Surplex subasta 150 máquinas de un proveedor checo de polímeros
La crisis en el sector automoción no solo sacude a los fabricantes, sino en especial a los proveedores. Incluso las empresas establecidas acusan dificultades cuando caen los encargos, se encarecen los materiales y la energía o sus clientes principales cambian sus cadenas de suministro. Un proveedor checo de polímeros tuvo que detener la producción; ahora se subastan unas 150 máquinas de gran valor procedentes del concurso de acreedores a través de la web de Surplex.

Pero no solo afecta a aquellas empresas que proveen los componentes clásicos para los motores de explosión, también se encuentran con dificultades las empresas especializadas con un catálogo de productos amplio o que producen piezas que no dependen de la forma de propulsión. La crisis podría deberse a varias causas:
- Menor demanda. Los fabricantes de equipo original llevan la batuta en el mercado de la industria automotriz. Muchas veces, los fabricantes transmiten sus subidas de precios a los proveedores. Si retienen la producción —por fluctuaciones en la demanda, aumento de los costes o cambios en las condiciones de mercado— ello también repercute en los proveedores. Los encargos existentes se reducen, se aplaza la recepción o se eliminan directamente. Al mismo tiempo, algunos fabricantes cambian sus cadenas de suministro, potencian la producción propia o cambian a proveedores más baratos.
- Los costes elevados de la energía. La transformación de polímeros, del vidrio y del metal son sectores con un mayor consumo de energía. La subida desproporcionada de los costes de electricidad y del gas han elevado notablemente los costes de producción. Muchas empresas tienen dificultades añadidas con la subida repentina del precio de la energía como consecuencia de la guerra en Ucrania, una carga económica que aún se hace notar.
- La presión del mercado sobre las pymes. La industria automotriz se caracteriza por proveerse de pequeñas o medianas empresas. Mientras los grandes grupos empresariales disponen de reservas y poder de negociación, los proveedores pequeños son más vulnerables, porque cuanto más pequeña sea una empresa, más difícil le resulta amortiguar las reducciones repentinas en los encargos o las subidas de los costes.
- Tiempos prolongados para la reorientación a nuevos mercados. Aunque, en principio, muchos proveedores también pueden producir para otros sectores además del automotriz, la adaptación rápida es poco factible. Las certificaciones, los ajustes de la maquinaria y las relaciones con clientes nuevos precisan un tiempo.

Los cambios actuales del mercado ya han llevado al concurso de acreedores a varios proveedores de automoción. La pérdida de puestos de trabajo y conocimientos no es la única consecuencia del cierre de una planta; otra consecuencia es que máquinas de gran calidad salen al mercado de la maquinaria usada.
Un ejemplo actual es la inminente subasta industrial resultante del concurso de acreedores de un proveedor de automoción en Linhartice (República Checa). La empresa estaba especializada en piezas de plástico transparente que se empleaba especialmente en los faros de los coches, aunque también en embalajes y sanitarios, en la tecnología médica y eléctrica. Hasta el 26/3 se encuentran a la venta cerca de 150 máquinas modernas y de gran calidad, entre ellas, inyectoras de plástico, taladros profundos CNC, centros de mecanizado de 5 ejes y numerosos taladros y fresadoras. Los interesados podrán inspeccionar las máquinas personalmente previa cita.
