fi 6 (ax), Wi-Fi ac o Wi-Fi ac con limitación a 100 Mbps como es el caso del punto de acceso de pared. También hemos medido la velocidad en el punto de acceso para exteriores conectado mediante Mesh. Estas medidas ideales se han realizado justo al lado de cada punto de acceso.
También hemos medido la velocidad a diferentes distancias. La casuística es enorme, pero los resultados, a modo de resumen, hablan de velocidades máximas de 635 Mbps para la tecnología Wi-Fi 6 del punto de acceso de techo. Puede parecer poco comparado con la velocidad teórica de 1200 Mbps, pero en la práctica es lo que se puede esperar, que no está nada mal. Al contrario.
En muchas instalaciones, con usar estos puntos de acceso de techo bastaría, salvo necesidades más refinadas como el acceso en exteriores o el acceso cableado en las habitaciones. El punto de acceso EAP225-Wall V1 está conectado al router PoE con un enlace de 100 Mbps por lo que la velocidad máxima será esa.
Con iPerf hemos definido conexiones de test con 30 instancias para simular un hotel con 30 conexiones respectivamente, tanto para huéspedes como para usos del propio hotel. En este caso vemos cómo al aumentar la distancia y bajar la velocidad, cada conexión se queda con una velocidad que puede ser muy pequeña. En este caso, habrá que dimensionar la densidad de puntos de acceso para que cada conexión tenga una velocidad mínima suficiente.
La distancia a la que hemos obtenido los datos de 20 Mbps y 10 Mbps fue de unos 30 metros con paredes de por medio. Depende de los muros que haya o cómo estén hechos que el alcance sea mayor o menor. Estamos ante un comportamiento muy bueno, que dará juego para dimensionar la densidad de nuestra red con flexibilidad. Son equipos de red con potencias de transmisión elevadas, todo sea dicho.
En conjunto, los test responden a lo esperado y no son cuestionables en ningún caso. El alcance y la topología de la red es algo que tendremos que optimizar para lo cual podemos usar herramientas como esta iPerf3 para tener cifras de rendimiento que permitan tomar decisiones.
TP-Link Omada, una solución de conectividad óptima
En este caso nos hemos centrado en un uso para hostelería, pero los escenarios donde estas soluciones TP-Link Omada de redes definidas por software encuentra aplicación son prácticamente todos, dentro de lo que son negocios y empresas pequeñas y medianas. En escenarios más ambiciosos habría que pensar en introducir otros elementos tales como los gateways, o equipamiento aún más ambicioso que el que hemos usado en esta prueba práctica.
Es una solución fácil de configurar, fácil de poner a andar, fácil de gestionar, pero con una potencia muy elevada de cara a implementar aquellas funcionalidades que pueda necesitar nuestro negocio. Podemos gestionar las redes nosotros o un profesional, pero no tiene por qué ser una dedicación “full time”. Una red como esta de TP-Link Omada, una vez puesta a funcionar, no tendría que dar problemas en días o semanas o incluso más tiempo.
Tareas rutinarias como la creación de vouchers puede hacerse una vez cada semana, por ejemplo, o cuando haya necesidad, por ejemplo. Las incidencias, una vez que la red está configurada, deberían ser mínimas. Los equipos son robustos y fiables.
Poco podemos objetar a esta solución Omada TP-Link. Lo que está claro es que es una propuesta que rompe muchos mitos sobre la conectividad empresarial y acerca a empresas medianas y pequeñas tendencias como las redes definidas por software o SDN, con una inversión sensata y fácilmente amortizable.
Una configuración como la usada en las pruebas, tiene un coste de unos 700 euros o algo más o menos dependiendo de variables como cuánto cable haya que comprar o si hay que hacer obras para el cableado o similares. A más puntos de acceso, mayor coste, pero APPs como la de techo, cuestan en torno a los 150 euros. Es un precio asumible. Además, la plataforma Omada cloud es de libre acceso sin coste.
Como alternativa al controlador hardware, TP-Link cuenta con un controlador software gratuito (más información aquí) que habrá que instalar en un equipo de la red que estemos desplegando. Posteriormente podremos acceder a la configuración cloud, pero habrá que instalar el controlador software en un equipo como decíamos. Es una alternativa para el controlador físico mediante hardware que en este caso es el OC200.
Por si fuera poco, TP-Link ofrece a las empresas y negocios españoles un programa de financiación a 6 meses para la compra de equipos de la gama empresarial SMB Omada. Tienes más información aquí.