“Se desperdicia mucha agua a causa de válvulas inadecuadas”
Entrevista a Manuel Mateos de Vicente, doctor ingeniero de Caminos, Canales y Puertos e ingeniero técnico de Obras Públicas
Manuel Mateos de Vicente comenzó su andadura en el mundo de la geotecnia, especialidad tierras, en el laboratorio de campo para la construcción del aeropuerto de Torrejón y se doctoró en la Iowa State University. También cuenta con 50 años de experiencia en los distintos tipos de válvulas para conducciones de agua, un ámbito de trabajo en el que profundiza en esta entrevista.
Parece que ha centrado su interés profesional en dos de los cuatro elementos esenciales: la tierra y el agua, ¿siente que los domina?
He tratado de profundizar en esos dos elementos, en sus posibles usos y en su relación con el ahorro, con la sostenibilidad. Para ello tomé en mis años más jóvenes asignaturas dadas por los que eran considerados los más expertos del mundo y que estaban a la cabeza en Estados Unidos.
Ha investigado ampliamente las cualidades de las tierras con el fín de conseguir en la práctica soluciones económicas a grandes problemas. ¿Cómo resumiría sus mejores aplicaciones?
La tierra está por todas partes, bien sea arcillosa, limosa o arenosa. Por ello la he estudiado bajo esos tres aspectos para tratar el que tenga buena resistencia con el fín de ser usada en pavimentos y por ende, en cimientos, laderas y casas de adobe. Si se tiene interés, puede constituir una gran fuente de ahorro algo tan básico y simple como la propia tierra que está cercana a la obra que se quiera realizar. En España apenas se menciona esta especialidad, lo que considero un error.
La mayor parte de su vida profesional, durante 50 años, ha estado dedicada a la investigación sobre válvulas para condiciones de agua, siendo su empresa una de las pocas que sirven válvulas de grandes dimensiones.
En relación con los usos del agua me he concentrado en las conducciones y sus complementos, como las válvulas, sobre lo cual he escrito once libros. En España se perdía mucha agua desde su origen hasta el consumidor a causa de que se utilizaban válvulas inadecuadas en su diseño, o de mala calidad. Estoy también muy interesado en la conservación del agua, materia en la que me preparé ampliamente con profesores prominentes. No soy agrónomo y no puedo aplicar los principios de conservación del suelo, pero sí he dado conferencias sobre este tema.
En España hemos conseguido que las válvulas se seleccionen por su fiabilidad, aunque en muchos casos, prima el coste por encima de las prestaciones. Pero hay países donde puede perderse hasta el 70% del agua entre su origen y el consumidor. Es así que hemos sido contratados recientemente para analizar las pérdidas de agua en las conducciones de agua potable de Armenia, labor para la que ha sido seleccionado mi hijo Axel, experto en el tema y con una preparación básica que incluye Bachelor en Business Administration y Mechanical Engineer en St. Louis University y Master en Loyola University.
Vemos que sigue activo escribiendo, ¿contribuye en la enseñanza?
Doy conferencias en algunas universidades. En la Católica de Murcia soy profesor honorario. También doy conferencias no técnicas en diversas asociaciones.
¿Nos podría informar de otra investigación que haya hecho y que sea beneficiosa para la sociedad?
He sido, tal vez, quien más haya analizado e investigado la utilización de los hollines de las centrales térmicas que queman carbón. Este trabajo está en unas 20 ponencias. Llegando hasta el extremo se me ocurrió tratar de encontrar si algunas de esas materias pudieran ser cementos y, efectivamente, algunas lo eran. Actualmente se están usando miles de toneladas diarias de tales hollines habiendo contribuido así a evitar que millones de kilos de CO2 vayan hoy a la atmósfera.
Me preocupan enfermedades como el cáncer, la esclerosis múltiple, el alzhéimer, el parkinson porque no se sabe cómo se originan y sabiéndolo podríamos curarlas. Creo que estoy en buen camino para averiguarlo: aplicando mis conocimientos de fluidos para analizar los de nuestro cuerpo, expresados en diez libros y mis cerca de 40 ponencias donde investigo medio centenar de productos químicos. Tengo un libro ‘La Salud’ con 220 entradas que está enwww.manuelmateos.info (gratuíto).
Ahora sigo investigando para que haya menos accidentes de la circulación sin culpar al conductor. Han aceptado cientos de mis propuestas pero aún quedan decenas que se deberían llevar a la práctica para evitar accidentes:mejorando las glorietas, economizar miles de litros de combustible al hacer que la circulación discurra con menos atascos.