Entrevista a Antonio de Mora, secretario general de Asemesa
El Órgano de Solución de Diferencias (OSD) de la Organización Mundial del Comercio (OMC) trató el pasado mes de marzo la problemática relacionada con los aranceles de EE. UU. a la aceituna negra. De este encuentro se extrajo que EE. UU. habría aceptado adoptar el informe del panel, manifestando así su deseo de trabajar con la Unión Europea (UE) para resolver la disputa. Ante esto, la Asociación Española de Exportadores e Industriales de Aceituna de Mesa (Asemesa), de la mano de su secretario general, Antonio de Mora, ha respondido a algunas cuestiones relacionadas con el futuro del sector de la aceituna de mesa.
¿Cuál es su perspectiva sobre la voluntad manifestada por Estados Unidos de resolver esta disputa de manera amistosa? ¿Cree que esto podría abrir nuevas oportunidades para la industria española de aceitunas de mesa en el mercado estadounidense?
La nueva situación es muy parecida a la que se dio tras el fallo del panel inicial en 2021, en el que EE. UU. decidió aceptar y mostrar la mejor voluntad de aplicarlo. En esa ocasión la única intención fue dilatar el procedimiento ya que lo que hizo fue interpretar el fallo en un sentido totalmente contrario a la UE para, finalmente, hacer unas ligeras modificaciones con el único efecto de reducir el arancel por las subvenciones pasando el total del 35 al 31%.
Ese precedente nos invita a desconfiar de la verdadera voluntad de EE. UU. de corregir la situación. Por eso, esperamos que el Gobierno de España y la Unión Europea exijan a EE. UU. que dé pasos inmediatos para comprobarlo y acabar con una situación manifiestamente injusta y contraria a los principios de la OMC. Aunque seguramente no será posible recuperar la posición que teníamos antes de los aranceles, su eliminación o reducción sustancial permitiría poder competir en igualdad de condiciones e incrementar nuestras exportaciones.
¿Cuáles han sido los desafíos enfrentados por los exportadores españoles de aceitunas de mesa durante esta disputa? y ¿Qué oportunidades ve para fortalecer la posición competitiva de los productores españoles de aceitunas de mesa en el mercado global en el futuro?
Posteriormente, el gran reto ha sido mantener la unidad en la asociación para poder seguir defendiéndonos - por todas las vías legales posibles - y participar en todos los procedimientos que se abrían, ya que de no hacerlo lo perderíamos todo. Para fortalecer nuestra posición necesitamos que todas las ramas del sector sean competitivas y no solo la industria, necesitamos variedades adaptadas a las necesidades del mercado y extender la recolección mecanizada a todo el sector y, en general, mentalidad global tanto en la venta como en la compra.
¿Qué medidas considera que deben tomar tanto el Gobierno de España como la Unión Europea para garantizar que EE. UU. cumpla con sus compromisos y elimine los aranceles impuestos? ¿Cree que hay riesgos para la estabilidad futura de esta relación?
Por otra parte, hay que tener en cuenta que, aunque para nosotros es importante, en el conjunto de las relaciones comerciales entre EE. UU. y la UE esta disputa no tiene gran relevancia económica, razón por la cual debería estar resuelta ya hace mucho tiempo y, por supuesto, no debe suponer ninguna amenaza para las relaciones diplomáticas entre los contendientes.
¿Cree que existe la posibilidad de que la UE busque medidas de represalia si EE. UU. no cumple con las decisiones de la OMC?
¿Qué acciones ha llevado a cabo Asemesa para apoyar a sus miembros durante este conflicto y qué papel ha desempeñado en las negociaciones con las autoridades españolas y estadounidenses?
Nuestro trabajo ha consistido en la organización de la defensa y en la interlocución con las administraciones implicadas tanto de la UE como de España. Creo que ha sido muy importante el trabajo con los despachos de abogados que ha requerido una colaboración permanente y la aportación de muchísima información de las empresas que se ha ordenado y canalizado a través de Asemesa en gran parte. Por otro lado, hemos tenido que hacer un gran esfuerzo en comunicación para que la UE se implicara en el asunto y llevara el caso a la OMC, algo que no estaba claro al principio y que hubo que trabajarlo por distintas vías.
¿Cuál es su visión sobre el futuro de las exportaciones de aceitunas de mesa españolas en el mercado internacional a nivel general?
En otro sentido, aparte de este conflicto, ¿Qué otros desafíos habéis experimentado?
Finalmente, otra gran preocupación es la posible desaparición de la figura del trabajador fijo discontinuo que es muy importante en sectores como el nuestro y que la política actual del Ministerio de Trabajo está amenazando.