La seguridad ya no es un seguro para su compañía, sino un valioso activo
El impacto directo de la ciberdelincuencia en las grandes economías origina pérdidas estimadas en 450.000 millones de dólares anuales, además de otros 150.000 millones en perjuicios derivados del robo de datos personales. No obstante, lo peor es que estas cifras continuarán incrementándose a medida que los avances tecnológicos sigan produciéndose.
Por tanto, hay que tomar medidas y estas deben estar a la altura del riesgo y de los activos a proteger. En breve, ninguna empresa contratará a otra sin antes valorar su nivel se seguridad.
La ciberseguridad asegura la protección de los datos digitales mediante la implementación de procesos y tecnologías capaces de blindar las redes, dispositivos y, en general, bloquear el acceso no autorizado al dato con el fin de robarlo, dañarlo o bloquearlo. Sin embargo, esta definición no se puede cumplir sin antes estudiar y comprender las necesidades de cada empresa u organización.
Pero… ¿Por dónde empezamos?
Personas, procesos y tecnología son los tres pilares de la ciberseguridad.
El acceso a la red ha transformado los puestos de trabajo en puestos móviles. Este escenario ha modificado rápidamente el perímetro de seguridad empresarial, convirtiendo a cada trabajador en un objetivo a proteger. Es aquí donde formación y concienciación se convierten en iniciativas básicas e iniciales.
La concienciación por parte de la alta dirección es, sin duda, el primer paso. La seguridad tiene que ser una realidad en todos los entornos ('by desing & by default'), no un extra a añadir o parchear según impulsos o recomendaciones. Las soluciones deben ser tomadas de forma proactiva para evitar posibles y costosas brechas de seguridad. Por tanto, es fundamental alinear la estrategia negocio con el grado de seguridad a adoptar, definiendo aspectos clave, como, qué se va a proteger, incidentes qué pueden surgir, cómo prevenirlos, plan de respuesta, de continuidad de negocio... Todos ellos son interrogantes que requieren de un alto nivel de respuesta por afectar directamente al negocio.
Confiar en profesionales, el segundo paso
Dado que muchas empresas no pueden o no están preparadas para afrontar o desplegar una estrategia de seguridad acorde a sus necesidades, una buena opción es confiar en la experiencia profesional de una empresa, como EinzelNet, preparada para ello. Solo un socio de confianza puede encargarse de definir una estrategia de seguridad sensata y acorde a las necesidades propias de cada organización, sabiendo además, combinar los esfuerzos técnicos, humanos y económicos con los hitos temporales correctos.
Desde Einzelnet no queremos asustar, pero si alertar y concienciar de los riesgos que la trasformación y el continuo avance digital traen consigo. Nuestra oferta de servicios es una garantía para cualquiera de las necesidades del mercado o de las fases en las que una empresa se encuentre en cuanto a su política de seguridad: consultoría, estrategia y diseño de seguridad (RGPD Compliance); Business Continuity o análisis de impacto e implementación de arquitecturas de seguridad resilientes; Security Analytics con análisis en tiempo real e inteligencia artificial; servicios de Governance, Ciso y DPD virtual y definición e implementación de políticas de seguridad y control de activos.
La ciberseguridad debe ser considerada como un valioso activo: protege, da prestigio y credibilidad a la empresa. Piénselo, si nadie -conscientemente- deposita su dinero en un banco carente de garantías de custodia, por qué iba a trabajar o a contratar a una empresa incapaz de garantizar correctas medidas y políticas de seguridad.