Se pone en marcha emov, el nuevo servicio de carsharing en Madrid
La ciudad de Madrid da un nuevo paso hacia una movilidad sostenible con el inicio de las operaciones de emov. Esta nueva alternativa de carsharing, con una flota de vehículos 100% eléctricos de 4 plazas y 5 puertas, ha dado sus primeros pasos el pasado 19 de diciembre en la sede del Ayuntamiento de Madrid, junto a la céntrica Plaza de Cibeles, y ha contado con la presencia de la alcaldesa, Manuela Carmena. Emov es una compañía española con sede en Madrid que surge de la alianza estratégica entre Eysa y Free2Move, la nueva marca de servicios de movilidad del Grupo PSA, dos empresas de referencia en sus respectivos sectores. La capital española es la primera ciudad en la que emov lanza su alternativa de carsharing bajo la modalidad de free floating.
En su primera fase, emov cuenta con 500 Citroën C-Zero en régimen “free floating”, es decir, sus usuarios podrán acceder gracias a su smartphone, a cualquiera de los vehículos emov estacionados en las calles de Madrid. Entre las ventajas del servicio se encuentran el dejarlo aparcado en zona azul o verde sin tener que pagar el estacionamiento regulado dentro del perímetro de utilización de este servicio. El único coste es el del alquiler del automóvil, que será de 0,19 euros por minuto, aunque se ofrecerá una tarifa diaria de 59 euros para usos prolongados. La inscripción a emov será gratuita hasta el 31 de enero de 2017 utilizando el código “viveemov001” y además 30 minutos gratis para utilizar el servicio. Con estas tarifas, y como ejemplo, un recorrido de unos 12 minutos entre Arturo Soria y el Paseo de la Castellana tendría un coste de 2,30 euros.
Crear una experiencia de utilización sencilla para el usuario ha sido la gran prioridad al diseñar emov. Todo el proceso de alta en el servicio puede realizarse desde la web (www.emov.es) o la aplicación compatible con dispositivos iOS y Android. En menos de 24 horas, se puede empezar a disfrutar de las ventajas de emov, sin necesidad de tener que validar la inscripción de un modo presencial.
La aplicación para smartphones es la pieza clave del servicio de emov. El usuario no paga hasta que comienza a utilizar el vehículo y puede reservarlo sin coste con 30 minutos de antelación. Además, con esta aplicación se abren y cierran los automóviles de una forma ágil y sencilla. Este servicio se apoya en una tecnología avanzada suministrada por la sociedad Vulog, proveedor de soluciones de carsharing.
La cobertura geográfica es una de las grandes bazas de emov. El aquiler de los Citroën C-Zero podrá iniciarse y finalizarse fuera de la Almendra Central de la capital, cruzando la M-30 hasta llegar a la calle Arturo Soria, en el este; la avenida del Cardenal Herrera Oria, el Nudo de Manoteras y la M-11, en el norte; y algunas zonas de la Ciudad Universitaria en el oeste. Un área que cubre parte de los distritos de Ciudad Lineal, Fuencarral-El Pardo y Moncloa-Aravaca.
El Citroën C-Zero es el vehículo elegido para lanzar emov entre los conductores madrileños. Se trata de un automóvil pensado para unos desplazamientos con cero emisiones. Con una longitud de 3,48 m y un diámetro de giro de 9 m, se mueven en la ciudad de forma ágil. Ofrece a sus cuatro ocupantes una conducción sencilla y tranquila y un alto nivel de confort y seguridad. Sus prestaciones (velocidad máxima de 130 km/h, de 0 a 100 km/h en 15,9 segundos y aceleración de 60 a 80 km/h en 3,9 segundos) y su autonomía de 150 km cubren cualquier tipo de necesidad en entornos urbanos y periurbanos. El C-Zero permite conectar el smartphone al dispositivo Bluetooth y, además, poder cargarlo gracias a la toma USB.
Ponerse al volante de un turismo 100% eléctrico ofrece grandes ventajas al desplazarse por Madrid. Además de favorecer una movilidad sostenible, el C-Zero puede aparcar gratuitamente en las plazas de estacionamiento regulado, tanto verdes como azules. Los usuarios de emov pueden recorrer la capital olvidándose de restricciones al tráfico, como las que se activan en casos de alta contaminación. Asimismo, pueden acceder a las Áreas de Prioridad Residencial y a zonas temporalmente limitadas a la circulación de automóviles, como la Gran Vía o la calle Atocha durante las fiestas navideñas.