De la videoseguridad al ‘Smart Stadium Manager’

La mayoría de los estadios que albergarán la Eurocopa 2024 en Alemania ya están empleando soluciones del fabricante germano Dallmeier. En 2018, el Mundial de Fútbol en Rusia dio además concluyentes pruebas de que también existe demanda internacional de tecnología alemana: Dallmeier equipó nueve de los doce estadios rusos de la Copa Mundial con tecnología de vídeo. Pero, ¿por qué optan muchos operadores de estadio en todo el mundo por tecnología de videoseguridad ‘made in Germany’?

La seguridad en un estadio de fútbol afecta a muchas áreas: se pueden producir sucesos en las tribunas, las zonas interiores y de entrada, los accesos y aparcamientos. Los objetivos a su vez son diversos si se trata de medidas preventivas: desde la “escolta” del bus de los aficionados visitantes al estadio o una reacción rápida en caso de altercados en las tribunas, hasta las evaluaciones a posteriori de delitos racistas, en su caso. Y las soluciones están siendo cada vez más complejas. A partir de los simples sistemas de cámara y grabación, las tecnologías están evolucionando de prisa: temas como inteligencia artificial (IA), captación de datos mediante cámaras como “sensores ópticos”, aplicaciones de gestión de datos, incluso el control centralizado de áreas de tecnología de estadio, impulsan inmensos cambios. Pero al mismo tiempo, las personas que toman las decisiones se enfrentan cada vez a mayores retos a la hora de valorar e implementar tecnologías correctamente. Dallmeier adopta un enfoque integral fundamentado en tecnología, asesoramiento y servicio.

La empresa no sólo ofrece sistemas innovadores de grabación y de cámaras, como el patentado sistema de sensores multifocal Panomera, implantado en estadios en todo el mundo y con el que es posible representar incluso contextos complejos por toda el área a captar con la máxima resolución en unos pocos monitores. Dallmeier combina además estos sistemas en una plataforma de software con múltiples módulos para la gestión de seguridad y datos. Junto con el equipamiento, el fabricante ofrece servicios de proyecto integrales, tales como asesoramiento y un enfoque de planificación 3D global: un equipo de proyecto dedicado a crear un “gemelo digital” exacto de todo el estadio y sus alrededores. De este modo, es posible simular ya de antemano con precisión la solución de videoseguridad completa y planificar al detalle la cobertura requerida y, particularmente, la densidad de resolución en todas las áreas a vigilar. Con ello, el operador del estadio puede garantizar la resolución: por ejemplo, una densidad de resolución mínima de 250 píxeles por metro en todas las zonas de tribuna que, según la EN 62676-4, es la resolución requerida para una identificación inequívoca y la habitualmente admitida como prueba ante los tribunales.

Además de por su admisibilidad en contextos forenses, también es especialmente relevante para aplicaciones modernas de análisis. Ya que sólo con calidades de imagen altas y exactamente definibles se pueden generar datos aprovechables. Esta recolección de datos, entonces, abre campos de aplicación completamente nuevos para la tecnología de vídeo como, por ejemplo, el uso de IA como sistemas de asistencia útiles.

Los sistemas basados en VCA (Video Content Analyse) e IA ofrecen ya hoy en día, como sistemas de asistencia, un amplio rango de funciones que mejoran enormemente la eficiencia de operadores y procesos. Entre ellos están p.ej. sistemas para analizar concentraciones de personas u objetos. Los resultados pueden ser representados en un mapa de calor, ayundando al transporte público en el control de autobuses, metro y otros medios con el objetivo de gestionar grandes volúmenes de aficionados. Y si más espectadores de lo permitido, desde un punto de vista de seguridad, acuden en masa a aquellas áreas de tribuna donde el ambiente es el mejor, un “conteo de capacidad” puede prevenir el abarrotamiento de determinadas zonas de tribuna. Con ellos también son posibles optimizaciones en marketing como la evaluación del número de compradores de entradas que no asisten al partido, permitiendo sobreventas controladas de zonas de hinchas y, por tanto, mayores beneficios en su venta.

Consultas forenses, tales como el reconocimiento facial, pueden ser empleadas, por ejemplo, para denegar, ya en la zona de entrada, el acceso al estadio a visitantes que están en la “lista negra”. También es posible comprobar a posteriori el paradero de personas de interés en la grabación de vídeo, por ejemplo, para investigar su participación en incidentes. Otros posibles campos de aplicación de los sistemas Dallmeier son el apoyo al personal de seguridad durante su intervención, mediante fotos o grabaciones de vídeo en tiempo real, enviadas por el centro de control directamente desde la vídeo observación a los dispositivos móviles. De esta manera, las situaciones críticas pueden ser evaluadas mejor y resueltas más rápidamente. Asimismo, los dispositivos móviles pueden ser usados para la recogida de pruebas. La posibilidad de una recopilación centralizada de todos los datos de un incidente (fotos, vídeos, declaraciones de testigos, documentos etc.) en un expediente electrónico y su retransmisión a diferentes sistemas (policía, justicia) completan la práctica función de soporte.

Al margen de su objetivo de seguridad, la tecnología de vídeo, los sistemas de asistencia por análisis de vídeo y las funciones de gestión de datos también sirven para mejorar numerosos procesos de negocio: un reconocimiento automático de matrículas (ANPR) acorta tiempos de espera en parkings y permiten una gestión mejorada, p.ej. de áreas de aparcamientos VIP. Un mejor control de masas de personas en la gestión de tráfico, durante los tiempos de espera en las entradas o cajas o, también, en las zonas de catering, aumenta aún más la satisfacción del visitante. Junto con una seguridad mejorada, también un gran número de procesos en muchas áreas pueden ser optimizados mediante ‘Business Intelligence’ generada por vídeo. Al final, en los próximos años, los sistemas de vídeo de los operadores de estadio pasarán de ser simples posiciones de gasto a convertirse en verdaderos ‘centros de beneficio’ que no sólo recuperarán rápidamente las inversiones realizadas, sino que por sí mismos generarán ganancias y contribuirán a una mayor rentabilidad total.