La precisión de un reloj suizo de gama alta

La compañía goza de una excelente reputación internacional, gracias a su pasión por las soluciones innovadoras y a su espíritu tecnológico pionero. Como una de las marcas líderes a nivel mundial en el segmento de relojes de gama alta, IWC produce no sólo relojes deportivos, como los de aviador y de buceo, sino también cronómetros de alta complejidad para el segmento de la Alta Relojería. Varios modelos cuentan con funciones especiales, tales como el ‘calendario perpetuo’, inventado por IWC, el cual muestra la fecha correcta, incluso en los años bisiestos. De vez en cuando, los relojeros trabajan en una obra maestra durante varias semanas.

La producción de IWC se ejecuta con la precisión asociada a un reloj suizo. La búsqueda de perfección de la compañía exige una maestría artesanal, así como excelentes especialistas con muchos años de experiencia. Un sistema sofisticado de control de calidad es una necesidad absoluta. Para que un reloj pueda mostrar siempre el tiempo exacto, cada una de las diminutas piezas deben encajar perfectamente entre sí. Las tolerancias para muchas de estas dimensiones son de tan sólo 2 micrométros. Por tener una referencia, el diámetro de un cabello humano es de alrededor de 100 micrómetros. Las características especiales de un reloj IWC suponen una complejidad adicional en la inspección de diseño, montaje y calidad de estas fabricaciones.

Hasta hace cuatro años, IWC se había basado principalmente en un control de calidad realizado con mediciones manuales, utilizando diversos útiles de control para los diferentes modelos y tamaños de relojes. Pero entonces presentó un nuevo proceso que permitía hacer afirmaciones diferenciadas en cuanto a control de calidad con un mínimo esfuerzo – con la Metrología Industrial de Carl Zeiss de su lado: “IWC Schaffhausen es una compañía de crecimiento internacional que combina la precisión, tecnología, perfección y originalidad en sus productos”, dice Bregel. “En el transcurso de nuestra expansión, hemos decidido confiar en un socio de control de calidad que también viva estos valores”, afirma Bregel explicando la asociación con Carl Zeiss. Las altas exigencias de la IWC se reflejan ahora en un concepto de control de calidad eficiente, que abarca desde procesos adaptados y máquinas de medición adecuadas, además de un software apropiado para la configuración de los programas de medición y hasta un sistema de gestión de datos inteligentemente estructurado. La clave para la selección de Carl Zeiss: el enfoque global. Después de todo, hay mucho más de un proceso de medición que de la máquina como tal. De acuerdo con Thomas Bregel, la experiencia y el desarrollo de conocimientos especializados también son factores clave, algo por lo que son conocidos los expertos en óptica de Oberkochen.

IWC ha utilizado las máquinas de medición de coordenadas de Carl Zeiss para el control de su producción desde el año 2007, para la inspección inicial, intermedia y final.

Complementan al equipo de control manual, y a diferencia de los sistemas de medición óptica del pasado, son ideales para comprobar las dimensiones de altura y perforaciones. La asociación comenzó en 2007 con cuatro máquinas de medición por óptica y contacto O-Inspect en los laboratorios de medición de los dos centros de producción en Schaffhausen y Neuhausen. Los sistemas de sensores múltiples comprueban la posición y características de la forma de las diferentes piezas del reloj. Las máquinas inician la medición con tan sólo pulsar un botón. Para una medición por contacto, un palpador escanea en contínuo la pieza sobre la base del programa de medición especifico. Los datos adquiridos se utilizan automáticamente para la evaluación estadística. La O-Inspect verifica las curvas y contornos ópticamente por medio de una cámara integrada. Además de la O-Inspect, la empresa dispone de dos máquinas de medición por coordenadas Zeiss Duramax, en funcionamiento desde 2007. Debido a su pequeño tamaño y a su capacidad para trabajar bajo distintas fluctuaciones de temperatura, estos robustos equipos se pueden utilizar directamente en la línea de producción. Los resultados están rápidamente disponibles para que el personal pueda poner en práctica las correcciones directamente en la producción.

“Con las nuevas máquinas de medición por coordenadas, estamos logrando el máximo de precisión en la medición”, añade Thomas Bregel. El nuevo concepto de medición ha permitido a IWC aumentar su eficiencia en el control de calidad. La información adicional emitida por las máquinas de medición acerca de una pieza, es importante para la corrección de los ajustes y herramientas de la máquina. Por otra parte, los diseñadores reciben información más precisa sobre la viabilidad de los componentes que han diseñado: no sólo saben si una pieza se ajusta a los requisitos del plano, sino también si se puede fabricar. Los resultados de la medición también le permiten saber a los trabajadores donde se han producido desviaciones. Estos conocimientos son utilizados por los diseñadores para mejorar los futuros diseños.

Medición 3D en sólo unos minutos

Los resultados de la medición no solo contienen más información, sino que también el nuevo concepto de medición reduce el esfuerzo en el control de calidad. Una sola máquina es todo lo que ahora se necesita, en lugar de múltiples calibres de medición. Las maquinas de medición por coordenadas realizan mediciones complejas 3D en tan sólo pocos minutos. Controlar la posición de 2 taladros desde la parte inferior de la placa o la superficie plana de la pieza del reloj, es ahora un juego de niños. Los sistemas de paletizado, con el kit correspondiente de amarre de las piezas pequeñas, también permiten la preparación de éstas para la medición siguiente mientras aún se está ejecutando una medición, en consecuencia aumentando el rendimiento y la optimización de las máquinas.

Además, los técnicos de medición pueden configurar una nueva serie sobre la base de los planos diseñados justo desde el inicio -incluso antes de que las primeras piezas hayan sido producidas. “Esto por sí solo es un aspecto clave en nuestra decisión de trabajar con Carl Zeiss”, recuerda Thomas Bregel. Las mejoras no son el único resultado de las máquinas de medición de coordenadas; el software PiWeb y Calypso son también parte del concepto de medida. Todas las máquinas de medición son programadas fuera de línea con Calypso. Dependiendo de la pieza, los técnicos especifican las características medidas sobre la base del modelo CAD. Una vez la pieza ha sido creada, puede ser puesta en marcha fácilmente por personal sin formación.

La conexión en red de las máquinas y un concepto de carga y operación integral, simplifican la operación de las máquinas. Esto permite a los empleados medir flexiblemente cada componente con cada una de las seis máquinas, para reducir cuellos de botella. El software de documentación de calidad PiWeb conecta las máquinas basándose en la web. Todos los resultados de medición son manejados desde una central de base de datos. PiWeb apoya el análisis, evaluación estadística, preparación y documentación de la información. “Con PiWeb, podemos fácil y transparentemente diseñar los registros de medida. Esto fue vital para la aceptación del personal de producción” señala Bregel.

Por otra parte, los resultados pueden ser usados a largo plazo para optimizar el diseño de los futuros modelos. IWC ha estado desarrollando cronómetros con retención de valor durante más de 140 años. Su funcionalidad compleja y excelente facilidad de uso son codiciadas por los amantes de los relojes que esperan más de sus cronómetros que la hora exacta. Ellos están, sin duda, esperando ver ansiosamente qué desarrollos tienen reservados para el futuro los ingenieros de Schaffhausen. Independientemente de lo que depare el futuro, el relojero seguirá confiando en Carl Zeiss para sus actividades de control de calidad: “Estamos seguros que la empresa será capaz de ayudarnos a dominar los retos que en el futuro podamos encontrar”, indica Bregel.