Nuevos hábitos de compra en el sector de la puericultura
Los hábitos de consumo están cambiando en los últimos años y han ido evolucionando para adaptarse a los nuevos avances tecnológicos, también en la puericultura.
El patrón de consumo está cambiando a nivel general y vivimos ahora en una sociedad saturada y acelerada, lo que hace que las soluciones fáciles y rápidas sean bien vistas por la sociedad, también en el ámbito del consumo. También están cambiando las familias, que cada vez más apuestan por destinar un mayor presupuesto al consumo de experiencias y el ocio, por delante de otros bienes materiales. Todos estos cambios también están teniendo un impacto en el sector de la puericultura, “un sector en el que los cambios son muy notables, porque tenemos menos hijos y cada vez los tenemos más tarde”, tal y como apunta la economista Núria Beltrán.
Nuevos hábitos de compra
Los hábitos de compra, también en puericultura, están en constante evolución y los nativos digitales ya se están incorporando a la maternidad y la paternidad. Se trata de una generación que consume de un modo muy diferente a sus antecesores, con internet y las nuevas tecnologías como su entorno natural, lo que provoca que cada vez un mayor número de compras se acabe realizando en la red. En este sentido, los profesionales señalan que cada vez se observan más compras online dentro del sector, aunque en algunas categorías todavía no es decisiva. Así, segmentos como la seguridad infantil en el automóvil o la puericultura rodante siguen atrayendo al consumidor hacia la tienda física. Aunque hay que tener en cuenta que llegan mucho más informados y con una idea mucho más clara de lo que están buscando.
El consumidor en el sector de la puericultura
Según los comentarios recogidos de los profesionales a lo largo del año, podemos decir que el consumidor actual destaca por estar mucho más informado que hace una década. Esto provoca que el consumidor tenga más capacidad para comparar y buscar siempre la mejor opción de compra, lo que lo convierte en un consumidor más reflexivo y más exigente. Asimismo, el consumidor de puericultura es también un consumidor más versátil, con un estilo de vida más efímero e intenso, que busca exclusividad, personalización y experiencias. Los profesionales también destacan, además, que el consumidor actual busca productos seguros, calidad en los artículos que compra, un buen diseño y que aporten un valor añadido a la compra. Se trata, así, de un consumidor exigente en calidad, austero en el precio y condicionado por el diseño.
Asimismo, la búsqueda de una mayor comodidad y la adaptabilidad a las nuevas tecnologías está cambiando las variables que los nuevos padres tienen en cuenta a la hora de realizar una compra. La seguridad, un aspecto fundamental en la compra de productos de puericultura, está empezando a dejar paso a la comodidad de los padres como factor para tener en cuenta al realizar una compra. El consumidor actual está evolucionando con las nuevas tecnologías, y ello provoca que la manera en la que conecta con el sector sea a través de los canales digitales -acabe comprando o no en algún canal online-. Los padres confían cada vez más en las nuevas tecnologías y en internet para realizar sus compras, ya que les ofrece comodidad y flexibilidad. Además, el consumidor actual ha adquirido el hábito de esperar a realizar sus compras en campañas de ofertas y promociones especiales.
También los estilos de vida de los nuevos padres y madres están cambiando. Los hábitos de consumo varían de la mano de una sociedad que se mueve y viaja más, que vive en hogares más pequeños y que a pesar de buscar lo mejor para su bebé, lo hace de una forma más responsable. El producto que buscan los padres de hoy en día, además, debe ofrecer unas prestaciones reales, teniendo en cuenta que tienen mucha más información a su alcance y que pueden comparar más fácilmente las características de los productos. Lo estándar ya no vale y los atributos básicos por los que antes se adquirían los productos para el bebé han cambiado. Y a todo ello debemos sumarle que en los últimos años han aparecido diferentes plataformas digitales que promueven el préstamo y la segunda mano, prácticas cada vez más extendidas.