Tecnología de RFID en la industria de envases y embalajes
8 de junio de 2011
La tecnología RFID (siglas de Radio Frequency IDentification) está en auge. Integrando microchips en los envases puede recogerse información de forma continua sobre el estado de un producto, como la humedad o la temperatura, y emitir alertas cuando se encuentra por encima o por debajo de los umbrales programados. Los chips también pueden ayudar a los pacientes a tomar sus medicamentos en la dosis correcta y en el momento adecuado emitiendo un tono en el instante indicado. Los chips pueden hacer aún más: alimentados con datos tales como el lugar de origen o fabricación, se puede mantener una trazabilidad completa del producto, lo que supone una forma importante para luchar contra la falsificación.
El potencial de la tecnología
La industria del packaging ve un gran potencial en la tecnología de RFID en los envases y embalajes. La electrónica orgánica impresa es una clave para el desarrollo de esta tecnología gracias a su bajo coste de producción y por la ventaja que supone imprimir con tintas con funcionalidades a la hora de fabricar una etiqueta o tag RFID como si fuera una imagen.
Varios institutos y empresas por todo el mundo están trabajando en la comercialización de la tecnología de la electrónica orgánica impresa y ya han conseguido fabricar etiquetas HF-RFID (High Frequency Radio Frequency IDentification) solamente con tecnologías de impresión. Estas tags impresas son flexibles y delgadas, por lo que se pueden integrar fácilmente en el envase mediante tecnologías de impresión. Así, las mercancías equipadas con la tecnología RFID pueden recuperarse de forma rápida al incorporar grandes cantidades de información. Esta técnica garantiza la autenticidad y la seguridad de la distribución.
Varios fabricantes de maquinaria ofrecen ahora etiquetadoras de tags RFID automáticamente en los cuales se pone el chip directamente al sustrato con la antena impresa. Una novedad es que existe la posibilidad de poner el chip como una bandera que resalta sobre el envase y no en plano, evitando así problemas en la lectura de tags UHF, en el caso de que las ondas de radiofrecuencia tengan que atravesar medios líquidos o envases metálicos.