La actividad del sector de transporte en autobús se mantuvo en 2021 lejos del nivel prepandemia
Tras crecer a un ritmo anual cercano al 4% en el período 2016-2019, los ingresos derivados de la prestación de servicios de transporte de viajeros por carretera contabilizaron en 2020 una caída del 49,3%, hasta los 1.850 millones de euros. Así al menos lo refleja el Observatorio Sectorial DBK de Informa (filial de Cesce).
Las restricciones a la movilidad destinadas a contener la expansión de la Covid-19, el negativo comportamiento de la actividad turística, la paralización de la actividad educativa presencial, el cierre temporal de algunos centros de trabajo y la rápida adopción del teletrabajo, o el alto número de trabajadores en ERTE son algunos de los factores que explican la sensible contracción de la demanda, señalaron en una nota de prensa fuentes de DBK Informa.
El número de viajeros que utilizaron el servicio de transporte interurbano regular de uso general experimentó una caída del 45,2%, situándose ligeramente por debajo de los 400 millones. Según la distancia, los viajes largos acusaron la mayor caída de la demanda, cifrada en el 63%. Por su parte, los segmentos de media distancia y cercanías contabilizaron retrocesos de alrededor del 45%.
El servicio de transporte especial, incluyendo el ámbito urbano y el interurbano, experimentó una disminución del 34,2%, hasta los 209 millones de viajeros. Por su parte, el segmento de transporte discrecional contabilizó cerca de 50 millones de pasajeros en 2020, un 76,6% menos.
Tras esta fuerte caída de la demanda registrada en 2020, los datos provisionales de 2021 siguen marcados por niveles de tráfico reducidos, que no se recuperarán en su totalidad antes de 2023. Así, se calcula que el ejercicio 2021 se cerró con un incremento de la facturación sectorial de alrededor del 24%, hasta los 2.300 millones de euros.
La oferta continúa caracterizándose por una notable atomización, si bien se prolonga la tendencia de creciente concentración sectorial. A comienzos de 2021 se contabilizaban 3.177 empresas autorizadas para la prestación del servicio, habiéndose producido el cierre de casi 200 en solo dos años.
La sensible caída de la demanda provocada por la crisis sanitaria potenció esta tendencia de aumento de la concentración, que se reflejó en el notable aumento de la cuota de mercado conjunta de los principales operadores. Los cinco primeros absorbieron en 2020 el 38% del volumen de negocio sectorial, mientras que la participación conjunta de los diez primeros se elevó al 48%.