Manusa instala puertas automáticas para cierres de andén en el funicular del Tibidabo
Manusa, firma de referencia en accesos inteligentes y puertas automáticas, emprendió recientemente un proyecto en el funicular Cuca de Llum, que conecta la ciudad de Barcelona con el parque de atracciones del Tibidabo. Allí instaló 24 puertas automáticas para cierre de andén distribuidas en cuatro andenes de dos estaciones.
Este funicular ha sido renovado recientemente, eliminando los vagones antiguos, las viejas vías y la catenaria en favor de un nuevo trazado con nuevos vagones.
Los vagones cuentan con un diseño diáfano, innovador y avanzado que permite un mayor espacio en su interior y una visión panorámica durante todo el trayecto. Ahora el funicular es más rápido y tiene una mayor capacidad que el anterior, pudiendo albergar hasta 252 pasajeros en cada viaje.
Las puertas automáticas instaladas por Manusa garantizan la seguridad y el confort de los viajeros. Estos accesos están sincronizados con el funicular, de manera que cuando el vehículo llega o se marcha, las puertas se abren y cierran de manera automática. Así se evitan incidencias como que alguna persona u objeto caiga a las vías, haya un arrollamiento o se paralice el normal movimiento del funicular.
Estos accesos inteligentes de Manusa han sido específicamente diseñados de manera personalizada para este proyecto. “Partimos de un producto estándar y tuvimos que adaptarlo para poder cumplir con todas las exigencias de los estándares de seguridad que tienen los entornos de transporte”, explica Manel Cañadas, responsable del área de transporte en Manusa.
La empresa diseña, fabrica e instala puertas automáticas y accesos inteligentes en todo el mundo desde hace más de 50 años. Esta amplia experiencia les ha llevado a afrontar con confianza la automatización de los accesos de andén en el funicular barcelonés.
“En esta ocasión no teníamos el andén en una única horizontal, sino que las puertas tenían que estar en diferentes niveles. Creamos una estructura modular que fuimos repitiendo en los diferentes niveles en los que las personas tienen acceso hasta el funicular”, afirma Rubén Sebastià, del departamento de I+D de Manusa.
La creatividad, la alta tecnología, la adaptabilidad y la experiencia han hecho que Manusa ayude a mejorar la funcionalidad de este emblemático funicular que funciona desde principios del siglo XX.
