La innovación desde cuatro puntos de vista

Las cuatro empresas de las que hablamos (Pro-Face, Lenze, Leuze Electronic y Vahle) presentaron conjuntamente sus novedades el pasado 8 de julio en el marco del Santiago Bernabéu. La sala de prensa del estadio, que ve pasar habitualmente a futbolistas y entrenadores, sirvió en esta ocasión para presentar los últimos proyectos que estas cuatro empresas han estado desarrollando en los últimos meses.

Pro-Face, como comentó Manuel José González, gerente de la empresa, es “el número uno a nivel mundial de pantallas táctiles”. Además, hay que destacar que “fue el primer fabricante en sacar al mercado, hace 33 años, una pantalla táctil”, según explicó Carlos Aguilera Sánchez, delegado de la zona centro y sur de esta compañía de origen japonés. Además, hace 15 años, Pro-Face sacó el primer panel PC, una pantalla táctil con PLC integrada. Por otra parte, en pocos meses, están planeando sacar una pantalla táctil formada por dos piezas.

Aguilera explicó las novedades en pantallas destinadas a la domótica y también habló de las pantallas táctiles, de las que destacó que “la serie AGP3000 es la gama estándar, cuya característica principal es la potencia en comunicación con los PLC, se puede comunicar con 4 protocolos distintos a la vez e intercambiar información”. En cuanto a la serie GP4100, de 3,4", Aguilera concretó que “el software es gratuito, existen 4 modelos distintos, con un puerto mini-USB”, entre otras características.

Por su parte, Marc Noguera, del departamento técnico de Pro-Face, desgranó las últimas novedades de software de Pro-Face. GPproEX, del que explicó que “sirve para programar todas las pantallas, incluidas las que tienen PLC”. WinGP es otro de los programas que usan sus pantallas, el cual se puede utilizar toda la herramienta de diseño de una HMI también en un PC convencional.

El Pro-Server “es una aplicación para ordenador que se conecta con todas las pantallas que hay en fábrica y captura datos de esas pantallas, destinado a la producción o trazabilidad”. GP Viewer “es un software de monitorización remota, para conectarnos remotamente a la pantalla que queramos y ver lo que ocurre en la pantalla”. Noguera también quiso dejar claro que “es un software pensado para ir rápido, ya que cuando se conoce, se pierde poco tiempo en programación”.

Leuze Electronic, como bien explicó su gerente Jaume Torres, “es una empresa familiar con 1500 empleados en todo el mundo y una facturación de 210 millones de euros”. El grupo nació en 1963, en el que se comenzó trabajando en el desarrollo del primer sensor optoeléctrico para máquinas propias en sector textil. Treinta años más tarde fundaron Leuze Lumiflex, marca que quedaría fusionada con Leuze electronic en 2009.

Actualmente su mayor foco de negocio son los sensores y los sistemas de identificación y seguridad. En el primer caso, la división de detección, está dedicada a la fabricación de sensores optoeléctricos, sensores ópticos para medición de distancias y sensores de ultrasonidos, para la detección y medición. La división de identificación se dedica a sistemas de identificación RFID, además de sistemas de transmisión de datos y de medición de distancia. Finalmente, la división de seguridad se encarga de fabricar sensores y sistemas de seguridad, además de asesoría e inspecciones en seguridad.

Sus sistemas son también aplicables a la logística, ya que cuentan con sistemas de identificación, de transmisión de datos y medición de distancias, como lectores de código de barras, sistemas RFID, unidades de conexión modulares, sitemas de procesamiento de imágenes, transmisión óptica de datos, medidores ópticos de distancias o lectores manuales de códigos.

La tercera de las empresas que se presentó en el Santiago Bernabéu fue Lenze. Con sede en Alemania, tiene más de 3.000 trabajadores en todo el mundo y factura 550 millones de euros. Tiene plantas de producción en EE UU, Francia y Alemania. Su gerente, Óscar Chaves, explicó que actualmente la empresa “centra su actividad en Eupora, pero en los últimos años nos estamos expandiendo a Asia y Estados Unidos”.

Por su parte, Juan Manuel Gil, delegado de la zona centro, aclaró que Lenze se dedica a la automatización industrial y a los accionamientos, lo que incluye “reductores de alto rendimiento, de todos los tipos básicos, engranajes elocoidales, engranajes cónicos, ejes paralelos, a los que podemos adaptar nuestros montores asíncronos, de eficiencia E2 y E3. También podemos adaptarles servomotores, tanto síncronos como asíncronos”.

Gil destacó la valía de su gama de minimotores: “Son motores de pequeña potencia, que se combinan con nuestros reductores de bajo tamaño para aplicaciones donde las cargas son ligeras”. Todos sus equipos, además, cuentan con una memoria extraíble, lo que facilita su mantenimiento, ya que “para sustituir un equipo por otro tan solo necesitaremos extraer la memoria con todos los parámetros de un equipo y instalarla en el equipo nuevo”.

Vahle, como todas las empresas que participaron en el evento, “es una empresa familiar con presencia en los cinco continentes y suministra electricidad a máquinas que se mueven”, como describió Marcos Martínez Esser, gerente de la empresa. Sus puntos de producción están en Alemania y la particularidad de esta empresa es que se dedica a “una gama muy amplia de aplicaciones industriales”.

La gama de clientes y aplicaciones es también muy amplia, contándose entre éstos, los sectores de la elevación, la logística, la automoción, la industria pesada, los puertos y el transporte. Alberto López, el director comercial, desgranó las novedades presentadas, como “la línea de seguridad MKH, que es una línea compacta, de entre seis y diez polos”. Se trata de un sistema modular de barras de cuatro metros con una carcasa de plástico en la cual se introducen las pistas de cobre.

López destacó que se trata de “una conducción muy pequeña; ocupa 56 por 88 milímetros y va de 6 hasta 10 polos, y a intensidades de 40 hasta 200 amperios”. Otra de las características de dicho producto es que “con este tipo de conducción, sirve tanto para interior como para exterior, la única diferencia es que en interior se colocan cada dos metros y en exterior, cada metro”. Es un producto fácilmente instalable con muchos accesorios como labios de neopreno para que sea más estanco.