El 92% de puestos de trabajo que genera son de carácter indefinido
El sector químico ocupa el 4,6% de la población activa en España
La industria química sigue destacándose como uno de los sectores industriales más consolidados en nuestro país. Tal y como afirman los datos de la Federación Empresarial de la Industria Química Española (Feique), este sector representó en 2022 el 5,6% del PIB español con una cifra de negocios de 89.866 millones de euros y un crecimiento anual histórico del 16,3%.
Unido a esto, este sector se destaca como el principal inversor industrial en I+D+i de nuestro país, con una inversión anual total de 1.721 millones de euros. Además, por segundo año consecutivo, se ha posicionado como el principal exportador de la economía española, generando una facturación de 63.626 millones de euros en mercados exteriores, lo que representa un aumento del 29,2% en comparación con 2021.
Esta industria se ha convertido en la principal exportadora de nuestro país por segundo año consecutivo. Imagen: Freepik.
Empleo de calidad, altamente remunerado y cualificado
Este informe de Feique también analiza la influencia de este sector en el ámbito del empleo español. Y es que, en el último año, la industria química ha experimentado un crecimiento de su fuerza laboral directa del 12,1%, alcanzando los 234.200 asalariados directos, cifra que asciende hasta los 796.280, contando los empleos indirectos e inducidos, que supone el 4,6% de la población activa asalariada en España.
En referencia a la estabilidad laboral, el sector se destaca por la gran calidad de los empleos que genera, ya que el 92% de los puestos de trabajo de esta industria tienen carácter indefinido. Además, el salario medio de los profesionales supera los 39.159 euros anuales, lo que supone un 61% más que el salario medio en España, que se sitúa en 24.249 euros.
Por otra parte, las empresas de este sector apuestan por la alta cualificación de sus empleados, ya que destinan una media de 184€ por persona al año, más del triple que la media nacional (60,5€) y casi el doble que la media industrial (93,3€).
Pese a esto, también existen aspectos relacionados con el empleo en las que esta industria debe mejorar, ya que las mujeres representan todavía el 42,4% de los trabajadores, lo que requiere una actuación en políticas de género. Por otra parte, existen altos riesgos laborales asociados al contacto con productos químicos, lo cual exige a las empresas cumplir con rigurosas normativas y establecer políticas exhaustivas de prevención de riesgos laborales.
Perfiles más demandados y desafíos en la atracción de talento
La multinacional de soluciones de recursos humanos, Synergie, ha llevado a cabo un estudio para identificar los puestos de trabajo más demandados por las empresas de este sector, los cuales se distinguen por requerir un alto nivel de especialización y una amplia trayectoria profesional. En este caso, los perfiles más frecuentes son:
- Operadores de planta química y operadores de máquinas: Sus conocimientos son versátiles y les permiten trabajar en diferentes actividades dentro de la industria química, desde la fabricación de tintes y pinturas hasta fármacos y medicamentos, plásticos, fibras artificiales, plaguicidas y fertilizantes, entre otros.
- Técnicos/as en química industrial, en planta química o de laboratorio: Este tipo de perfiles requieren, por lo general, una titulación de formación profesional de grado medio o superior. Además, en muchos casos se exige que tengan conocimientos en disciplinas transversales, relacionadas con nuevas tecnologías, con legislación o incluso idiomas, para poder ejercer una labor de supervisión y con cierto grado de responsabilidad.
- Toxicólogos/as: Desempeñan un papel crucial en la creación de productos eficientes y seguros. Estos profesionales pueden encontrarse en distintas fases, ya sea durante la fabricación, investigación o comercialización de los productos. Su tarea principal consiste en examinar los efectos perjudiciales de las sustancias químicas utilizadas en la elaboración de dichos productos. Por lo general, poseen una formación académica en Biología, Bioquímica o Medicina.
- Químicos/as industriales: Se dedican a la investigación y desarrollo de diversos productos químicos, incluyendo productos farmacéuticos y medicinales. También pueden desempeñar un papel en el área de producción, supervisando los métodos de procesamiento y evaluando la eficiencia en términos de costos.
- Ingenieros/as químicos/as: Su función principal se centra en transformar materias primas en una amplia gama de productos de uso diario, como plásticos, pinturas, detergentes y medicamentos. Además, pueden asumir roles de gestión de equipos en una planta o participar en el diseño de instalaciones de procesamiento, trabajando en conjunto con los químicos industriales.
- Farmacéuticos/as industriales: Al igual que los mencionados anteriormente, estos profesionales tienen la responsabilidad de garantizar la seguridad y eficacia de los productos, enfocándose exclusivamente en los medicamentos. Dependiendo de la etapa del proceso en la que se encuentren, es posible que necesiten conocimientos legislativos y mantenerse actualizados sobre las regulaciones para asegurar la comercialización de los fármacos.
El alto porcentaje de contrataciones indefinidas, sumado a los salarios medios elevados que perciben los profesionales del sector, genera un mayor inmovilismo y dificulta a las empresas poder atraer a nuevos candidatos. Las principales estrategias que pueden adoptar los departamentos de recursos humanos para atraer y retener talento no solo deben enfocarse en políticas de retribución adecuadas, sino que también deben fijar su foco en la implementación de planes formativos y de carrera.