Hikvision muestra en Greencities sus conclusiones sobre el futuro del tráfico urbano

Ese cambio ha sido uno de los retos que se abordaron los pasados 20 y 21 de septiembre en Greencities y S-Moving, en los que Hikvision presentó soluciones tecnológicas que ayudan a preparar el futuro mejorando la eficiencia en el control de tráfico y facilitando el control de las zonas de bajas emisiones (ZBE) a través de las cámaras de seguridad, señalaron en una nota de prensa fuentes de Hikvision. Cámaras que, “por un lado”, explica Ángel Maestre, Sales Area Manager de Hikvision, “facilitan la gestión del tráfico en tiempo real y el desvío de vehículos en caso de cualquier tipo de incidencia y por otro, con el mismo sistema de seguridad, que detecta el acceso de vehículos no autorizados a las ZBE, colaborando en la reducción de emisiones y al cumplimiento de la normativa europea”.

Soluciones tecnológicas de hardware y de software como las que propone Hikvision que ayudan a mejorar el control de tráfico, de las ZBE y a optimizar el uso de los espacios públicos. Desde la compañía se augura que el futuro de la gestión de las ciudades “pasa por una ingente cantidad de datos en tiempo real, con lo que la toma de decisiones se optimiza y permite mejores decisiones y actuaciones en seguridad y en emergencias”.

Las nuevas cámaras de seguridad en el tráfico están equipadas con Inteligencia Artificial y algoritmos de Deep Learning, “capacidades que van a revolucionar la vida de las ciudades y sus ciudadanos”, avanzan desde Hikvision. Un ejemplo de ello es que “la cámara puede detectar la matrícula de un vehículo cuyo propietario ha sido condenado con una orden de alejamiento. En ese instante, emitirá una señal a la Policía y ésta puede avisar a la víctima”, explica Maestre.

El correcto análisis de estos datos repercute directamente en la vida cotidiana de la ciudadanía, tanto la usuaria de transporte público como privado. Gracias a las posibilidades que abren estas tecnologías los gestores de estos sistemas de seguridad, como por ejemplo los ayuntamientos, pueden reaccionar en tiempo real mediante el conteo de datos de los usuarios de cada parada de autobús y, así, “reforzar líneas y actuar ante incidentes espontáneas, como una manifestación o una inundación. Las nuevas tecnologías les permiten tomar decisiones no solo más eficientes, sino más seguras. Pueden analizar la efectividad de las rutas, itinerarios alternativos, vías que necesitan más o menos frecuencia de paso… y todo eso redunda en la calidad de vida de los ciudadanos”, destaca Maestre.

Los más recientes dispositivos están capacitados para transmitir esta información a la ciudadanía a través de pantallas de información variable en las ciudades o mediante aplicaciones directamente a nuestros móviles. Como explica Maestre, “se trata de gestionar metadatos que vuelan hacia los centros de datos en los ayuntamientos, donde se tratan en tiempo real y los cruzan, por ejemplo, con Google Maps y otros softwares de organismos públicos con los que cooperan —como los de la Policía Local— que reciben la notificación inmediata de un accidente o un atasco, lo que puede ser decisivo, incluso, para salvar vidas”, expone Maestre.

En la actualidad ya existen ayuntamientos españoles que gracias al análisis de los datos obtenidos por estas cámaras dan un paso hacia el futuro. Casos como el de Sevilla, en el que Hikvision fue pionero en el control de bajas emisiones y le llevó a implantar más de cien cámaras de control de acceso y clasificación energética en el anillo Plan Centro para proteger su parte histórica. O el de la localidad malagueña de Mijas, en la que se instalaron radares pedagógicos en las vías escolares para proteger a los más pequeños y que nacieron como iniciativas disuasorias, pero han permitido a los ayuntamientos tomar medidas para reducir la velocidad mediante la instalación de badenes. “Las cámaras se convierten en los ojos de lo que el ayuntamiento no ve para tomar conciencia”, explica Maestre.

Orto ejemplo de las posibilidades que abren las cámaras de Hikvision es el de la ciudad madrileña de de Getafe que, según Maestre, “se ha adelantado al futuro con el único sistema de cámaras que cumplen la normativa UNE europea para controlar la eficiencia energética, la lectura de matrículas de motocicletas que antes no eran legibles en vías urbanas y coordinar los datos de control de aforo de todos sus edificios públicos y de otros edificios inteligentes en una misma plataforma”.