Una publicación de AENOR incluye al Grupo Matarromera entre los 10 casos de éxito en el uso de tecnologías sostenibles

La trayectoria del grupo bodeguero vallisoletano que preside Carlos Moro no ha pasado desapercibida para la Asociación Española de Normalización y Certificación (AENOR). Con motivo de su 25 aniversario, éste organismo ha editado una publicación con los diez casos de aplicación exitosa de la tecnología en empresas españolas. La edición, cuya presentación oficial tuvo lugar ayer en el Ministerio de Industria, Turismo y Comercio, revela cómo estas empresas han llegado a ser punteras a escala mundial. Sus conclusiones revelan que la aplicación de estas tecnologías ha llevado a éstas empresas a ser más sostenibles, rentables y generadoras de calidad de vida en los ciudadanos.

En la publicación conmemorativa de sus 25 años, AENOR ha reconocido la contribución de la tecnología a la mejora de la competitividad del tejido productivo. Los 10 casos de éxito han sido escritos por primeros expertos de empresas españolas, representativas de numerosos sectores y tamaños, que abarcan desde el vino, hasta la obra civil, pasando por el transporte, electrodomésticos, energía eólica, telecomunicaciones, aeronáutica, industria de la ciencia y nanotecnología. En el caso del Grupo Matarromera, y a través de un artículo de su presidente Carlos Moro, éste ha compartido protagonismo con empresas como Jema, Metro de Madrid, Telefónica, Fagor, Eads-Casa, SpanCold y Ausigeti, Tecnalia, ITP y Gamesa.

En la imagen, instalación de placas fotovoltaicas en el proyecto Emina del Grupo Matarromera.

Grupo Matarromera es el primer grupo vitivinícola español en conocer el cálculo de la Huella de Carbono en sus productos. Durante el pasado año 2010, AENOR certificó a Grupo Matarromera el balance de CO₂ de tres de sus vinos en todas sus fases: desde el viñedo, hasta el proceso de producción y de elaboración, transporte, distribución, consumo y su propio reciclaje. Este certificado determinó que su Emina Verdejo emite 829 gramos de CO₂ a la atmósfera. Este dato, denominado 'huella de carbono', convertía al grupo castellano y leonés en la primera empresa española en conocer éste cálculo en Emina Verdejo (D.O. Rueda), Emina 12 meses (D.O. Ribera del Duero) y Matarromera Crianza (D.O. Ribera del Duero).

Por otro lado, Grupo Matarromera encarna en su centro CIVE (Centro de Interpretación Vitivinícola Emina), el primer proyecto integral de Desarrollo Sostenible de la industria vitivinícola en España. En Emina se emplean todo tipo de energías renovables como la biomasa, la energía solar térmica o fotovoltaica permitiéndole ahorrar energía y desarrollando una gestión sostenible y respetuosa con el medio ambiente. Esta política, extensiva a todos los centros productivos de la compañía, permite un ahorro de emisión de 400 toneladas de CO₂ a la atmósfera.