El crecimiento del e-commerce en España ¿una oportunidad?
La venta online está revolucionando la forma en la que los consumidores abordan el proceso de compra y este 2015 ha sido el año en que la adopción de las nuevas formas de consumo ha tenido mayor impacto.
En España un 18% de las empresas ya vende online y aunque aún estamos por debajo de la media europea, que se sitúa en el 19%, esto se puede entender como una oportunidad pues el mercado está lejos de alcanzar su madurez.
Mientras en Reino Unido un 81% de los consumidores afirma comprar online, en España Eurostat certifica que un 48% ha comprado bienes o servicios online en 2014. Sin embargo, datos de 2015 del IAB apuntan que el número de compradores online está en auge y que desde 2013 ha crecido un 52% situándose en 62% el número de internautas que utiliza Internet como canal para sus compras.
Haciendo un seguimiento de los últimos datos publicados, el volumen de comercio electrónico B2C en España alcanzó los 16.259 millones de euros en 2014 con un crecimiento del 11,3% (ONTSI), sin embargo, en el segundo trimestre del 2015 la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) reporta un crecimiento de un 27% interanual.
¿Podemos interpretar estos datos de facturación como los primeros signos del auge del e-commerce en nuestro país?
El pasado noviembre, Bertrand Amaraggi, Country Manager de PrestaShop para España aseguraba que “España es uno de los mercados con mayor proyección en Europa desde un punto de vista digital” y es que las previsiones de facturación para 2016 se sitúan en 24.700 millones de euros segín PrestaShop.
Al igual que se espera un crecimiento del consumo en general, cabe esperar que la confianza de los consumidores, que ha sido bastante positiva durante 2015, se reponga tras los últimos datos de enero y que las cifras de crecimiento económico del país se mantengan a niveles del 2015 (CEOE)
¿Y el sector de los productos infantiles?
Obviamente, la entrada de la generación millennial en el mercado junto a la actual coyuntura económica es una oportunidad para las marcas, cada vez más presentes en el canal online, pero también para los detallistas, que deben encontrar la fórmula para conquistar a los consumidores a través de los estos nuevos canales.
Actualmente un 12% de los consumidores online asegura que ha realizado compras de productos para bebés en Internet, un 55% ha comprado moda y un 30% ha adquirido juguetes. (Cetelem)
Esto me lleva a reflexionar sobre el sector puesto que si realmente estamos en el momento adecuado para lanzarnos al mercado y si las previsiones de crecimiento global para el e-commerce se cumplen, hay un margen de oportunidad muy amplio para la venta online de productos infantiles. Ya hay empresas que llevan tiempo trabajando en este sentido y en 2015 han dirigido sus esfuerzos hacia la omnicanalidad, una de las tendencias estratégicas clave para este 2016.
