La cultura de seguridad en productos de construcción para evitar accidentes
27 de abril de 2009
Lafarge es un importante cliente de Volvo y, al igual que Volvo, el interés por sus empleados forma parte de su cultura, así como encargarse de su gente en todos los aspectos. Dirigidos por el fuerte compromiso de la dirección, reducir los riesgos es una prioridad para todos. El lema de la compañía es el siguiente: 'Nuestro objetivo es cero accidentes'. Su ejecutivo Bruno Lafont ha situado la seguridad como la prioridad número 1 de Lafarge: “Nos propusimos reducir a la mitad los accidentes de trabajo entre 2006 y 2008. Hemos alcanzado este objetivo y, a largo plazo, el Grupo Lafarge aspira a conseguir tener cero accidentes”.
Esto es un gran reto, ya que este gigante dedicado al cemento, el hormigón y los áridos, con un volumen de negocio de 17.600 millones de euros, tiene más de 90.000 empleados en 76 países y en más de 2.000 plantas de producción. Además, el Grupo Lafarge tiene actividades en países en vías de desarrollo, en que el control y la regulación de los riesgos es menos habitual. Para abordar la seguridad, Lafarge rehúsa aceptar que los accidentes son inevitables.
Colaboración de los empleados
Centrarse en las acciones y las condiciones de trabajo inseguras es impresionante. Cada empleado lleva una libreta de notas en la cual escribe cualquier cosa que ve y que puede ser potencialmente peligrosa, y las clasifica desde un despiste hasta acciones o condiciones de trabajo inseguras. Lafarge espera recibir, sólo en el Reino Unido, más de 600 informes de este tipo al mes. “Esto demuestra una cultura abierta. Donde la gente sabe que puede informar sobre asuntos, con la seguridad de que se adoptarán acciones correctivas”, manifiesta Morris.
Adoptar acciones es importante ya que la falta de respuesta por parte de la dirección de la empresa socava el interés por parte de los empleados. Si la gente informa de algo y no se hace nada, nunca más volverán a hacerlo. "Pero esto es un acuerdo recíproco", comenta Morris. "Si la empresa adopta medidas y todo el mundo está de acuerdo en un modo más seguro de hacer las cosas, a partir de entonces todo el mundo tiene que hacerlo de esa manera. Mejorar la seguridad exige un acuerdo recíproco y un esfuerzo por parte del equipo. Decirle a la gente lo que tiene que hacer, sólo funciona cuando el jefe se encuentra presente. Pero cuando se incluye a la gente en el proceso, las cosas siguen haciéndose con seguridad incluso cuando el jefe no está".
El ejemplo de Reino Unido
Anualmente se celebra un Mes de la Seguridad en todos los países en que opera Lafarge. Se implica a los proveedores, a las autoridades locales y a las familias de los trabajadores. Se organizan actividades que van desde concursos para niños hasta barbacoas y se entregan trofeos a la seguridad. “Los 'días de las familias' son especialmente eficaces”, añade Geraint, “y es que no hay mayor motivación para que los padres lleguen sanos y salvos a casa por la noche que tener a sus propios hijos diciéndoles que tengan cuidado”.
Sistema de gestión de la seguridad
“Los equipos móviles todavía muestran un número desproporcionadamente alto de accidentes”, explica Miles Dobson, jefe de fabricación de Lafarge Aggregates UK, que es responsable de determinar los requisitos que deben cumplir las máquinas en Reino Unido. Con una flota de alrededor de 6.000 máquinas en todo el mundo, la compañía ostenta está a la cabeza cuando se trata del desarrollo de cualidades de seguridad relacionadas con las máquinas.
Más del 70% de las flotas de dúmperes articulados y palas cargadoras del Reino Unido están compuestas por máquinas Volvo. Entre las palas van de la Volvo L90F a la L220F. “Para eliminar ángulos muertos, cada pala cargadora va equipada con espejos retrovisores convexos, alarmas de marcha atrás y cámaras de visión trasera”, dice Dobson. “Las cargadoras de ruedas de la Serie F vienen ahora también equipadas con sistema de monitorización GPS CareTrack – y desde 2009 también llevarán montados sistemas de radar trasero. Queremos que nuestra gente trabaje a salvo, en cualquier parte del mundo en que se encuentren. Los sistemas móviles representan un riesgo notable. Los operadores necesitan tener visibilidad todo alrededor de la máquina y tener acceso a sus máquinas en condiciones seguras”, añade Geraint Morris. “Pero el gasto adicional es mínimo en relación con el coste total de la máquina. Los operadores agradecen la inversión realizada en su seguridad y son extremadamente cuidadosos con las máquinas que están orgullosos de manejar. Volvo tiene gran experiencia en este área y comprende las exigencias de Lafarge en todo lo relacionado con seguridad”, continua Morris. “A lo largo del tiempo nos hemos convertido en socios, de tal manera que podemos desarrollar juntos nuevas ideas técnicas para reducir nuestro potencial para hacer daño. Nuestra relación en cuestiones de seguridad es mútua – tenemos que desafiarnos mutuamente en beneficio de la industria y la seguridad de nuestro personal”.
Este trabajo en equipo les ha llevado a innovaciones tales como el desarrollo de sistemas de acceso asistido y pasarelas para excavadoras pequeñas en la clase de 20 toneladas. Pero proporcionar a las máquinas sistemas de seguridad no va a evitar en sí mismo los accidentes. "La mayoría de los incidentes están causados por la conducta de la gente, no de las máquinas" añade Miles Dobson. "Por lo tanto, tenemos que convencer a nuestra gente para que modifiquen su conducta para adaptarse a la situación en la que estén. Se pueden montar espejos retrovisores, pero para que sean eficaces es preciso convencer a los operadores de la necesidad de usarlos".